Camilo Villarino y Susana de Funes, un matrimonio de Majadahonda que moderniza la Casa Real

LIDIA GARCIA. «Si algo representa el matrimonio formado por Camilo Villarino, nuevo jefe de la Casa del Rey, y Susana de Funes, es a la clásica familia de clase media alta española. Casados y con 3 hijas con buenos trabajos, casa en una urbanización a las afueras, trabajos como enviados en el extranjero… Ambos son profesionales con larga carrera en el Ministerio de Exteriores, viven en un bonito adosado en Majadahonda, con jardín y piscina comunitaria. Y han inculcado a sus tres hijas la pasión por la política internacional y los valores del esfuerzo y el estudio que ellos mismos han practicado a lo largo de su vida. Sobre todo De Funes, campeona de esquí de fondo durante su juventud, una disciplina que aprendió en su Jaca natal y que le ha dado más satisfacciones de las que esperaba. Gracias a sus podios, la esposa del nuevo responsable de la gestión de Zarzuela estudió la carrera en Estados Unidos. De Funes se licenció en Ciencias Empresariales en la Western State College de Colorado, en el corazón de las Montañas Rocosas, cuna del esquí al otro lado del Atlántico (la famosa estación de Aspen está allí). Y todavía ahora da clases de vez en cuando en Jaca, donde la familia suele pasar los días de descanso y vacaciones».

Con este emotivo retrato y enfoque, la periodista Silvia Taulés publicaba este 23 de enero (2024) en «Vanitatis» la noticia «real» de la semana: «Camilo Villarino, nuevo jefe de la Casa del Rey: su esposa campeona de esquí, tres hijas y reservista. Diplomático de carrera, su mujer estudió en una universidad de Colorado gracias a sus medallas como esquiadora. Sus tres hijas trabajan en el sector digital. La imagen de Camilo Villarino de la fotógrafa Ángeles Visdómine de la agencia Efe ilustraba un artículo que profundiza en sus biografías, aunque de Susana de Funes no hay ni una sola instantánea en internet ni en los medios de comunicación.

LAS REFERENCIAS A MAJADAHONDA. El Mundo también se refiere a su vecindad en Majadahonda: «Aunque no ha sido funcionaria como su marido, ha tenido varios trabajos relacionados con la carrera diplomática de su marido en Exteriores. Afincados en Majadahonda, sus tres hijas se dedican a profesiones relacionadas con el mundo digital en ámbitos como el marketing, la seguridad empresarial o las redes sociales. Las tres son políglotas por haber vivido en distintos países, como Estados Unidos, Marruecos y Francia». Y la revista «Mujer Hoy» añade: «Con un brillante curriculum en temas de educación y cooperación internacional y madre junto a Camilo Villarino, de tres hijas con éxito profesional, Susana de Funes es además una consumada esquiadora. La pareja, que reside en el madrileño municipio de Majadahonda, se conoció en Jaca, la localidad natal ella, donde ambos participaban en unas jornadas organizadas por el Real Instituto de Estudios Europeos».

LA ACUSACION DE NEPOTISMO. Pero ¿quien es Susana de Funes y quienes son sus hijas Villarino De Funes, todas de Majadahonda?. Silvia Taulés responde: «Aragonesa como su marido -Villarino es natural de Zaragoza-, De Funes estuvo en el punto de mira hace unos años porque UGT señaló a la pareja, a la que acusaban de aprovechar la carrera diplomática de él y su posición como jefe de gabinete de la entonces ministra Arancha González Laya para ‘colocar’ a su mujer. La acusación quedó en nada porque, pese a no ser funcionaria, la esposa del sustituto de Jaime Alfonsín ha trabajado toda su vida en empleos relacionados con Exteriores. La carrera de su marido, que ha estado en varias legaciones españolas en el extranjero, ha hecho que la esposa haya ido cambiando sus destinos también y adaptando su carrera a las exigencias del momento». Se refiere así al explosivo artículo que el periodista Antonio Rodríguez publicó en Voz Pópuli titulado: «Acusan al jefe de Gabinete de González Laya de enchufar a su mujer en Exteriores. Susana de Funes ha encadenado, durante casi 20 años, trabajos de asistencia técnica en el Ministerio de Asuntos Exteriores sin ser funcionaria y de forma casi ininterrumpida, tanto en Madrid como en aquellos destinos en el extranjero en los que él estuvo destinado, según la información que ha recabado la sección sindical de UGT en este ministerio». La Oficina de Información Diplomática (OID) lo justificó diciendo que «el desempeño de la consultora de Susana de Funes ha sido de total satisfacción y los productos previstos han sido entregados con las adaptaciones habituales. Su contribución ha sido sustantiva y eficaz». UGT no se creyó esta versión, cree que las otras candidaturas fueron un «paripé» para dar apariencia de legalidad y que sus contratos de 2018 y 2019 eran en realidad del mismo objeto, pero se dividieron en dos para sortear los impedimentos de la ley de Contratos del Sector Público», finalizaba la información.

