Si la Federación Vasca de Fútbol presentaba su iniciativa para la composición de los grupos de la Segunda División B para la temporada 2017-2018, ahora son los clubes extremeños los que han anunciado sus propuestas. Un primer formato para la liga que está por comenzar es incluir a los clubes de Extremadura en el grupo IV, aunque si no prospera cuentan con otra oferta mucho más «revolucionaria». La idea del Villanovense, Mérida, Extremadura y Badajoz es sustituir a los clubes de Galicia y competir en la próxima temporada 2017-18 contra los siete madrileños (Real Madrid Castilla, Atlético B, Fuenlabrada, Rayo Majadahonda, Navalcarnero, San Sebastián de los Reyes y Unión Adarve), seis de Castilla y León (Mirandés, Ponferradina, Valladolid B, Guijuelo, Burgos y Gimnástica Segoviana), un riojano (UD Logroñés), un canario (Las Palmas Atlético) y el Melilla. Un grupo que sin embargo es complicado que salga adelante ya que implica una mayor distancia entre los distintos clubes y por tanto, una necesidad de movilidad mayor. Sin embargo, su atrevida propuesta ha roto los moldes y quién sabe si finalmente podría ver la luz si sus argumentos llegan a convencer a los 80 clubes de la Federación Española de Fútbol que componen esta división y que seguramente tengan que votarla.
