LIDIA GARCIA. “¿A dónde acude para comprar? —En Majadahonda [Madrid], que es donde vivo, hay una tienda de productos ecológicos . Me gusta ir y comprar en ella a causa de las particularidades que tiene mi hijo pequeño”. Así contesta Sonsoles Ónega, presentadora de Tele 5, a una curiosa encuesta realizada por el periodista Nicolás Alba en “El Español”, en la que su compañera de profesión habla de los productos alimenticios que compra para su hijo, enfermo de diabetes. “¿Dónde suele comprar los productos de supermercado?”, pregunta de nuevo y ella responde: “En Mercadona, porque lo tengo cerca. Además, ellos han tenido una oferta muy amplia para celíacos. Y es que mi hijo, además de diabético, es celíaco, por lo que he buscado siempre muchos productos sin gluten. Sin embargo, ahora es verdad que los supermercados ofrecen de manera más generalizada estos productos sin gluten. Pero antes costaba más y Mercadona, como te contaba, ofrecía muchos productos especiales para celíacos. También recurro a un Supercor que tengo cerca de casa. Eso, respecto a los productos que son procesados o envasados. Por último, el pescado lo compro en la pescadería de El Corte Inglés”.


Nicolás Alba

Para otros productos, como la carne, Sonsoles Onega sale de Majadahonda, ciudad donde ha protagonizado ya varias noticias, y se escapa vía internet: “recurro a una carnicería de La Rioja llamada Maza. La he descubierto a través de los grupos de WhatsApp a raíz de la pandemia. El pollo, la carne picada y, en general, los productos cárnicos que consumimos son de ahí y están buenísimos. Hago los pedidos a esta carnicería de manera quincenal, ya que te mandan los productos envasados al vacío. Pese a ello, no sé si es sólo por la pandemia, pero es verdad que en los últimos años los productores de alimentos frescos se han modernizado muchísimo. Te envían las cajas perfectamente e, incluso, llegas a establecer redes de confianza con los vendedores que te permiten no pagar en el momento, sino que puedes hacer un Bizum cuando puedes. Y, la verdad, que me gusta mucho recurrir a estos comercios porque es recuperar productos de lo más natural, que en la ciudad echamos de menos. No digo que no haya sitios donde se vendan, pero con lo complicada que es nuestra vida y el poco tiempo que tenemos, a veces, no tenemos tiempo para ir al mercado puro y duro”, concluye.

Majadahonda Magazin