El iGaming es una de las industrias que más han crecido en España en los últimos tiempos y, si se cumplen los pronósticos, todo apunta a que seguirá con la tendencia positiva en los próximos años. Para aquellos que desconozcan todavía lo que significa, engloba todas aquellas actividades online en las que el usuario juega en línea realizando apuestas y previsiones sobre lo que va a ocurrir. Básicamente, se podría resumir en dos grandes ámbitos, el casino y las apuestas deportivas. A continuación, entraremos a detallar cómo se presenta la oferta actual.
Antes de entrar en materia, cabe mencionar algunas de las principales características de este sector. Para empezar, es una práctica que se lleva a cabo a través de internet y que está estrechamente vinculada a la innovación tecnológica. Además, no se vincula a un único dispositivo, siendo el más común en el pasado el ordenador, sino que permite que desde diferentes aparatos se pueda llevar a cabo la partida. Todo esto, en su conjunto, provoca que su acceso sea global, mayor al de los salones especializados de antaño, y llegue a varios segmentos de la población.
Temáticas muy diversas
En el mundo del casino online, siguen estando muy presentes los juegos que llevan más de un siglo entreteniendo a la población como son el póker, el blackjack, la ruleta o las tragamonedas. Aunque en la mayoría de las opciones del catálogo hay títulos que respetan la esencia que los catapultó a la fama, han proliferado nuevas temáticas y modalidades que construyen una experiencia más novedosa. Ejemplo de ello se ve en la pequeña rueda, con variantes que se desmarcan de la ruleta americana y europea.
En este sentido, es de especial mención el amplio abanico disponible en cuanto a las slots, donde recurrentemente no paran de aparecer nuevas propuestas. Hay múltiples posibilidades de elección y las características son cambiantes las unas de las otras. Las mecánicas de juego, los símbolos especiales, las líneas de pago, los premios de jackpot o las funciones de bonificación son solo algunos de los aspectos que suelen variar de un juego a otro. Tampoco nos podemos olvidar de las ambientaciones que decoran la cuadrícula de estas tragamonedas online.
Respecto del mundo de las apuestas deportivas, este también se ha visto sujeto a cambios. La mayoría de los pronósticos, en este momento, se dan de forma rápida gracias a las conexiones móviles de los teléfonos inteligentes. Por ese motivo, se han impulsado las previsiones en directo, que permiten determinar lo que sucederá en los próximos minutos de un encuentro, mientras que también han aparecido más deportes y campos donde apostar. Los deportes electrónicos, procedentes del mundo del videojuego profesional, son uno de ellos.
¿Cómo llegar al público?
La forma en la que se alcanza el público también se ha visto modificada con el paso del tiempo en los últimos lustros. Por un lado, se ha ampliado el foco saliendo exclusivamente de las pantallas del ordenador y dando el salto a otros dispositivos, como el móvil o la tableta. Por otro lado, el acceso se ha convertido en mucho más fácil y directo, no solo mediante la visita de páginas web a través del navegador, sino que las aplicaciones se han convertido en una perfecta puerta de entrada para los usuarios, destinando un solo clic y unos pocos segundos.
La realidad es que, sobre todo en el casino en línea, los desarrolladores de experiencias han buscado una mayor interacción e involucración de los usuarios en sus prácticas. Más allá de diseños y ambientaciones rompedoras, esto se ha dejado ver de diferentes formas. Ejemplo de ello son los encuentros en vivo de juegos como la ruleta o el blackjack, conectando con la mesa y con un crupier en tiempo real; o cómo algunas tragamonedas reclaman al internauta un rol activo, ofreciéndole la opción de tomar decisiones y que estas tengan consecuencias directas en lo que va a suceder.
