Fotografía de la Asociación del Municipio de Majadahonda con la que ilustra su petición

CATHY BOIRAC. Nuestra Asociación ha registrado telemáticamente este lunes 18 de mayo de 2020 en el Ayuntamiento de Majadahonda un escrito que expresa su rechazo a las concentraciones de diversa índole que en estos últimos días están celebrándose en distintos lugares de Majadahonda que, según se aprecia en las imágenes en redes sociales, no respetan prácticamente ninguna de las normas dictadas para garantizar el control de la pandemia. Nuestra Asociación solicita que se cumplan las normas vigentes de la Fase 0 (0,5 a partir de hoy) en la que todavía se encuentra la Comunidad de Madrid, ya que dichas concentraciones ponen en riesgo la salud pública que es, ni más ni menos, la salud de todos y cada uno de nosotros. El escrito le recuerda al alcalde que, estemos de acuerdo o no, en la fase 0 en la que se encuentra todavía la Comunidad de Madrid, los ciudadanos hemos de asumir unas normas que a todos nos afectan, de sobra conocidas y respetadas por la inmensa mayoría de la población. Y le recuerda también los datos oficiales de la Comunidad de Madrid, a 17 de mayo, que indican que en Majadahonda se ha confirmado un total de 575 enfermos por Coronavirus desde el inicio de la epidemia, y 30 en los últimos 14 días, con una tasa de incidencia acumulada (es decir casos confirmados por 100.000 habitantes) de 800,55. Y que a 17 de mayo los fallecidos suman en nuestra Comunidad 14.018, sobre un total en España de 27.650 (a 16 de mayo, según Ministerio de Sanidad). Es decir la mitad de los fallecidos.

Cathy Boirac

Nuestra Asociación considera que el derecho fundamental a la libertad de expresión y manifestación se puede ejercer sin poner en peligro la salud del vecindario. De hecho, tanto los aplausos desde los balcones y terrazas como las caceroladas de los últimos días evidencian que cada cual puede expresar su rechazo a la gestión de la crisis o su apoyo al personal sanitario. Pero las concentraciones de los últimos días, sin respetar distancia de seguridad ni medidas de protección –difíciles por otra parte de aplicar en una concentración de personas– fueron sin duda actos irresponsables sin consideración hacia los vecinos de Majadahonda.