JORGE RUBIO. “El premio es a las voces que este historiador ha trasmitido. Todos aquellos que, en medio de la Guerra Civil y de la dictadura, entendieron que había que poner fin a la guerra -por medio de la negociación- y la dictadura, rompiendo el muro entre vencedores y vencidos”. Con estas palabras, el profesor Santos Juliá recibía el Premio Francisco Umbral de Novela al Libro del Año por su obra «Transición». Un volumen realizado en forma de ensayo en el que el autor investiga la historia reciente de España centrándose únicamente en los aspectos políticos de la sociedad española durante los últimos 80 años. Una entrega de premios que contó con una nutrida presencia de políticos entre los que cabe destacar a la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; el alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá; el nuevo presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido y la presidenta de la Fundación Francisco Umbral, España Suárez. Concejales del Ayuntamiento de Majadahonda del Grupo Popular, Socialista, Ciudadanos, Somos difundieron también imágenes (salvo Centristas) dando a conocer su presencia en este acto, que adquirió un cariz no solo literario sino político, dada la temática del libro.
Este premio literario cumple su séptima edición y se consolida como uno de los referentes literarios a nivel nacional vinculándolo a la figura de Francisco Umbral. De hecho, la entrega de este reconocimiento coincide prácticamente en el tiempo con la fecha de nacimiento del escritor, el 11 de mayo, una fecha en la que según aseguraba el propio Umbral «solo nacen genios». A través de esta reflexión, el periodista Eduardo Martínez Rico relata parte de la vida y obra de Francisco Umbral y de Camilo José Cela cuyo cumpleaños era coincidente. «A Umbral lo traté mucho, lo estudié mucho y tengo tres libros escritos sobre él. A Cela apenas lo conocí en un curso –un curso emblemático sin embargo-, pero lo leí mucho, muchos libros suyos. Como le decía hace poco a Alan Romero, un joven escritor que le admira de verdad, Cela es algo así como nuestro abuelo literario. Creo que va a perdurar, que se va a convertir en uno de esos escritores que se vuelven clásicos, que trascienden su propia vida, y Umbral también. Los dos eran grandes amigos. Cela al principio fue como un padrino para Umbral, y un editor. “Me publicó tres libros de golpe”, decía Paco«, recuerda Eduardo Martínez.
Pero la entrega de este reconocimiento también está de actualidad más allá de las cuestiones literarias. «Transición» es una obra vigente en un momento en el que la política española se ha visto sacudida en los últimos años con movimientos que han cuestionado la validez de la Transición. Sobre esta cuestión versó el discurso que el alcalde de Majadahonda Narciso de Foxá pronunció durante la entrega del Premio Francisco Umbral de Novela al Libro del Año y que el diario El Mundo reproduce íntegramente. «Hace 40 años, un 5 de mayo, se celebró la primera sesión de la Comisión de Asuntos Constitucionales y Libertades Públicas en la que se debatió el anteproyecto de la Constitución. Ayer, 9 de mayo, esta Real Casa de Correos acogió la celebración de los actos conmemorativos del Día de Europa y hoy, 10 de mayo, otorgamos en este kilómetro cero -«corrillo noticiero» como decía Larra- el Premio a Transición», relataba el primer edil majariego. «Es especialmente simbólico que el ganador de esta séptima edición del Premio Umbral al Libro del Año sea el profesor Santos Juliá con un ensayo sobre la política española.«Transición» es el término con el que el historiador ha sintetizado casi 80 años de historia», manifestaba De Foxá.
Si bien el profesor Santos Juliá era el protagonista de la noche, también lo fue el presidente en funciones de la Comunidad, Ángel Garrido, que prácticamente se estrenaba en sus recién adquiridas funciones en este acto. “No tengo la menor duda de que, desde el mismo inicio de la Guerra Civil, ya hubo españoles que comenzaron a trabajar en favor de la reconciliación. Un testigo que acabó recogiendo el conjunto de la sociedad española, verdadera protagonista de este éxito colectivo”, relató Garrido en sus intervenciones recogidas por el diario Política Local. «La Transición, entendida como los principios y valores que la han hecho posible, no es pasado. También es futuro. Nuestros padres y abuelos fueron parte de ella, de la misma manera que nosotros tenemos la obligación de asumir ese legado y ampliarlo para transmitirlo a las próximas generaciones. Conocer la Historia es la mejor manera de combatir los populismos que quieren hacer de la desmemoria la plataforma para imponer sus ideologías excluyentes. Afortunadamente, en este libro encontramos los argumentos necesarios para desmentir a los que quieren reconstruir un pasado distorsionado, al servicio de sus propios objetivos”, concluyó.
La prensa nacional también se ha hecho eco de la entrega de este premio a Santos Juliá. La periodista Carmen Morán reproduce en El País el discurso pronunciado por el profesor a la entrega de su galardón. «A ellos, a los políticos, apeló directamente el galardonado cuando se refirió a la necesidad de mantener en pie y en buena forma, “la comunidad política heredada de la transición”. “Ese legado”, añadió, “podría tener elementos finiquitados, obsoletos, pero tiene ese núcleo al que no se debe renunciar. La mejor herencia de la transición ha sido poner fin a los intentos de quebrar esa comunidad política. Porque si eso ocurre volveremos a la guerra civil”, advirtió Juliá. Para el profesor «lo necesario ahora es un organismo que garantice esa solidaridad y se refirió a una reforma de la Constitución que afecte al Senado, la Cámara que puede cumplir ese fin, según dijo. Opina que la Constitución del 78 no está obsoleta. “Sólo se ha cumplido, y una vez cumplido este título VIII clama ya por una reforma”.
Una cuestión que también recoge el periodista Dario Prieto en El Mundo: «En sus puntos fundamentales, el proceso de la Transición estaba anticipado en 1937, cuando Manuel Azaña ya habló de un régimen así. La idea era la clausura de la guerra, y quienes habían combatido se encontraban negociando hacia un proyecto constituyente. Ése es el legado de esas generaciones«. Santos Juliá (Ferrol, 1940) dio ayer una «lección de Historia magistral», en palabras del presidente en funciones de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, al recoger en la misma sede de la Comunidad el Premio Francisco Umbral 2017 al mejor libro publicado durante el pasado año por su trabajo en Transición. Historia de una política española (1937-2017) (Galaxia Gutemberg)«.
Comunicado Premio Francisco Umbral (Ayuntamiento): «De manos de la presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor; del Alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá; del Presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido y de la Presidenta de la Fundación Francisco Umbral, España Suárez el catedrático ha recogido el galardón por la obra “Transición”. “El premio es a las voces que este historiador ha trasmitido. Todos aquellos que, en medio de la Guerra Civil y de la dictadura, entendieron que había que poner fin a la guerra -por medio de la negociación- y la dictadura, rompiendo el muro entre vencedores y vencidos”, ha manifestado el autor tras recoger el premio, dotado con 12.000 euros y una escultura de Alberto Corazón. “El profesor Juliá, con un estilo preciso y riguroso, da noticia en este ensayo de todos los proyectos, planes, propuestas o intentos de reconciliación que se produjeron en España desde 1937 y llega en sus páginas hasta 2017”, ha manifestado de Foxá«.
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