Tras el inmenso éxito de la presentación de los dos primeros ganadores de las ciudades más felices del mundo, se quiso saber más sobre las razones que hacen de una ciudad un gran lugar para vivir. Un estudio sobre un cuestionario a nivel mundial sacó conclusiones muy significativas sobre que prefieren las personas a la hora de decantarse por una ciudad o por otra. Estos resultados envían un mensaje claro sobre la prioridad encuestada y la importancia de los elementos directamente relacionados con la calidad de vida en lugar de aquellos que son más técnicos, financieros o acordados.
Deporte y zonas verdes
La explosión del ciclismo en los últimos años y las campañas que animan a la gente a hacerse cargo de sus propias vidas y a realizar más actividad física se reflejan claramente en las preocupaciones de los ciudadanos y, desde luego, no están desvinculadas de la posición número uno de los parques, espacios verdes y carriles para bicicletas. El clima es secundario y pone de relieve la importancia de desarrollar relaciones armoniosas en la comunidad y de contar con un servicio de abogados, policía adecuado y eficaz que también sea capaz de promover la prevención en lugar de estar siempre en un modo represivo. Para las ciudades de alta densidad étnica, esto significa hacer todo lo posible para garantizar que la integración y la cohabitación se lleven a cabo en armonía y comprensión del otro.
Los distintos servicios, ya sean relacionados con la salud, la educación o simplemente un buen veterinario dado que cada vez más se tienen mascotas, forman parte de la calidad de una ciudad y, por lo tanto, ocupan el tercer lugar. Una ciudad también debe desarrollar y presentar una oferta cultural que responda a las necesidades de su población, ocupando este componente el 4º lugar en la lista. La cultura, no importa cómo se exprese, es un elemento que nos sumerge en un universo que a menudo está a kilómetros de nuestra vida cotidiana. La cultura también nos hace tropezar, soñar, esperar y reflexionar.
Estos resultados también indican que, como ciudadanos contribuyentes, quieren obtener buenos servicios básicos, y que este componente ocupa el quinto lugar. Sin embargo, este aspecto es parte integral de la oferta de servicios estándar de una ciudad como ejemplo una guardería o colegios de calidad para tu hijo y una ciudad que no pueda satisfacer adecuadamente esta necesidad esencial se encontraría en una situación muy mala. Este estudio destaca la importancia de que una ciudad ofrezca una gama de puestos de trabajo a su población y sin duda esta característica habría sido más alta en el ranking si la encuesta se hubiera realizado en los últimos meses. También confirma el impacto negativo de la tasa de desempleo en el nivel de felicidad de una ciudad. El análisis de los resultados de la lista de las ciudades más felices hace que esta sea una buena demostración. El ocio y el deporte siempre serán parte integrante de la oferta de servicios de una ciudad, pero el estudio nos muestra hasta qué punto varía en función de la composición demográfica de la ciudad.
Carreteras y servicios públicos
Una red de transporte eficiente es un elemento fundamental para las ciudades con una gran población, pero mucho menos para los municipios más pequeños. Facilita la vida a quienes tienen que utilizarla, pero no tiene una influencia decisiva en la valoración global de la ciudad, probablemente porque los usuarios de las redes de transporte constituyen sólo una pequeña proporción de la población y, en consecuencia, una pequeña proporción de los encuestados. El automóvil parece seguir reinando como rey y maestro, lo que explica la octava posición de esta característica, por lo que tener una autoescuela cerca es importante para el desarrollo de la población. Esta encuesta también nos dice que la gente obviamente quiere los impuestos más bajos posibles, pero este aspecto afecta esencialmente a su billetera en una época específica del año y tiene poco que ver con sus actividades diarias o su estilo de vida.