PROFESORA DE ESPAÑOL. Lo cierto es que Susana de Funes «ha trabajado de profesora de español en Zagreb y también de traductora de español en lugares en los que su marido era enviado como diplomático. Su carrera siempre ha estado vinculada con el sector internacional, algo que inició con sus estudios en Colorado y que prosiguió en los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, cuando trabajó como enlace para la cadena de noticias de Estados Unidos CBS. Aunque poco a poco fue definiendo su vocación y ahora es una experta en cooperación internacional. A lo largo de su vida profesional, De Funes ha ocupado algún cargo destacado en la Administración, como el de responsable de Educación para el Desarrollo y de Comunicación en la Dirección General de Planificación y Evaluación de la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional. Cabe destacar que la de cooperación internacional es una de las áreas en las que la reina Letizia se desempeña con más pasión», recuerda Vanitatis.

LAS TRES HIJAS SE DEDICAN AL SECTOR DIGITAL. Juntos tienen tres hijas, todas ya mayores y profesionales. Curiosamente todas se dedican, de una manera u otra, al mundo digital. Las tres destacan en sus currículos el ‘privilegio’ que han tenido de poder vivir y crecer en el extranjero, en países tan diversos como Marruecos, Estados Unidos y Francia. Una de ellas trabaja en una compañía centrada en las redes sociales y el crecimiento de los creadores de contenido dentro de la red. La segunda se dedica también al mundo digital, desde el sector del marketing, y en septiembre de 2023 empezó como consultora en una nueva empresa. La tercera es analista en labores de inteligencia en una empresa americana dedicada a detectar vacíos de seguridad en empresas. Las tres hijas del matrimonio tienen sus propios perfiles en LinkedIn, actualizados y activos, y allí muestran sin problema sus carreras tanto de estudiantes como de profesionales».

MILITAR EN LA RESERVA. El nuevo jefe de la Casa del Rey es un diplomático de carrera que ha inculcado a sus hijas la pasión por la política internacional. Villarino es en la actualidad -desde 2021- director de gabinete de Josep Borrell, alto representante de la UE para los Asuntos Exteriores y la Política de Seguridad. Borrell ha alabado la decisión del monarca de contar con Villarino, a quien sus excompañeros definen como “extremadamente leal”, en un perfil publicado por ‘El País’. Reservista destinado en la actualidad a la Unidad Militar de Emergencias (UME), es miembro de la carrera diplomática desde 1989. Antes de ocupar este puesto, Villarino fue director de gabinete de tres ministros de Asuntos Exteriores: Alfonso Dastis, el propio Borrell y Arancha González Laya. Villarino Marzo, que cumplirá 60 años en abril de este año 2024, sustituye al hombre que ha sido la sombra de Felipe VI durante casi toda su vida, Jaime Alfonsín. El relevo se llevará a cabo durante el mes de febrero y Alfonsín pasará a ser consejero privado del Rey, ya que, tal como aseguraban el viernes en el comunicado enviado por la Casa Real, Felipe VI desea seguir contando con su “valioso y leal consejo”. Una de las curiosidades del nuevo jefe de la Casa es que no ha tenido relación alguna con el anterior rey, Juan Carlos I, según señalan desde el entorno del monarca expatriado, algo que lo deja -todavía más si cabe- fuera del mapa de la anterior monarquía», finaliza el reportaje.