El científico de Majadahonda, José María Rojas, habla en este capítulo sobre las energías «verdes» y el calentamiento global

FEDERICO UTRERA. *Doctor en Comunicación Audiovisual, profesor, editor, escritor y periodista. El científico de Majadahonda, José María Rojas, prosigue su conversación sobre asuntos de actualidad y este domingo 9 de abril (2023) aborda el denominado «catastrofismo climático», del que proporciona su punto de vista: «Hay personas que dicen no querer tener hijos porque el mundo se destruirá en un infierno. Hay gente que agrede a los cuadros, porque una niña, Greta Thunberg (por cierto, sin ninguna formación en nada), lanza una protesta por el cambio climático. En cualquier caso, estén tranquilos no desapareceremos por el clima en 2030, ni en 2050. En ese sentido, es muy recomendable el libro de Michael Shellenberger, «No hay apocalipsis». Sin embargo, ¿cuál es la respuesta?: llenar las sierras (y pronto las costas) de aerogeneradores que están matando aves, modificando el paisaje, talando olivos para poner placas solares y generando unos materiales contaminantes que luego no sabes qué hacer con ellos, y sin necesidad de un informe de impacto ambiental, porque estamos «calentando el planeta«.


Federico Utrera y José Mª Rojas

¿Se han estudiado los ciclos de calentamiento y enfriamiento del planeta por causas humanas?: –El planeta se calienta y se enfría continuamente, pero ¿qué es peor, que se caliente el planeta o que exista una glaciación?. Si viniera un cambio hacia el frío, eso sí que sería un drama. Ahora el planeta está más verde que en épocas anteriores, las plantas crecen más rápido porque hay más CO2 que utilizan, con el agua y la luz solar, para formar glucosa y liberar oxígeno en la fotosíntesis. La probabilidad de influencia del hombre en la subida de las temperaturas es mínima y el clima cambia sin contar con nosotros, porque la principal causa es la oscilación del eje de rotación de la Tierra, junto a las tormentas solares, la radiación cósmica…


José Mª Rojas recomienda la lectura del libro de Michael Shellenberger, «No hay apocalipsis», algunas de cuyas páginas pueden leerse pinchando aquí

Hay muchos aspectos en los que no interviene el hombre... –¿Cómo va a influir el hombre en que de repente estalle un volcán y empiece a fluir materia y enormes cantidades de CO2?. Sin embargo, la respuesta “woke” es que hay que reducir el número de vacas, dejar de comer carne y pasarnos al tofu y al polvo de grillo. Es un absurdo, porque el mundo no se va acabar. Alegan que se están extinguiendo especies, pero ignoran que se han extinguido antes de forma masiva y brutal, ese es el ciclo de la vida. Hubo épocas en que no había hielo en los polos y subió el nivel del mar, y otras en las que los glaciares llegaban hasta el Ecuador. Ahora es posible que estemos en un ciclo de calentamiento y efectivamente, en un futuro, habrá ciudades junto al mar a las que les afecte, pero lo que habrá que hacer es anticiparse con tecnología, como hicieron en los Países Bajos con los diques costeros, y no volvernos histéricos. Más grave que el calentamiento es la contaminación de los océanos por plásticos, pero esa es otra historia». (Continuará)

Majadahonda Magazin