JOSÉ Mª BABOT VIZCAÍNO. Hemos pasado más de cuarenta años en Majadahonda, en Madrid y en el resto de España con este sistema de democracia. Y la pregunta que me hago, después de vivir, leer, escuchar, y ver las realidades, y seguro que muchísimas más personas se la hacen, es la del encabezamiento. Mirando para atrás, porque nadie se lo quita de la memoria, puesto que la izquierda no lo puede ni quiere olvidar de tantísimo odio que tiene, (el odio y el amor van unidos) y no sé por qué, se puede recordar que los salarios nos han mermado tantísimo que casi no se puede terminar el mes sin echar lumbre por la boca. «In illo tempore», antes de 1.975 cuando ¿comenzó? la democracia, los españoles con el salario que se llevaban a casa vivían muy decentemente (siempre ha habido pobres y siempre los habrá) y si no se tenía suficiente para mantener a la familia, había en toda España la posibilidad de llevarse un doble o triple sobresueldo a casa para poder terminar el mes. E incluso hacer lo que se llamaban horas extras o tener uno o dos pluriempleos de los que estaban bien pagados para llegar a fin de mes.


Babot Vizcaino

Incluso los propios vecinos se hacían la vivienda, comprándose el terreno y después los materiales. Los días festivos levantaban su casa. Y se podían comprar con entera tranquilidad la moto o el coche o el frigorífico de moda en aquéllos tiempos. Entonces, un salario normalito, del trabajo principal, eran, alrededor de unas 3.000 a 5.000 pesetas (hoy 30 euros), y a esta cantidad se le agregaban los dineros ganados en los pluriempleos. El gasto medio anual de una familia con dos hijos, estaba sobre las 100/110.000 mil pesetas/mes y eran unos reyes. Traducido, ese dinero a la actualidad, esas pesetas se convierten en unos 660 euros/mes aproximadamente. ¿Qué se podía hacer antes y ahora?. Antes se podía vivir con holgura y hoy no se puede ni salir de casa con esa miseria.

Claro que entiendo que durante esos cuarenta y pico años la vida hubiera subido igualmente pero ¿con esa intensidad del cambio a euros? No lo creo. He visto y he vivido como las personas desde Andalucía, Extremadura, Palencia, Murcia, etc, abandonaban su ciudad, lo dejaba todo y se trasladaban a Cataluña, Valencia, Murcia, Alicante, etc. Incluso el que en la época era alcalde de una localidad malagueña se trasladó a Blanes, población catalana, y se llevó el tampón y el sello de la alcaldía, de tal guisa que si alguno de esa población necesitaba un documento del ayuntamiento de esa localidad, un papel para entrar a trabajar en determinada empresa, allí mismo, en vez de pedirlo al pueblo, para evitar tardanzas, se hacía el documento y el alcalde lo firmaba y sellaba. Así se mataban a trabajar para sacar a su familia a flote mientras la ciudad que les acogía crecía y les amparaba. ç

Llegó la democracia y todo fue empezar. Lo primero que se hizo fue suprimir toda clase de horas extras o pluriempleo, pensando, ¡cómo no! que, a la larga, los trabajadores dependerían de una ayuda desde el Estado y así retener su voto de izquierdas, como está ocurriendo. Se sientan a la espera de la llegada de las épocas de alternancia para seguir teniendo sujetos sus votos, porque si no es así, peligran las ayudas estatales, autonómicas, provinciales o locales. El caso es que los Gobiernos de turno no hacen nada para que el ciudadano tenga una mejor vida. Solo se ha logrado hablar de más y peor, poder insultar impunemente, escaparse de ir a la cárcel los amigos de sus amigos, quitar de en medio lo que no es del agrado de los que manejan el tinglado… y poco más. Todos estamos, más o menos, más que agobiados social, religiosa, política y económicamente tocados de verdad.

¿Cómo se puede arreglar? ¿necesitamos la democracia? ¿qué más nos da tener un presidente de gobierno que un primer ministro o un presidente de la república o un rey?. Al fin y al cabo es una persona que decide y manda lo que, de acuerdo con su equipo, dictamina, pero al fin y al cabo es una sola persona, con ideas cambiadas, pero todos ellos mandan exactamente igual. Y su equipo, si se llevan algo, se lo llevan todos, no solo los de la derecha: los de la izquierda se llevan lo mismo o más, por eso de que cuando mandaba la derecha se lo llevaba todo y ahora han visto que como no es tan fiero el león como lo pintan, hacen lo que les conviene. Pruebas son amores y no buenas razones.

Majadahonda Magazin