AGENCIA EFE. El joven majariego de origen marroquí Boubkar El Aiz El Attar (20 años), detenido el 18 de diciembre de 2017 en Majadahonda, ha aceptado durante el juicio celebrado este miércoles 11 de diciembre (2019) una condena de 3 años de cárcel por el delito de auto adoctrinamiento del terrorismo, tras llegar a un acuerdo de conformidad con la Fiscalía. El joven admitió haber mostrado afinidad con organizaciones terroristas a través de diferentes redes sociales, desde donde estaba suscrito a contenidos que alababan la labor del grupo violento Daesh. El acusado, que se enfrentaba a una petición de la Fiscalía de 7 años de cárcel, una multa de 4.800 euros y el cierre de los perfiles de diversas redes sociales, ha negado al comienzo de la vista, celebrada en la Audiencia Nacional, ser culpable de los hechos encausados, y rehusó aceptar el acuerdo, tras lo que su letrado solicitó al tribunal la suspensión del juicio aunque finalmente se desdijo, aceptó el acuerdo y confesó los hechos. El fiscal ha sostenido en la vista que la «creciente identificación» del acusado, que residía en Majadahonda (Madrid), «con los grupos seguidores del movimiento yihadista global y con las actividades violentas de los mismos» se ha podido comprobar con el análisis de sus publicaciones y de las cuentas a las que seguía. El fiscal ha indicado que el acusado «consultaba frecuentemente páginas sobre el manejo de drones y disponía de uno, con el cual había grabado actividades públicas de la ciudad donde vivía» y también «había consultado aplicaciones sobre la conducción de camiones». Ha considerado que el perfil de Telegram del acusado es el «más explícito en cuanto a la exhibición de la iconografía del autodenominado Estado Islámico y de imágenes que muestran una adhesión a estética del combatiente propia de Daesh«.


El joven yihadista en la Gran Vía de Majadahonda

El abogado de la defensa ha explicado a la Sala que no estaba preparado para celebrar el juicio, ya que su representado en todo momento había manifestado que aceptaría el acuerdo, por lo que ha interesado la suspensión, además, para que el acusado tuviera oportunidad de conseguir un nuevo letrado. El presidente de la Sala ha rechazado suspender la vista, amparándose en la Ley de Enjuiciamiento Criminal, y ha determinado que continuara la celebración del juicio como se había señalado. No obstante, momentos después y tras ser preguntado nuevamente, el acusado finalmente reconoció los hechos y ha aceptado la condena acordada como autor de un delito de auto adoctrinamiento del terrorismo, así como 1 año de libertad vigilada. Ha añadido que consiguió «información relacionada con «actividades armadas, técnicas de entrenamiento y armamento, forma de encriptar mensajes» de diversos grupos y doctrina que les inspira a través de las páginas consultadas, los vídeos a los que presuntamente accedía y las conversaciones mantenidas en diferentes chats. Asimismo, resaltó su participación en la creación de una página en Facebook con el nombre de «una de las agencias propagandísticas más potentes de Daesh responsable de la difusión de material propagandístico de la organización terrorista». En ese sentido, ha hecho hincapié en que entre los seguidores del acusado en Facebook había algunos con «un perfil identificable» con miembros de Daesh y ha resaltado vídeos en sus redes que «contienen iconografía y contenidos que expresan adhesión al mensaje y a la labor de Daesh», así como comentarios en los que muestra «afinidad con organizaciones terroristas».

El juez Guevara: «¡tomaduras de pelo, ni una!»

La Voz de Galicia informa además de un incidente procesal durante el juicio: «El presidente de la Sección Tercera de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Alfonso Guevara, ha abroncado este miércoles a las partes implicadas en el juicio a un acusado de auto adoctrinamiento yihadista por no respetar el orden reglamentariamente establecido a la hora de celebrar el acto de enjuiciamiento: «41 años celebrando juicios, tomaduras de pelo ni una«, ha espetado. «He dicho que si se conformaba con las penas primeramente solicitadas y dice que no. Que si había alguna cuestión previa y me dicen que no. Abro el juicio oral y de repente, que sí, que me conformo, que tengo una cuestión previa que plantear… O rompemos la Ley de Enjuiciamiento o como me la tuve que estudiar y sigo estudiándomela, la aplico. Las conversaciones de pasillo son de bar. No es un juicio oral. Esto es una tomadura de pelo y estamos consintiéndolo todos. Pero yo, me matarán, pero sigo aquí», ha afirmado.


El joven yihadista de Majadahonda admite su culpa y acepta la pena

Críticas al instructor: Sin embargo, antes de enunciar el visto para sentencia por conformidad, el presidente del Tribunal ha añadido una crítica al Juzgado de Instrucción que ha llevado su caso y que «tampoco ha hecho sus deberes» porque «informó a la Sala 15 días antes de cumplir los dos años» el acusado en prisión provisional «teniéndolo ahí en el juzgado sin hacer nada». Ha acordado que se mantenga en la cárcel hasta que se dicte la sentencia.  Finalmente, ha tomado la palabra el fiscal, que ha rebajado a tres años la petición de condena a prisión por un delito de auto adoctrinamiento, con un año de libertad vigilada y 10 años de inhabilitación absoluta y de inhabilitación especial. Guevara se ha vuelto a dirigir al acusado, que esta vez ha aceptado reconocer el delito y conformarse con la pena instada por la Fiscalía. Toda la información sobre el yihadista de Majadahonda pinchando aquí.

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