A
lfredo, un majariego que pasaba por allí, dio la voz de alarma y tomó las primeras fotos, lo que provocó que los medios de comunicación se movilizaran. El Mundo, Estrella Digital, Mundo Deportivo, Soy Motor.com… Todos se han hecho eco de este insólito suceso en el que un todoterreno de la marca Range Rover acabó empotrado en una de las vallas del perímetro de la Ciudad Deportiva del Cerro del Espino de Majadahonda. A pesar de este aparatoso accidente, el conductor del vehículo salió ileso y según afirma todo se produjo por un «despiste momentáneo». Pero esta historia no termina aquí, ya que sacar el Range Rover de la Ciudad Deportiva del Atleti, también ha sido un proceso complejo. El coche se encontraba enganchado en la valla y suspendido a unos metros del suelo, con lo que debido a la complicada posición en la que se encontraba, los intentos de desencajar el vehículo durante la noche del viernes fueron infructuosos. Finalmente, el Range Rover pudo ser retirado gracias a una grúa al día siguiente, según detalla el diario «Mundo Deportivo». A continuación reproducimos algunas de las imágenes más espectaculares que ha dejado este accidente que por fortuna se ha saldado sin heridos.
Según informa el diario El Mundo, el incidente se produjo este vienes 20 de enero a las 17:00 en la calle Moreras de Majadahonda. El conductor, que conducía un Range Rover, se despistó unos segundos, perdió el control y chocó posteriormente contra el cercado. «Al lugar acudieron la Policía Municipal de Majadahonda y los vigilantes del propio conjunto para intentar normalizar la situación. A pesar del esfuerzo desempeñado por las distintas autoridades, no consiguieron ‘desencallar’ el coche por la noche, que se encontraba enganchado a la valla y suspendido en el aire, dado que hay varios metros desde la valla al suelo» relata. A primera hora de la mañana del sábado, una grúa se presentó en el lugar de los hechos para intentar sacar el turismo, aunque sin demasiado éxito ya que según Mundo Deportivo, a las 10:30 horas el vehículo todavía seguía allí.
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