MANU RAMOS. La película «B» protagonizada por Pedro Casablanc como Luis Bárcenas, ex tesorero del Partido Popular (PP), fue vista en La Sexta por casi un millón de personas, según los datos de audiencia que ha hecho públicos la web «Ver Tele» y que cifra el número de espectadores concretamente en 918.000. «Cuatro años después de su trayectoria cinematográfica, sumida a nivel televisivo en la polémica por el silencio que TVE durante la época del Gobierno de Rajoy impuso sobre la película, ‘B’ se estrena en televisión en el prime time de la Sexta», señala esta revista. Y no es para menos: el filme describe de manera aséptica y textual como fue la declaración de Bárcenas cuando decidió «cantar» ante el juez Ruz y aseguró que había dado dinero «en mano» a Mariano Rajoy, Dolores de Cospedal, Federico Trillo, Jaime Mayor Oreja y el resto de la cúpula del PP, mensualmente, en sobres y en efectivo, «en billetes de 500 euros» y en cantidades que en ocasiones se acercaban a los 35.000 euros por persona.

El escalofriante relato «fue dirigido por David Ilundain y con Manolo Solo en el papel del juez Ruz, fue nominada a tres premios Goya (guión adaptado, actor protagonista, actor de reparto) a pesar de no tener una mejor carrera comercial precisamente por esa sombra de «bloqueo» por parte del PP que pesaba sobre ella. Algo que al menos sí le valió el el Premio Feroz Especial», concluye la revista. Y proporciona esta sinopsis: «El 15 de Julio de 2013, el ex-tesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, es trasladado desde la prisión para declarar en la Audiencia Nacional. Hasta este día, había negado toda relación con los llamados ‘papeles de Bárcenas’, pero después de 18 días en prisión ha decidido cambiar su declaración. Esta película retrata lo que pasó en esa sala aquel día».  LAS RELACIONES DE BÁRCENAS CON MAJADAHONDA. AGENCIA EFE. El ex alcalde de Majadahonda, Guillermo Ortega, subrayó el 20 de diciembre de 2016 ante el tribunal que le juzgaba con otras 36 personas por la primera época de la trama Gürtel (1999-2005) que nunca le había entregado ningún dinero al ex tesorero del PP Luis Bárcenas, mientras que aseguró que sí lo hizo con el anterior tesorero de la formación política Álvaro Lapuerta. «Nunca he entregado al señor Bárcenas cantidad ninguna, no le conozco de ningún proyecto, ha sido un compañero de partido más», dijo al ser preguntado por su abogado, César Canora. Ortega incidió en que «siempre» que ha hablado con el extesorero en ‘Génova’ -sede del PP de Madrid y nacional- fue para tratar temas de partido a nivel regional. «Nunca me ha llamado para recomendarme ni para decirme nada» sobre favorecer a algún empresario. «Para eso me llamaba Lapuerta», recalcó «Willy» Ortega, al tiempo que afirmó que él sí le entregó dinero a este ex tesorero en presencia de Bárcenas. Además, destacó que le extrañaba que se hiciera referencia a Bárcenas como ‘Luis, el cabrón’ -tal y como al parecer aparece en la ‘contabilidad B’ de Correa– ya que «le llamábamos el alemán porque era muy cuadriculado».

FOXÁ LE HIZO LA «VIDA IMPOSIBLE» Y LE DIERON «LA PATADA HACIA ARRIBA«. Sobre su dimisión relató que todo comenzó cuando su sucesor en la alcaldía, Narciso de Foxá, que entonces era el responsable de la empresa que gestiona el suelo municipal Patrimonio Municipal de Majadahonda, S.A. (PAMMASA), le hizo la «vida imposible» a raíz de una polémica por la adquisición de un terreno para la construcción de una urbanización de lujo en la localidad madrileña. Apuntó que el ya ex alcalde majariego era «amigo» del predecesor de Ortega, Ricardo Romero de Tejada, y «amigo personal» de la ex presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. «A mí me hacen dimitir por el tema de las parcelas cuando yo llevaba razón», enfatizó y recordó que se le acusó de «corrupto» cuando no se había presentado «ni una querella ni denuncia». Hoy cumple 38 años de cárcel por sentencia firme pero entonces ironizó al decir que después de dejar ser alcalde le ascendieron para ser gerente del Mercado Puerta de Toledo: «A mí me dan una patada hacia arriba», afirmó. Aún así, admitió que vio como un respiro que Esperanza Aguirre y el ex secretario general del PP de Madrid Francisco Granados le pidiesen que dejara la alcaldía -poniendo como «excusa» la implantación de Oficina de Atención al Cliente (OAC)- porque estaba pasando por una enfermedad de corazón: «No tengo la cabeza para más ruido, no es que dimita es que me voy porque no os aguanto más, sois insoportables«, recordó que dijo.

