ANA FERNÁNDEZ MALLO. (7 de noviembre de 2024). Ex Concejal de Majadahonda. Ex Diputada en la Asamblea de Madrid. Vecina de Majadahonda. “In memoriam»: Victoria Isabel Hermosilla Ibáñez. Las dos vivíamos en Majadahonda y nos conocíamos de vernos en diferentes actos públicos y especialmente culturales. Ella fue profesora de inglés, treinta años, en el Colegio de Las Reparadoras. Hija de embajador, había nacido en Chile y su pasión por la Cultura era extraordinaria. Yo, por entonces, años 90, era Concejal de Cultura y los elogios, sugerencias y a veces críticas de esta vecina las tenía muy en cuenta. Una mujer educada y con carácter. Directa, como me gustan a mí las personas. Pasó el tiempo… y en abril de este año 2024 nos reconocimos, saludamos y abrazamos en la Sala de Espera del Hospital Puerta de Hierro, en el Servicio de Oncología. Ella con peluca y yo con un pelo ralo por tanto tratamiento. Comenzamos a contarnos y… nos llamaron primero a ella luego a mí , así que regresamos al mostrador de citas casi a la vez donde ella me preguntó: «Que tal?». Y muy contenta le dije: “de nuevo el PET dice que estoy limpia, no me lo puedo creer, ¿y tú, como estás, Isabel?». Recuerdo su mirada y en un hilo de voz me dijo: “la Oncóloga me da como mucho un año de vida“. La abracé como queriendo pasarle parte de la salud que a mí se me concedía. No encontraba palabras… las personas que estaban detrás de nosotras no se atrevían a pedirnos que nos retirásemos de la ventanilla… Habían escuchado lo que Isabel dijo y el respeto se palpaba.
LE PEDÍ SU TELÉFONO, RECOGÍ MI MEDICINA EN LA FARMACIA DEL HOSPITAL Y ME FUI A CASA, DONDE LLORÉ. Podía ser yo la que estuviera en el lugar de Isabel. Lloré por esta maldita lotería que es el cáncer. Llevo muchos años con la salud mermada, sin saber por dónde va a venir el malestar o el dolor durante la noche o al día siguiente. Dando gracias por cada día que amanece, agarrándome a la vida porque a pesar de todo la vida me gusta. ¡Llevo doce años diciendo adiós!. A muchas personas que me dijeron en su momento rezo por tí” y destaco a Viky, que como soy alérgica al Carboplatino, mis quimioterapias duraban un día y solía venir al menos medio día a hacerme compañía. Como también encontró tiempo para comer conmigo en Onneca los martes y yo vivía esperando el encuentro. Viky se fue de repente en pocos meses por un cáncer de huesos. Así, sin más, cuando yo tenía todos los boletos para que me tocase…
ESTÁ FUE MI DECISIÓN. NUESTRA PRIMERA SALIDA FUE SALIR A COMER AL NUEVO MUÑOZ Y ¡QUÉ CASUALIDAD QUE ALMUDENA, LA DUEÑA, fue alumna suya y se reconocieron después de tantos años!. Han sido 6 preciosos meses de amistad. Hemos ido a comer, al cine, a tomar café… hemos hablado por los codos y sobre todo hemos reído. En dos ocasiones, cuando la regresaba a su casa, me comentó que había sufrido mucho en su vida. Ponía tal expresión de dolor en su cara que me hacía daño. Comprobé que hacían mella en mí estos comentarios, así que decidí que tenía que hacer algo. Pensé, y al día siguiente le propuse un juego: “vamos a imaginarnos un baúl como el de los piratas, de madera y muy grande, y vamos a recordar todo aquello que nos ha hecho daño y lo vamos a ir metiendo dentro. Cuando esté lleno lo atamos con sus gruesas cadenas y lo tiramos al mar». Y yo le decía: “¡venga, venga, ya sé que pesa pero fuera… ya está!». Pufff… Terminamos riendo contentas de lo ligeras que nos quedamos
PASÓ EL VERANO CON UN CONSTANTE ENVÍO DE RECETAS DE COCINA, NOTAS DE PRENSA, CHISTES COMO EL QUE REPRODUZCO Y LLAMADAS. Y una constante preocupación por dejar todo arreglado a sus hijos Jorge, Álvaro y Vicente. Entre los whassaps, una foto de Isabel, que había querido que la llevasen a El Escorial para verlo por última vez. Regresé de mis vacaciones muy malita de los huesos. Después, las noticias de Isabel son que buscaba un Centro de Paliativos y yo estaba de médicos en ese lujo de Hospital que tenemos. Nos hacíamos el parte casi a diario. Ella muy fatigada, muy débil. Yo caí con gripe. El 2 de noviembre (2024) me llegó un mensaje a las 22:51: «Buenas noches, soy Jorge el hijo de Isabel Hermosilla. Mi mamá ha fallecido esta tarde y la velaremos en el Tanatorio nuevo de Majadahonda, calle Barbero de Sevilla, mañana domingo a partir de las 11:00 AM. Habrá un responso en la capilla del mismo Tanatorio aproximadamnete a las 18:00 horas. Gracias por todo el cariño y comprensión que recibió. Saludos. Jorge«. Y mi respuesta: «Buenas noches, Jorge. Leo el triste mensaje que me envías con una tremenda pena. Apreciaba mucho a tu madre. Descanse en Paz. Gracias por los datos. Llevo unos días muy delicada de salud, veré cómo me encuentro mañana para acompañaros en estos tristes momentos. Recibe todo mi cariño. Ana Fernández Mallo«. Lo anterior son palabras que intentan traducir lo que el corazón siente, es tanto el dolor que te desborda… Hemos perdido a una mujer extraordinaria. Siempre pensando en los demás. Activa y sonriente hasta el último momento. Todo un ejemplo. Ha sido una amistad breve pero profunda. Gracias Isabel. ¡Hasta pronto amiga!. “Bonum est difusibus sui» [«El bien se difunde por sí mismo»].
