JOSE Mª BABOT VIZCAÍNO. Corre de boca en boca en Majadahonda, y desde siempre, el siguiente dicho o como se le quiera llamar: «Galopada de caballo joven, parada de burro viejo«. Esto viene a colación del batacazo tan tremendo que le han dado los gallegos y vascos al partido callejero del macho alfa y la hembra beta, en las sendas autonomías de Galicia y Vascongadas. Si se miran los totales de votos obtenidos por este partido en comparación con las elecciones anteriores, se ve, con absoluta claridad, el descalabro tan bestial que ha tenido este partido en estas últimas elecciones, sobre todo en Galicia. Y como la ciudadanía ha sabido entender que no es oro todo lo que reluce. Se han dado cuenta del tremendo error que cometieron anteriormente. Rectificar es de sabios. Y es que es demasiada la diferencia. Quedarse fuera del hemiciclo es lo peor que le puede pasar a un partido y esto ha ocurrido en Galicia con el partido podemita.


Babot Vizcaíno

En Galicia, por ejemplo, de unos votantes de aproximadamente 280.000 votos a favor, en las elecciones anteriores, a solamente, en estas elecciones, unos 2.800 votos. Esta diferencia tan abismal dice bien a las claras la decadencia de este partido. Y no contamos, de momento, la huida de votos, con buen criterio, que tuvo el partido alfa/beta en las elecciones generales pasadas. No hay que rasgarse las vestiduras del por qué. El por qué, yo creo, lo tengo algo claro. El macho alfa, se hinchó a gritar constantemente, hasta casi quedar ronco, que le encantaba vivir en donde vivía (Vallecas) donde «podía saludar cada mañana al panadero, dar los buenos días a todos los vecinos, recoger el periódico y saludar al quiosquero», etc, etc, etc. Y después, no solo se marcha sin poder saludar, sino que se va de un pisito a un verdadero casoplón, con tinaja y todo, incluso cercenando el paso a los ciudadanos por la calle en donde ahora viven, no solo de su ciudad (Galapagar), sino de cualquier parte, ya que la Guardia Civil tiene cortado el paso por su calle a cualquier persona. Inaudito.

Antes decía disfrutar cuando veía a un policía en el suelo pisoteado, y demás cosas por el estilo, que proclamaba a los cuatro vientos. O se oye a la hembra beta diciendo que quiere llegar sola y borracha a casa, y otras cosas por el estilo. Constantemente creían ambos que enfangaban a la derecha y resulta que se han llenado estos ¿políticos? de barro. Y se creían que al escupir hacia arriba no les iba a caer sobre sus cabezas. Yo veo que en su pecado llevan la penitencia. Y esto les ha pasado, y les volverá a pasar, porque la ciudadanía se harta, se ha hartado de tantos engaños por quedar demostrado que todo lo que les decían, a la larga, ha sido una trola como una catedral, y ya se han cansado de tanta tomadura de pelo. El macho alfa dijo que era «una vergüenza que mientras haya gente que gana 6.500€/mes, un trabajador gana solo 1.000 €», y que ellos (los políticos) «han de ser un ejemplo….» Tantas y tantas palabras se pueden recordar… ¿Cuánto ganan ahora él y los suyos?. Caradura sí que tiene el payo. Ya se está viendo.

Era de esperar este alejamiento del electorado, como por supuesto, ha sido el del Partido Popular, que se pegó otro gran batacazo, llegando a una miseria de votos por engreídos. Esto es explicable en autonomías en donde el independentismo está fuerte. Como el tortazo, y no se si resucitará, de Ciudadanos, que estiraron más el brazo que la manga y de ahí su cercana desaparición, según lo veo yo, aunque pueda estar equivocado. Los de Cs no deberían haber salido de Cataluña en donde, presuntamente, serían ahora los amos, o lo hubiesen sido en aquellos tiempos, pero la avaricia rompe el saco. Ahora, ¿quién va a pegar y pagar los trozos del vaso que se ha roto?. No se ve en lontananza persona alguna con capacidad. Y, claro, alguien se va a poner delante a tirar del carro. Es de suponer. Hay mucho en juego.

Majadahonda Magazin