Nadadora

GREGORIO Mª CALLEJO. He leído verdaderas barbaridades sobre grupos de una mediocridad insufrible y cuyo único mérito (felicidades para ellos, desde luego) fue vender muchos discos. Así que, puestos a inventar la Historia del Rock español en el Siglo XXI, voy yo también a asignar el carácter de piedras angulares de nuestra música popular a un grupo de canciones: 4- Nadadora:Sara dice» y «1987”. Vale, otra trampa. Son dos canciones, pero me resulta difícil no escucharlas juntas como si se tratara de una unidad. Nadadora publicó en 2010 un trabajo sorprendente, virtuoso, lleno de lirismo. Un clásico de la música popular independiente. “Luz, oscuridad, luz” es un disco sin desperdicio. Un disco en el que a las guitarras se les extraen texturas desconocidas, en el que las historias se plagan de ensoñación y del tacto de una musicalidad desbordante. Nadadora dejaron de grabar porque no podían vivir de esto. Nos dejaron «Sara dice» y «1987«, dos historias de amor, desamor, de guitarras punzantes hasta taladrar el alma. Nos dejaron un disco inigualable.


Gregorio Mª Callejo

5- Grises:Polaroid”. Año 2011. De nuevo en Euskadi, una banda asalta el panorama indie con un disco lleno de frescura, melodías elegantes y alegría desbordante. “Polaroid” es un verdadero canto vitalista, arropado en guitarrazos y final con su puntito épico. Deliciosa. 6- We Are Standard:Love me”: De nuevo 2011 y de nuevo Euskadi. Pero con un tono completamente diferente. Pop sofisticado, multinstrumentalidad , influencia del viejo sonido Manchester de los Charlatans y los Stone Roses, y toque un tanto pijo (son de Getxo, claro) , para una canción desbordante que resulta imposible no bailar. De hecho la banda ha ido inclinándose decididamente por la música bailable con un funk electrónico con ribetes de psicodelia. Muy buenos.


«Triángulo de Amor Bizarro»

7- Triángulo de Amor Bizarro: “De la Monarquía a la Criptocracia”. Año 2010… y vamos a ver… ¿a quién no le da curiosidad un título como este?. Escuchadla, pero no vais a desentrañar nada sobre su enigmático título. Sólo una historia bastante gore, a golpe de percusión y guitarras ordenadamente salvajes. Libertad absoluta para estos gallegos, ya clásicos del indie español, que cogen a «The Jesus and Mary Chain«, al acervo Shoegazer de los noventa y que hacen lo que les da la gana con ellos. Espléndidos. Próximo capítulo: «Odio París», «Los Planetas» y «La Bien Querida».

Majadahonda Magazin