Emi y Neymar en el Nou Camp
«Con apenas ocho años de edad, la primera gran decisión. ¿Fútbol o rugby era la cuestión? Sus hermanos, la familia en general, se inclinaban por la ovalada. Él ya tenía una idea redonda. Empezó a destacarse pronto en el Club Atlético Cadetes de San Martín y los contactos de Juan Esnáider, hijo dilecto de dicha institución marplatense, lo llevaron junto con otros chicos a una prueba en el Real Madrid. Cautivó a los ojeadores de la Casa Blanca y, por ende, a los 11 años ya tenía otra decisión de peso por delante: «Papá, si vos querés, volvete. Yo me quedo».
Emi: de Majadahonda a Argentina
Así empieza la crónica de Emiliano Buendía «Emi», lo joven estrella del Getafe que vive en Majadahonda y que se publica en la web de la @afa: «Nunca dudé en jugar para @Argentina». Y se quedó, no más, en España. Los primeros meses solo, luego ya con toda la familia. Un par de temporadas en la cantera merengue, la mudanza a Getafe, el llamado para jugar en la Sub 19 de la Furia, la aparición en Primera y, con sólo 18 años, otra decisión de suma importancia… «A España le tendré agradecimiento eterno, pero mi sangre es argentina y siento algo especial por el país que me vio nacer».
Grondona y Emi
Emiliano Buendía cuenta su historia con total naturalidad. Aunque sea la cara nueva dentro de esta camada de jugadores que hace rato viene trabajando con Humberto Grondona, ya se lo ve más que integrado al plantel que a partir del 30 de mayo disputará el Mundial Sub 20: «Enganche o delantero, diestro pero con buen manejo de la zurda, picante, la joyita marplatense tardó nada en generar química futbolera con Correa y compañía. Está feliz de reencontrarse con las costumbres argentinas y de disfrutar de ciertos lujos que le da la pelota: fana de River, su primera vez en el Monumental fue nada menos que para el superclásico de la Copa Libertadores y, encima, con la yapa de conocer en persona a Pablo Aimar, su ídolo de chiquito».
Giovanni Simeone (izq), que jugó en el Rayo Majadahonda, también está en la sub 20 argentina
«Sin embargo, antes de aquello, hubo un día que a Emiliano le impactó más que cualquier otro. Fue ese buen día que enfrentó al Barcelona. Primero fue la sorpresa de los tickets para el Camp Nou («Mi papá tiene guardado el sobre que dice ‘para Eduardo Buendía, de parte de Javier Mascherano'») y después el diálogo que tuvo con un tal Messi dentro del campo: «No podía creer que supiera quién era yo, pero hasta estaba al tanto de que Humberto me había ido a ver. ‘¿Qué vas a hacer? ¿Vas a jugar para España o para Argentina?’, me preguntó. Yo nunca dudé en ponerme la camiseta de mi país. Y por eso le dije: ‘Quiero jugar con vos, Leo’«.
Emi en Argentina con la camisola de entreno de la selección
