JUANMA CUETO. Ni Cristiano Ronaldo, Messi, Neymar o Mbappé. Mi ídolo es Manuel Alonso, “Manolo” para los amigos. El 21 de marzo de 2021 es una fecha que ya está con letras de oro en la historia del atletismo. A sus 85 años ha conseguido el récord del mundo de 800 metros en la categoría M-85, en la pista cubierta madrileña de Gallur, con un tiempo de 3:08,06. Una nueva plusmarca mundial a un ritmo de 3:55 el kilómetro que baja tres segundos el anterior registro del canadiense Earl Fee en 2014. Palabras mayores. Brutal. Una pasada. Para quitarse el sombrero. El día fue muy especial porque además celebraba su cumpleaños y su aniversario de boda. “Hemos clavado la carrera. Estoy feliz porque era un récord muy complicado. Se lo debo todo a mi entrenador, Antonio Serrano. Es fundamental obedecerle. Sigo sus instrucciones a rajatabla. Llevo 21 años con él y sólo tengo palabras de agradecimiento. Me ha aportado muchísimo durante todo este tiempo. También doy las gracias a la Federación madrileña de atletismo. Es muy emocionante conseguir el objetivo después de tantas horas de entrenamientos”. Y añade: «Majadahonda me trae muy buenos recuerdos. He tenido la suerte de participar en algunas carreras y es un privilegio correr por sus calles. La gente es muy cercana. Se nota que es una ciudad con mucha tradición deportiva. Lo que me motiva a seguir compitiendo es mi amor al atletismo y pelear por los récords. Lo más importante es la salud. Llevo una vida muy ordenada. Nunca he fumado ni bebido. Tengo una buena alimentación. Mi esposa me cuida mucho. Estoy muy enamorado. Llevamos 61 años casados con una felicidad absoluta. Es la mujer más maravillosa del mundo. Siempre está pendiente de mí. El tener una pareja en casa que me anime tanto es extraordinario. Soy feliz con las dos hijas que tengo. Los más pequeños de la familia son bisnietos porque el nieto más pequeño ya tiene 22 años. Están orgullosos de su abuelo. Es muy bonito transmitir ese cariño mutuo. El amor es el pilar de la vida. Sin amor no hay nada«.
Manuel Alonso nació en 1936 y puede presumir de un palmarés de lujo: 7 veces campeón del mundo, 10 veces campeón de Europa, 15 récords internacionales o elegido mejor atleta veterano de Europa en 2016. Un todoterreno de apenas 1.55 de altura. Un “chaval” sobre el tartán. Rompe moldes. Ha corrido más de veinte maratones. Cambió la distancia de los 42.195 metros por pruebas más cortas. Contagia optimismo. Un ejemplo constante de fuerza, superación, perseverancia y disciplina. Tremenda vitalidad. Un modelo para los deportistas de su generación y para los niños que sueñan con llegar algún día a la élite. La edad no tiene límites. Y Majadahonda es muy especial para él. Aquí ganó, por ejemplo, el Campeonato de Madrid de veteranos al aire libre, en la temporada 2013-14. Sus entrenamientos son muy exigentes. Tocar la gloria exige máximo sacrificio para alcanzar las metas. Corre 70 kilómetros a la semana y hace 400 abdominales al día. Empezó a trabajar a los 14 años y se jubiló a los 68. Pasa el tiempo y sigue disfrutando como el primer día. Un “extraterrestre” vestido de corto se ha paseado, se pasea y continuará paseándose por las pistas del mundo para seguir dejando con la boca abierta a los aficionados. «Nada es imposible». Ese es su lema.






Ostras, qué crack!
Que grande! Ha salido tb en los deportes del Mediodía, con Pedrerol
Nos gana a todos¡
Si Pedrerol os sigue habéis triunfado
Gran modelo a seguir. Bravo!