JORGE RUBIO. El último pleno del Ayuntamiento de Majadahonda acogió dos mociones estrechamente vinculadas con la educación aunque enfocadas desde dos puntos de vista diferentes. Por un lado, el Grupo de Ciudadanos presentó la creación de un programa destinado a «mejorar conductas y actitudes de alumnos con problemas de convivencia» para evitar el absentismo escolar. Una iniciativa polémica cuya presentación «en sociedad» había suscitado multitud de dudas al resto de Grupos Municipales al entender que el partido naranja estaba presentando una especie de «gueto» en el que apartar a los adolescentes conflictivos. Mariene Moreno (Cs) fue la encargada de salir a la palestra para defender esta moción y explicarla ya que según señaló «no se había entendido bien» lo que estaban proponiendo. «Es un espacio en el que los alumnos encuentren dentro de su propio centro un lugar para reflexionar sobre su conducta», detalló la edil naranja, para añadir que este programa también serviría para «que se responsabilizasen» de su propia actitud. Sin embargo, su exposición no consiguió disipar las dudas sobre un proyecto que para el resto de Grupos se escapaba a las competencias que posee el Ayuntamiento.


«A mi en principio no me parece mal la moción. A lo mejor en las gestiones oportunas habría que realizar un estudio de alumnos expulsados o con conflictos en las aulas para realizar este recurso», señaló Mercedes Pedreira, al tiempo que señalaba que la moción se quedaba «un poco coja». Por su parte, Juancho Santana (IU) incidió en que la idea que parecía transmitir esta moción era la creación de un «gueto», al tiempo que planteó dudas sobre quién debería gestionar este programa. «No está clara, da la sensación de que busca segregar a menores y sacarlos de las aulas», manifestó también Irene Salcedo (Somos) al tiempo que reprochaba que «Ciudadanos no conocía las necesidades reales del municipio». Elisa Piñana (PSOE) señaló que se debería «saber si en este municipio se ha realizado un estudio para conocer los indicadores de conflictividad en las aulas de ESO» antes de «poner soluciones» e incidió en que no se mencionase en la moción a la Concejalía de Educación.

Por parte del Equipo de Gobierno intervino Fátima Nuñez (PP) que parafraseando al escritor Francisco Umbral reconoció que no tenía más remedio que «hablar de su libro» al mencionar algunos de los proyectos que desde su Concejalía se han realizado con adolescentes. Nuñez incidió en la falta de competencias para actuar dentro de los centros y señaló que en Majadahonda solo «hay 2 adolescentes absentistas». Sin embargo, concluyó que pese a que al modelo de Ciudadanos no creía «que fuese viable», vería si alguna acción «se pudiese desarrollar». Mariene Moreno concluyó señalando que «no se iba a sacar a los alumnos de las aulas» y que este programa se estaba «haciendo en Alcalá de Henares y Andalucía» en referencia a las dudas expresadas por el Grupo Socialista. «No es una segregación, es un apoyo externo pero dentro del mismo instituto», finalizó. La moción salió adelante con 18 votos a favor (PP, Cs y Centristas) y 7 votos en contra (PSOE, Somos e IU).

La otra iniciativa fue llevada al pleno por Somos e IU sobre la ayuda y el apoyo a la atención temprana en los menores con diversidad funcional. «La evolución mas favorable es cuanto antes se detecte y cualquier retraso puede ser perjudicial para los menores», advirtió Juancho Santana (IU) sobre los riesgos de no atenderlos de forma adecuada. «Hay una población potencial del 7% de niños hasta 6 años» reveló el edil, para señalar que en la Comunidad de Madrid existían más de 30.000 menores con diversidad funcional. «Siempre hablamos de prevención y la atención temprana es una forma de hacerlo al tiempo que se programan diferentes habilidades», señaló Irene Salcedo (Somos), acompañando a IU en su presentación de la moción. Al tiempo, insistía en los recortes sufridos en los últimos 10 años y pese a la existencia de programas proporcionados por el Centro Regional de Coordinación y Valoración Infantil (CRECOVI) de la Comunidad de Madrid.

«Aunque haya un niño sin atención, nos parece suficiente para que se haga», manifestó con contundencia Mercedes Pedreira (Centristas). Elisa Piñana (PSOE) destacó que se estaban cerrando «centros base» y que esto estaba «causando un desajuste» para las familias que debían recurrir a centros concertados y privados. Mariene Moreno (Ciudadanos) calificó este asunto como «primordial» anunciando el apoyo de su Grupo a esta iniciativa. Por último, María José Montón (PP) señaló que estas acciones ya se estaban realizando y «no vio necesidad de instar a la Comunidad de Madrid» como pedía la moción, ya que se estaba «atendiendo a 5.300 niños en 2017, un 4% más que en el año anterior». Juancho Santana cuestionó estos datos e insistió en que no había plazas públicas suficientes para atender la demanda de atención temprana para menores con diversidad funcional. Finalmente la moción fue aprobada con 14 votos a favor (Cs, PSOE, Somos, IU y Centristas) y 11 abstenciones (PP).

Majadahonda Magazin