JORGE RUBIO (Majadahonda). Tal y como estaba previsto, miembros de la Guardia Civil han desalojado a las 27 familias «okupas» que se encontraban viviendo en las denominadas «Casas Rojas» de Majadahonda. Un proceso que se ha resuelto sin mayores incidentes y dentro de la normalidad debido en parte al gran despliegue policial realizado en torno a este bloque de edificios. Aunque la normalidad fue prácticamente una constante en los alrededores, algunos vecinos se acercaron hasta la zona dando lugar a algunos enfrentamientos verbales con los miembros de los grupos antidesahucios. Un rifirrafe que finalmente no pasó de los abucheos. Las fotografías de Olmo Calvo (El Mundo) y Kike Para (El País) ilustran esta información y a juicio del Comité de Redacción de MJD Magazin son los mejores trabajos realizados sobre la cobertura informativa del suceso. Enhorabuena a ambos.


En este sentido, cabe señalar que pese a la tensa situación que se vivía en la zona, todo el mundo actuó con cabeza y no hubo que lamentar incidentes mayores. Una situación para la que la policía local se había preparado, ya que durante todo el proceso de desalojo no dejaron de acercar material antidisturbios hasta la zona, en previsión de que el ambiente se caldease más de lo esperado. A medida que el tiempo pasaba, las familias fueron abandonando sus casas y se fueron acercando hasta las carpas que los servicios sociales y el Ayuntamiento habían preparado para la ocasión. Al final del desalojo los ánimos entre los «okupas» desalojados eran bajos y todos ellos señalaban a un único culpable de esta situación: el Ayuntamiento de Majadahonda. Mientras unos se resignaban a su suerte, otros no daban la batalla por perdida. «No todos los días esto va a estar así de blindado, volveremos a entrar en nuestras casas», sentenció uno de vecinos desalojados.

Las fuerzas policiales habían acordonado la zona estableciendo un perímetro de seguridad al que se impedía el acceso de cualquier persona no autorizada. En el lugar se realizó un gran despliegue por parte de numerosos medios de comunicación que se situaron en los 3 puntos informativos donde se podían vislumbrar los distintos accesos al edificio. También estuvieron presentes miembros de Colectivos Antidesahucios y de de plataformas como los Afectados por la Hipoteca. Unas agrupaciones que habían estado movilizándose días antes a través de las redes sociales con el objetivo de asistir a las familias «okupas» y en última instancia, evitar que se produjese el desalojo.

Sin embargo, a pesar de la tensión que impregnaba esta jornada, el «lanzamiento» se produjo dentro de la más absoluta normalidad y sin incidentes dignos de mención. Hacia las diez y media de la mañana, una veintena de miembros de la Guardia Civil de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USECI) equipados con material antidisturbios procedieron a iniciar el operativo. Las fuerzas de la Guardia Civil saltaron las vallas y equipados con arietes procedieron a derribar las puertas del primer bloque de casas. Tras la entrada de la USECI comenzaron a salir los primeros ocupantes, los cuales llevaban consigo bolsas y maletas con sus pertenencias. Toda esta actuación fue acompañada con los gritos de protesta de los grupos anti desahucios desplazados hasta la zona. «Vergüenza me daría ser policía» corearon mientras lanzaban críticas a la actuación de la Guardia Civil y poniendo de manifiesto que en esas casas vivían familias con hijos menores en edad escolar.

A medida que pasaban los minutos, más vecinos fueron abandonando sus casas, todos ellos de forma voluntaria. Poco a poco se iba produciendo el goteo de «okupas» que iban abandonando los que hasta la fecha habían sido sus hogares durante casi 7 años. Un proceso que a pesar de las circunstancias, se estaba realizando dentro de la normalidad. Sin embargo, la situación pudo complicarse, ya que dentro del inmueble un grupo de Stop Desahucios se había atrincherado, negándose a salir. Temiendo un conflicto, el abogado de las familias, José Manuel Barroso, actuó como intermediario, permitiendo dar una salida pacífica de este grupo.

 

Majadahonda Magazin