SILVIA ANULA. La popular actriz hispano-árabe de Majadahonda, Mina El Hammani, ha vuelto a Élite en su octava temporada y por ello es portada de la revista Neo2 este 21 de septiembre (2023). Por ello Mina El Hammani posa con un espectacular vestido Claro Couture y con joyería de Bulgari: collar Serpenti Seduttori en oro rosa, zafiros, malaquita y pavé de diamantes. La entrevista la ha realizado Rodrigo Díaz Rusián y la Producción y edición es de Ramón Fano pero el equipo de producción ha sido también muy potente: las Fotografías de Alberto Van Stokkum la Realización de Daniela Gutiérrez, el Maquillaje de Sofía Camarena para Chanel Beauty de One Off Artists, la Peluquería es obra de Yos Baute para Goldwell de One Off Artists y se ha rodado hasta un vídeo de Borja Respal para The Feelms. Todo ello con un Retoque Digital de Alpha Estudio con los Asistentes de Fotografía, Juan Pío García, de Estilismo Caterina Pascual y de Peluquería con Mónica Ramos.
El reportaje se grabó en el Estudio Espacio Floreta y el vestuario lo facilitaron Bulgari, Mónica Sanz de la Iglesia y Sofía Pedroche para que Mina El Hammani apareciera deslumbrante y cuando le preguntaran con «un poco de contexto… naciste en 1993 en Majadahonda. Hija de padres marroquíes de clase obrera», ella respondiera: «Sí, nací en Madrid en el año 93…. ya voy para los 30 la verdad. Mis padres se conocieron en Madrid. Ellos vinieron independientemente. Primero vino mi madre y luego vino mi padre como a los dos años, se conocieron aquí y hemos nacido aquí, yo y mis dos hermanos. Hemos estado viviendo en Majadahonda hasta que yo tenía 8 años prácticamente». ¿Tu educación estuvo más ligada a la cultura de tus padres o la de aquí? –Ha sido una combinación de ambas. Tener unos padres de otro origen que puedan vivir en otro país y enriquecerte de ambas culturas me parece lo mejor que le puede pasar a cualquier persona. Mi padre murió hace dos años, pero siempre le recuerdo. Y a mi madre le estoy muy agradecida por todo. . ¿Cómo era la Mina de pequeña? – Desde pequeñita siempre he sido muy muy curiosa. Mi madre siempre decía que era una persona muy tranquila, muy buena y muy trabajadora…
¿Ha sido difícil conciliar ambas identidades? Majariega española e hija de padres marroquís, ¿te sientes un mix de ambas? –Sí, totalmente, sobre todo en la adolescencia. En la niñez creo que pasa un poco por encima porque al final estás jugando y no estás tan consciente de que tienes que conciliar dos identidades. Además que ya la adolescencia de por sí es una etapa muy complicada a la hora de saber quién es uno mismo. Por eso, que mis padres me hayan querido aportar esa cultura es una cuestión de raíz. Yo tengo a mi familia muy arraigada, tanto la de sangre como mi familia de amigos… Yo me siento de aquí, pero tengo muy presente de dónde viene mi familia. También es importante que la gente te haga sentir de aquí. ¿Y hoy cómo te sientes? –A día de hoy me siento mujer de mundo. Marruecos está en mi corazón. España está en mi corazón. Pese a que ya he echado raíces aquí, no me limito. Si el día de mañana me tengo que ir, me voy. Nunca he tenido esa sensación de sentirme anclada ¿Y cómo te dio por esto del cine? – Pues resulta que yo tenía una vecina que salía con un chico. Pues la tía de este chico trabajaba en RTVE y estaban buscando personajes para “Ana y los 7”. Yo tendría seis, siete años, pero no pude hacer la prueba. A día de hoy agradezco el no haberla hecho. Pero entendí que había una profesión en la cual podías recrear a distintas personas y meterte en ciertas situaciones. Y me pareció alucinante… Recuerdo que le preguntaba a mi madre que quién era y ella me decía que yo podía ser lo que yo quisiera: una astronauta, médico, niña de clase alta… En ese momento fue que me picó la curiosidad y me puse a indagar más sobre la profesión. Y desde ese momento, todo lo que yo hacía en mi vida estaba enfocado en ser actriz.
Y en ese momento, ¿cómo te tomaste no hacer el papel? –Pues no haber ido a ese casting me trajo cierta decepción. Mis padres nos han dado todo lo que han podido y han trabajado muy duro para hacerlo y yo entendía el componente económico de que, si me cogían, podía ayudar a mis padres para aportar en casa. Mi padre ha sido obrero toda la vida y ganar 800 euros al mes con cuatro personas a su cargo no ha sido para nada fácil. Luego nos mudamos a San Fernando de Henares y empecé un nuevo colegio y seguía teniendo la cabeza súper enfocada en seguir estudiando interpretación, pero mis padres no lo veían claro y una con ocho años no puede trabajar. Lo siguiente fue el instituto. Y hasta los 16 no conseguí mi primer trabajo. El dinero lo utilizaba para pagar el bono bus e ir a Madrid a buscar cursos. A los 17 ya conseguí un buen sueldo para pagarme un curso de interpretación. Lea la entrevista completa pinchando aquí.
Vamos que esta es incluso menos majariega que yo.