LIDIA GARCIA. Muchos jóvenes ya no conocerán quien fue la actriz y precoz cantante española Sara Montiel (1928-2013), que triunfó en Hollywood y México siendo una adelantada a su tiempo, pero muchos mayores tampoco sabrán que cuando tenía 74 años se casó… en el Ayuntamiento de Majadahonda. La revista «¡Hola!» ha revelado este lunes 17 de octubre (2022) las fotos y el texto completo de un reportaje publicado hace dos décadas bajo el título de «Se cumplen 20 años de la boda de Sara Montiel y Tony Hernández: así contó «¡Hola!» el enlace. La pareja, con una diferencia de edad de treinta y cinco años, se dio el ‘sí, quiero’ en una ceremonia civil» y el texto que firma la periodista Belén Juan comienza así: «Para Sara Montiel era su 4º matrimonio, para Tony Hernández, el 2º. El amor entre ambos no entendía de edad: 35 años de diferencia. En el verano del año 2001, la artista ya anunció, en exclusiva, su compromiso en las páginas de nuestra revista: se había enamorado del joven operador de cine cubano, relación que calificó como “algo serio”, e hizo oídos sordos a todos aquellos que hablaban de “un capricho de la Montiel”, por la abismal diferencia de edad: ella tenía 74 años y él 36″.

El romance comenzó contra todo pronóstico y quedará siempre en la hemeroteca del mundo del corazón por la mítica frase que entonó la artista a la salida del Ayuntamiento de Majadahonda, negando su boda para preservar la exclusiva. “¿Pero qué pasa?, ¿qué invento es esto?”. En la mañana del 17 de octubre de 2002, Sara Montiel y Tony Hernández se dieron el «sí quiero» en una ceremonia civil, a la que tan solo asistieron dos testigos: el doctor Claudio Mariscal y Luis Fernando Carrasco. Los hijos de la artista, Thais y Zeus– que adoptó junto a Pepe Tous– ni estaban ni se les esperaban, mientras que sí asistió Daylín, la hija de Tony recién llegada desde Cuba.

A pesar de que la intérprete de «La Violetera» estaba viuda y Tony, divorciado, su decisión de pasar por el altar civil no fue vista con buenos ojos por el entorno de la artista: “No teníamos que dar cuenta a nadie”, respondió ella. Sin embargo, la boda fue toda una odisea, porque el juez que iba a oficializar la ceremonia, en casa de la artista, los dejó plantados 24 horas antes. Su historia acababa de empezar. Ella se casaba por amor, porque no entendía la vida sin vivir el presente: “Me he casado porque quiero mucho a Tony y me siento muy a gusto a su lado. Yo no puedo esperar a casarme dentro de 1 o 2 años porque yo no tengo futuro, sólo presente”, afirmaba la artista. Bajo la filosofía de vida del «carpe diem» (vive al día), Sara y Tony se convertían en marido y mujer y empezaban su particular «dolce vita«. Un hombre que, según la artista, la llenó “de cariño, de tranquilidad y de paz”. La artista fue vestida por Antonio Ardón, con un traje de dos piezas en seda y paillettes en color champán. Sin ramo de novia, optó por una corona de flores naturales. El maquillaje fue obra del estilista y amigo íntimo, Manuel Zamorano.

«Pero la felicidad no fue completa en este día tan especial para Sara Montiel, que estuvo marcada por la ausencia de dos personas muy especiales para ella: sus hijos. “Días antes de la boda yo fui a hablar con ellos, pero no hubo nada que hacer, aunque respeto su decisión”. Thais y Zeus nunca confiaron en el nuevo marido de su progenitora: “Hubo una temporada en que ciertas personas comenzaron a hablar muy mal de Tony”. Su pareja fue acusada de estar detrás del robo que la actriz sufrió en su casa, en el madrileño distrito de Salamanca. Los asaltantes amenazaron a la actriz con punzones y le obligaron a abrir la caja fuerte. “Le calificaron de ladrón, que si el atraco de mi casa lo había hecho él en complicidad con mi hermana Elpidia, que si era homosexual, que si se había llevado las joyas y el dinero a Cuba. Y claro, mis hijos se dejaron influir por todos esos comentarios”, comentó la actriz en las páginas de la revista. Aunque el entorno no aprobó la relación entre ambos, su matrimonio fue efímero. Tan solo duró 1 año el amor entre ambos. Sus hijos, preocupados por la unión de su madre, le darían un ultimátum, que acabó por romper su 4º matrimonio. Después llegó el divorcio, las peleas y los enfrentamientos en televisión.

“Cuando decidimos casarnos, Tony me dijo que se casaba con la condición de que fuese en régimen de separación de bienes”, declaraba la actriz en ¡Hola!. Ante las dudas que sobrevolaban en su relación, calificada de interés por su círculo más cercano, el cubano quiso defenderse: “Yo no quería que se pudiera pensar que yo me casaba por el dinero de Sara”. Además, para despejar todas las sombras en torno a su relación, Sara Montiel aclaró que tenían capitulaciones matrimoniales. Ella hubiese cumplido este año 2022 sus 94 años «y aunque no sepamos que rumbo hubiese tomado su vida, lo que sí que tenemos claro es que en la portada que protagonizó, adoptó sin ninguna duda la leyenda de la diva, la de una artista excesiva pero sobre todo divertida. Años más tarde, la artista fallecía a los 85 años en Madrid, en la mañana del 8 de abril de 2013″, concluye el reportaje.