Ella ha cruzado el umbral hacia la luz eterna donde no hay enfermedades ni dolor.
Gracias Teresa por tu comentario Así sea. Un cariñoso saludo
Ana
¡Emocionante y entrañable reseña de recuerdo y despedida! Nos hace sentirnos muy próximos y solidarios con las dos, sin necesidad de conocerlas, aun cuando Ana ha tenido una notable presencia cultural y humana en Majadahonda e Isabel la debió tener también en un ámbito mas reducido del pueblo, pero seguro que muy significativo y reconfortante para quienes la conocieron..,
Desde aquí, yo quiero enviarle mi abrazo de despedida, ojalá la hubiera conocido antes, yo la atendía detrás de un mostrador de manera habitual, y cada día que venía, me encantaba atenderla con cariño y escucharla, a veces, me contaba algo sobre cómo iban sus cuidados, y cuando se iba intentaba que le llegarán mis palabras de ánimo.
Me ha gustado esta publicación, donde la he conocido un poco más, y le envío mi abrazo a ella y su familia.
Un abrazo
BELEN .
Querido Miguel Ángel. Hace mucho que no coincidimos contigo. Agradezco tus cariñosas palabras hacia Isabel y hacia mi persona. Mi objetivo como Concejal tanto de Cultura y Festejos como de Servicios Sociales fue el bienestar de mis vecinos y hacer pueblo. Es bonito que aún se me recuerde. Gracias . Un fuerte abrazo
Descanse con el señor
Así sea , María . Muchas gracias
Saludos
Ana
Delicadísimo obituario!! Lo siento mucho Ana. Mucha fuerza. «El bien se difunde por sí mismo»
Querida Lidia,
Valoro y mucho tu comentario.
Desciendes de una saga familiar de eruditos, intelectuales y sobre todo gente buena y noble como da la tierra leonesa de Omaña. En palabras de Florentino Díez, padre de nuestro Premio Cervantes Luis Mateo Díez,
Omaña es “ donde los montes suspiran y las gentes morirse no debieran”.
Pues , ahí voy, apoyándome en el cariño de los vecinos de Majadahonda, haciendo honor a nuestra tierra.
Un fuerte abrazo
Ana
Una vez más darte las gracias Ana por ese delicado estilo de transmitir. No he tenido la suerte de conocer a Isabel, pero tus palabras son un gran homenaje.
Gracias a tí Pedro, sé de tu sensibilidad Tuvimos la suerte de coincidir en el Ayuntamiento y trabajar juntos por nuestros vecinos.
Un abrazo
Ana
Gran maestra Isabel! Todo un verano (hace más de 20 años) viniendo día tras día a enseñarme inglés y tanto aprendí que terminé soñando en inglés y jamás se me olvidará.
Precioso acompañamiento de Ana en el final de sus días, que suerte tuvo de encontrarte.
Mi pésame a su familia.
Gracias Natalia, como se dice ahora :
Isabel era una “ crack” “ Que tía” y te diré que la suerte fue mía. He aprendido mucho en este corto tiempo con ella. Mira en uno de sus últimos WhatsApp me envía la foto de un líquido que le había ido muy bien para las encías. Se preocupaba por mí, se fue dando amor …..Tenía un corazón grande y generoso …
Un abrazo
Descanse en Paz. Una gran maestra y una bella necrológica.
Gracias Juan Carlos, me alegro que pienses así. Brotó de mi corazón
Saludos
Ana
Lo lamento muchísimo,fue una señora entrañable y gran ser humano, muy educada,la atendí muchos años en la carnicería y pollería de Ahorramás, que en paz descanse
Gracias Claudio por tus palabras que leo hoy. Supongo que muchas de las recetas que Isabel me envió y muy ricas estaban hechas con tus productos.
Algún día pasaré a comprar y conocerte.
Un abrazo
Ana