
El agente Juan José Crespo recuerda como «el año pasado, para el día de la patrona nuestra, que también dan medallas, las que había propuesto nuestro jefe fueron tan vergonzosas y escandalosas que cuando fueron a aprobación de la Comisión de Régimen Interior del Ayuntamiento, las echaron para atrás los concejales». En esta ocasión, las otorgadas el 12 de octubre de este año 2016 también tienen su historia: «Pidieron de Guardia Civil al jefe de la Policía, el suboficial Calvo Hervás, que designara los méritos de 5 funcionarios de Policía para condecorar en el acto de la bandera pero Jefatura dijo que sólo 1: él mismo». La situación les resultó bochornosa «tanto como que llega a proponerse a sí mismo para las medallas. Luego le debió dar un poco de vergüenza y al final propuso a otro, no por una actuación meritoria determinada, sino como él, porque si. Y propone a Manuel García Redondo. ¿Mérito? Será lo que dicen siempre, que lleva muchos años en la policía y que tiene mucha dedicación y lo hace todo muy bien». Crespo cree que «aquí en la Policía de Majadahonda las medallas no se conceden de forma objetiva por actuaciones meritorias concretas, sino a dedazo por antojo y simpatía del jefe de la policía. Este tema de las medallas es algo que desde CPPM estamos reclamando desde hace tiempo y recientemente lo hemos vuelto a hacer, proponer un reglamento que regule su concesión por méritos objetivos, no el dedazo que históricamente lo regula».







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