MIGUEL SANCHIZ. (27 de agosto de 2024). Enclavado en la hermosa localidad de S’Agaró (Girona), en la Costa Brava, el Hostal La Gavina se erige como un símbolo de lujo, historia y elegancia que no tiene parangón en España. Su prestigio no solo radica en su exquisita arquitectura y ubicación privilegiada, sino también en las memorias de las estrellas del cine, la música y la realeza que han pasado por sus puertas, haciendo de este hotel un lugar legendario. La historia del Hostal La Gavina está tejida con momentos memorables protagonizados por algunas de las figuras más icónicas del siglo XX. Entre los episodios más célebres se encuentra la intensa relación entre la actriz estadounidense Ava Gardner y el torero y poeta español Mario Cabré, una historia que se desarrolló en el verano de 1950. La pasión entre estos dos personajes alcanzó su clímax en La Gavina, durante el rodaje de la película «Pandora y el holandés errante», dirigida por Albert Lewin. Aunque la mayoría de las escenas se filmaron en la cercana Tossa de Mar, la llama del romance ardió intensamente en este hotel. El propio Cabré inmortalizó su idilio en su «Dietario poético a Ava Gardner«, un testimonio lírico de su amor por la actriz.
El drama en La Gavina no terminó ahí. Frank Sinatra, quien en aquel entonces era pareja de Ava Gardner, voló furioso desde Nueva York al enterarse de la relación. Su llegada al hotel fue tumultuosa, culminando en un altercado público en la licorería del establecimiento, donde le dio una bofetada a Gardner, sellando así un episodio digno de la mejor crónica social. Pero La Gavina ha sido mucho más que un escenario de romances turbulentos. A lo largo de los años, ha hospedado a una pléyade de celebridades de renombre mundial. Orson Welles, otro gigante del cine, encontró en este lugar un refugio durante el rodaje de «Mr. Arkadin» en 1954. La leyenda cuenta que Welles, conocido por su imponente presencia y voz, solía cantar nanas a una de las propietarias del hotel, creando una atmósfera íntima y casi mágica. Otra anécdota singular involucra al icónico Sean Connery, quien, antes de ser conocido como el eterno James Bond, trabajó como carpintero. Al alojarse en La Gavina, Connery no pudo evitar dejarse llevar por su antiguo oficio, palpando la madera con la que estaba construida la majestuosa estructura del hotel, admirando la calidad y el trabajo artesanal. El hotel también ha sido testigo de la presencia de figuras reales y aristocráticas. Isabel II de Inglaterra, Fabiola de Bélgica, el duque de Windsor, y lord Astor son solo algunos de los miembros de la realeza europea que han elegido La Gavina como su lugar de descanso en la Costa Brava.
En el mundo del cine y la música, nombres como Charles Chaplin, Salvador Dalí, Laurence Olivier, Charles Aznavour, Humphrey Bogart, Lauren Bacall y Sara Montiel engrosan la lista de huéspedes ilustres en S’Agaró. Incluso John Wayne, el famoso actor estadounidense, dejó su huella en La Gavina, aunque de una manera más peculiar: se marchó sin pagar la cuenta. Este detalle anecdótico solo añade un toque de irreverencia al ya colorido historial de celebridades que han pasado por el hotel. En resumen, el Hostal La Gavina en S’Agaró no es solo un hotel, es un testimonio vivo de la historia del siglo XX, un lugar donde el glamour y la pasión se han entrelazado con la elegancia y el lujo en la Costa Brava. Cada rincón de La Gavina guarda una historia, cada pared ha sido testigo de momentos únicos que han contribuido a forjar su leyenda.
Interesantísimas todas las anécdotas que comentas en el artículo!!
Muy de acuerdo Susana , mucha creatividad y no paro de sorprenderme de cuanta historia hay en los lados de la Costa Brava , lo más curioso es que John Wayne se fue sin pagar la cuenta , que cosas ehhhh
De tantas estrellas, sólo quedas tú Miguel 🤣👍
No sólo se hospedaron (y siguen hospedándose) la pléyade de estrellas del séptimo arte que Miguel menciona, sino que La Gavina acogió, y sigue acogiendo, eventos y personajes social y políticamente relevantes hoy. No obstante, lo más significativo de esta «postal» de la Costa Brava es que Miguel, emulando a Josep Pla, nos transporta a sitios y lugares que merecen la pena visitar.
Enhorabuena, maestro.
Salud Miguel, excelente nota. Nuestro símil local en Bariloche es el Hotel Llao Llao…con esperiencias similares…aunque más negocios y amores más «conservados» como dirían los médicos…Abrazo!!
Que de curiosidades tan mágicas nos cuentas. Es una gozada conocer los detalles que nos aportas de gente tan famosa, que sin tu información y espléndida manera de expresarlo no lo hubiéramos podido imaginar.
Gracias
Muy detallada historia la que nos cuentas del Hostal de La Gavina Miguel. Mucho mas teniendo en cuenta que este año precisamente se celebra el centenario de su inauguración.
Ciertamente que impresiona el glamour de este rincon de la costa Brava tan querido por mi y por lo que veo, por ti. Un café en la terraza de su restaurante Candellight con la perspectiva sobre la bahia de S’Agaro es un recuerdo imborrable.