
El primer edil majariego, Narciso de Foxá, salía así a dar la cara por el concejal de Movilidad, Gustavo Severien -los ediles solo intervienen en las contestaciones a las preguntas si así lo considera el alcalde– como antes había hecho con el de Urbanismo, Obras y Mantenimento, Ricardo Riquelme, ante las quejas de otra vecina por el estado de la Avenida Doctor Marañón. Severien ya había advertido en un pleno anterior que la única solución pasaba por “seguir presionando al Ministerio de Fomento del nuevo Gobierno en funciones, ya que la actual ministra, Ana Pastor, ha pasado a presidir el Congreso. Está en el programa electoral del PP la remodelación del entorno de RENFE. Y el concejal de Urbanismo también tiene previstas obras, como unir el carril bici con la estación”.
“Para mí es una prioridad”, dijo el alcalde, pero la representante de la asociación vecinal seguía quejándose: “solo escuchamos buenas palabras desde hace 3 años y hacer la estación más accesible no es tan costoso: usted es el responsable del bienestar de los vecinos. Y los mayores o con movilidad reducida no podemos subir al tren”. El alcalde multiplicaba sus argumentos: “el interventor no me deja gastar ni un euro de los vecinos en asuntos para los que no soy competente ni tampoco puedo entrar en una propiedad privada. Pero sí le digo que tengo mucha sensibilidad, y no de boquilla, con el problema que me plantea y la voy a seguir teniendo”, concluyó Foxá.







