JULIA BACHILLER. Recientemente el alcalde de Majadahonda reconocía públicamente que su partido lleva “3 fines de semana saliendo a la calle y Majadahonda ha respondido apoyando a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad”, a lo que añadía: “mientras la izquierda defiende a los que les atacan, los españoles de a pie lo tenemos claro”. Y finalizaba con el hashtag de la recogida de firmas que ha llevado a cabo en esos días bajo el lema: “Yo defiendo a la Policía”. En cada ocasión en las que estas reuniones en la calle han tenido lugar, se ha adjuntado la pertinente fotografía de grupo con su presencia y la de algunos concejales y afiliados, llegando a sumar el 28 de febrero un total de 16 personas y el 14 de marzo 13 personas, contando con el que realizó las fotografías, todas ellas sin mantener las distancias para inmortalizar el momento. Desde que se decretó el estado de alarma, una de las medidas tomadas con el fin de contener la propagación de la infección fue que «la permanencia de grupos de personas en espacios de uso público, tanto cerrados como al aire libre, quedará condicionada a que no se supere el número máximo de 6 personas, salvo que se trate de convivientes“. Desconocemos si ha sido un acto de rebeldía en estos días por parte del Partido Popular, ya que minutos después de su última presencia en las calles, el propio edil declaraba que “las ganas de libertad se van a oír hasta en Moncloa”. 

Y es que en estos fines de semana en los que el Partido Popular ha estado en las calles de Majadahonda, además de la recogida de firmas en apoyo a las fuerzas de seguridad, han añadido su campaña en apoyo de la candidatura a la Comunidad de Madrid, que lidera la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso. Resultaría curioso recordar ahora como en uno de los primeros plenos del Ayuntamiento que tuvo lugar tras el confinamiento, el alcalde reconocía su «incomodidad» ante un minuto de silencio que se realizó por un caso de violencia de género. Según propia confesión, percibió que los transeúntes se paraban a secundar el acto, algo que valoró en su momento como «inadecuado«, ya que provocaba que la gente se parase y aglomerase, poniendo en riesgo la seguridad sanitaria. De similar manera, en estos días él y sus concejales han solicitado que los vecinos y transeúntes se parasen a firmar, sumando así la concentración de personas a la que ya de por sí traía la de militantes. 

¿No es igualmente «inadecuado» o lo es según las circunstancias partidistas de cada cual?. Con todo esto tan solo quiero llegar a una valoración personal: considero que nuestros gobernantes son los primeros que deben dar ejemplo a la población y si quieren demostrar que defienden a la policía, lo deben hacer con hechos, no con firmas, cuyo destino y efecto final desconocemos. Si tantas ganas tienen de salir a la calle para compartir con los vecinos sus quejas e inquietudes, que estas se centren en mejorar el municipio, pues tan solo se les escucha en campaña electoral para conseguir su voto. La limitación de reunión al aire libre tiene un máximo de 6 personas (Diario ABC).