
Es más que inadmisible que estos tres nombrados se comporten como se comportan. Mal está, muy mal, que los demás congresistas, lo hagan, incluso que lean los diarios durante los debates o lo que les pluga, pero peor está que los gobernantes no hagan ni caso de lo que se dice, puesto que son ellos, y nada más que ellos, los que han de escuchar con las orejas que Dios les dio al nacer, no solo para adorno, o para sujetar la mascarilla. Otros se comportan también sin educación, como aquella que fue colocada a dedo como ministra de «Igual dá» y que escupió en el Senado, la nada desvergonzante frase de «yo me acuesto con quien me da la gana«.
Una ministra, a la que se supone buena dicción, buena parafraseología y una exquisita educación, ¿es a la que tenemos que aguantar los españoles y escuchar sus estupideces y malos modos, palabras y obras?. Con «gente» (¿gente?) así nadie puede sorprenderse ya si alguna persona va a un establecimiento comercial y el personal que le atienda le suelte cuatro palabrotas. No nos podemos ni espantar, ni enfadar, ni nada, puesto que estos callejeros que han venido del averno, en el Congreso y en el Gobierno hoy día, están poniendo de actualidad el mal comportamiento, tanto verbal como de acción. Y lo más malo, o lo peor, es que muchas personas aprenden sus malos, malísimos modos, y los demás, o bajamos la cabeza o nos volvemos como ellos, cosa a la que yo personalmente me niego.
En donde haya y esté una buena educación, como teníamos al menos antes de llegar al gobierno esta caterva de maleducados, que se quiten las modificaciones en educación y malas artes de estos callejeros. Si son licenciados en algo por la Universidad de Ciencias Políticas, estoy seguro que han leído a Marx y Engels, pero también igualmente seguro que no han leído nada que diga que cuanta más mala educación se tenga más rojo se es. Creo que es vesania lo que tienen estas personas en lo referente al vocabulario y a sus malas dicciones. Y resulta que, al comportarse así, se convierten en badulaques que quieren domeñar a los que, de momento, estamos bajo sus órdenes.








Señor Babot,estos Políticos que tenemos deberían de estar en cochiqueras o sitio parecido con cerdos y burros y no arruinándonos a todos. Pero ellos les da igual. Viven mejor que Su Majestad Felipe VI