FÉLIX DE LA VARA CRUZADO*. A una semana desde que ocurrieron los incidentes en las fiestas de Majadahonda, desde CSIF no nos habíamos pronunciado aún al respecto porque no nos queríamos precipitar y manifestarnos en caliente. Preferimos contar hasta 1.000 para ya en frío intentar ser lo más coherentes posible. Y utilizar el tan nombrado sentido común desde la moderación que requiere un asunto tan delicado, siendo conscientes de la gravedad de lo acontecido y el riesgo que corrieron los ciudadanos la noche del sábado al domingo en el recinto ferial de Majadahonda. El balance es de 15 agentes heridos entre Guardia Civil y Policía Local, 27 detenidos, los destrozos en autobuses, estación, mobiliario urbano, etc. Todo este desastre podía haber sido mucho más grande de no ser por la excelente y ejemplar actuación y la profesionalidad de los agentes que trabajaban en ese momento y formaban parte del dispositivo de seguridad. Policía Local y Guardia Civil junto con Bomberos, Cruz Roja, Protección Civil, Operarios de Limpieza y Empleados Municipales, Mantenimiento, todos desde el primero hasta el último y en todas las categorías, arriesgaron su integridad física y su vida en pro de la seguridad ciudadana, para restablecer el orden público.

Hombres y mujeres que durante los días de fiestas y desde que yo tengo uso de razón en la profesión (30 años), sacrifican su vida personal y familiar con una dedicación incondicional y un espíritu de servicio admirable, para cumplir con el servicio que se les encomienda, trabajando horas extras en la mayoría de los casos hasta el agotamiento y con unos medios materiales precarios, cascos y escudos insuficientes y del año de la polka, vehículos prácticamente para desguace, etc. Es por ello, compañeros y amigos, nuestro agradecimiento y felicitación. Desde que ocurrieron los hechos he tenido ocasión de patrullar a pie por la Gran Vía, de Majadahonda, centro neurálgico de nuestra localidad, donde ciudadanas y ciudadanos de todas las edades me han transmitido su agradecimiento y felicitación, muchos de ellos “jóvenes” que estaban en el recinto, otros “padres y madres” que estaban sus hijos, comerciantes etc.

Desde CSIF instamos a nuestros políticos a que se sienten con los profesionales y técnicos de seguridad, y con los sindicatos que representan al colectivo para abrir una vía de dialogo y dotar a la plantilla de vehículos, que es lo más urgente y ya lo venimos advirtiendo desde hace meses. Analizar las causas, el modelo de fiestas y cuantos detalles, por muy insignificantes que parezcan, porque todos son importantes para evitar acontecimientos similares en el futuro. A la Delegación del Gobierno, desde CSIF queremos recordarle que a nosotros y a todas las Policías Locales, las fiestas patronales de nuestros pueblos, sobre todo si son pequeños, nos parecen una situación excepcional. Es “una vez al año” en la que no viene mal la colaboración de otras Policías, con medios que ellos tienen y nosotros no, y viceversa. Y se venía haciendo desde siempre y con resultados excelentes, hasta que la Delegación de Gobierno dijo que no. *Representante de los trabajadores en el Ayuntamiento de Majadahonda, y sargento de Policía Local).