CONCEDIÓ 7 MILLONES DE EUROS A MOLPECERES EN MAJADAHONDA.: Sin embargo, recalcó que su salida del Ayuntamiento de Majadahonda se debió a que el propietario de las empresas Licuas y Coarsa había denunciado a Lapuerta -cuya causa está archivada por demencia sobrevenida- que Ortega no le adjudicó ningún servicio municipal, tal y como le comentó la exdiputada Carmen Rodríguez Flores en un encuentro por casualidad en un restaurante, según dijo. Al comienzo de la declaración Ortega afirmó que Lapuerta le llamó en una ocasión para que adjudicase contratos públicos municipales a estas empresas porque era «gente que colaboraba con la casa». Según el escrito de acusación de la Fiscalía, las empresas de Joaquín Molpeceres -que aparece en la pieza denominada ‘Papeles de Bárcenas‘- resultaron beneficiarias de adjudicaciones por más de 7 millones de euros. Ortega explicó al tribunal cómo se realizaron las adjudicaciones de numerosos servicios municipales y advirtió que de derecho administrativo sabe lo «justito», pero que era consciente de que como alcalde no podía hacer una concesión a una empresa «a dedo» porque la ley de contratación no lo permite, salvo «si existen calamidades».

«CUALQUIER PERSONA HUBIESE CONTRATADO A CORREA» PARA HACER LA OAC: Tras concretar cómo se hicieron todos los expedientes de contratación que señala el Ministerio Público en su escrito de acusación, destacó que la OAC era un proyecto que «cualquier persona hubiese contratado con las empresas de Correa«. «Es un proyecto que yo implantaría en cualquier ayuntamiento ahora si tuviese la oportunidad«, añadió, al mismo tiempo que lo definió como un «coche de carreras». Por otro lado, apostilló que requirió los servicios del también imputado Antonio Villaverde para que gestionase sus cuentas en Suiza en un momento en que se «arruinó» por invertir en el sector del ladrillo. Además, resaltó que nunca había utilizado a su hermano Jacobo Ortega como testaferro de sus empresas. Sobre los relojes que la Fiscalía le acusaba de haber adquirido a la joyería Suárez por más de 27.000 euros a través de las empresas de Correa con la emisión de facturas falsas, le quitó importancia diciendo que le «gusta» este artículo de lujo y que era cliente de este establecimiento desde antes de conocer al ‘cabecilla’ de la Gürtel. Ortega reconoció que que tanto Correa como él se habían regalado alguna vez relojes.

BÁRCENAS, EL PRÓXIMO EN DECLARAR. Con esto se dio por finalizada la sesión, dando fin al enjuiciamiento del apartado relacionado con las irregularidades de la trama con el Ayuntamiento de Majadahonda. El juicio se reanudó el 16 de enero de 2017 con la declaración del ex tesorero del PP Luis Bárcenas, que se enfrentaba a 42 años y 6 meses de prisión. El presidente del tribunal, Ángel Hurtado, llamó a comparecer, al menos, durante todas las jornadas que se dedicaron a esta pieza, a todas las personas que aparecían implicadas según el escrito de acusación. Estas fueron: Bárcenas; su mujer, Rosalía Iglesias, el ex diputado del PP por Segovia Jesús Merino; el ex tesorero de Alianza Popular (AP) Ángel Sanchís Perales; el hijo de éste, Ángel Sanchís Herrero; y el supuesto testaferro de Bárcenas, Iván Yáñez. Hurtado citó también a comparecer al ex alcalde de Pozuelo de Alarcón y ex marido de la exministra de Sanidad Ana Mato, Jesús Sepúlveda, por su «implicación en este grupo». Sin embargo, permitió la ausencia en las siguientes sesiones a los acusados que aparecían en la parte relacionada con Majadahonda.