JORGE RUBIO.El fútbol sigue aportando protagonistas a la actualidad y los equipos y jugadores vinculados a Majadahonda continúan siendo noticia. «Chiki» supera sus marcas obtenidas en el Rayo Majadahonda tras sumar cuatro dianas junto al Sporting B. El que fuera jugador del Rayo Majadahonda Christian Borrego «Chiki» vive un momento dulce en su carrera deportiva tras alcanzar la titularidad del Sporting B tras haber sido descartado por Antonio Iriondo a pesar de su contribución al ascenso de categoría y su prometedor futuro. Así lo refleja La Voz de Asturias que repasa la trayectoria del joven futbolista así como su paso por el Rayo Majadahonda: «Chiki se encuentra en su mejor momento desde que fichó por el Sporting B durante el pasado mercado veraniego. El atacante se ha afianzado en la titularidad desde hace cinco jornadas y acumula 4 goles desde entonces, siendo un hombre clave en la reacción del filial sportinguista, que ya roza la permanencia en Segunda B. Chiki, de 22 años, firmó por dos temporadas -con una ampliación opcional- y llegó procedente del Rayo Majadahonda, donde jugó unos 1.000 minutos. Los disputó repartiendo esfuerzos entre la delantera y las bandas durante la temporada del ascenso a Segunda división, año en el que anotó 3 dianas, una cifra ya superada«.

Marcos Llorente acusó al jugador del Rayo Majadahonda Enzo Zidane de ser un «enchufado» y «malcriado» y eso puede costarle el puesto con su padre, pero una foto aflora su camaradería. La publicación Don Balón indaga sobre las posibilidades de Marcos Llorente de renovar en el Real Madrid y destacan la animadversión existente entre el jugador y la familia Zidane. Una enemistad que según detalla este medio comenzó a fraguarse cuando Zinedine Zidane entrenaba al Real Madrid Castilla y su hijo Enzo y Llorente eran compañeros de equipo jugando en puestos similares del centro del campo. «Más allá de la opinión de Zidane sobre las cualidades futbolísticas de Llorente, también se especula con la posible mala relación entre el canterano blanco y su hijo, Enzo Zidane.

Zinedine dirigió a ambos en el Castilla y, según informan, Marcos fue uno de los jugadores que más acusó al ahora jugador del Rayo Majadahonda de ‘enchufado’, ‘mimado’ o ‘malcriado’», revela este semanario deportivo. En lo que se refiere a la posible renovación de Llorente en el Real Madrid, Zidane señala que: «’Veremos para el próximo año. Conozco a Marcos desde hace mucho tiempo, es un jugador que siempre mejora. La única cosa para él es que necesita jugar más porque eso le va a venir bien. Me acuerdo cuando estuvo en el Alavés, jugó con continuidad y ahí hizo una temporada fenomenal», han sido sus palabras, lo que ha desatado las especulaciones sobre su probable salida del club. Sin embargo, una fotografía que reproducimos en esta misma página aflora la camaradería existente entre ambos jugadores cuyo nexo de unión es además Majadahonda: Marcos Llorente se formó en La Oliva y su familia era propietaria del Gimnasio Físico antes de su venta a la cadena Go Fit.

Mantovani recuerda sus entrenamientos en Majadahonda cuando esperaba para conseguir sus papeles. «Me dieron un piso en Carabanchel y dinero para comer. Iba a entrenar a Majadahonda y poco más. Casi no salía de casa. Mi familia se apuraba en conseguirme los papeles». Con estas palabras, el flamante jugador del Huesca Mantovani recuerda su llegada a España y su particular odisea para poder debutar en el fútbol profesional. Un tiempo durante el que estuvo entrenando en la ciudad de Majadahonda y que ahora el futbolista rememora en una entrevista realizada por El Periódico de Aragón.

«Juan Esnáider era directivo de Cadetes y me propone hacer una prueba en el Atlético. Me faltaban dos asignaturas para terminar la carrera de Técnico en Control de Alimentos, había planeado acabarlas y pasarme al fútbol aficionado. Entonces salió esta oportunidad. Habían ido ya algunos jugadores como Federico Azcárate, que llegó a debutar con el primer equipo. Yo viajé con otro chico, Damián Luengo, pero él no tuvo la suerte que yo. Hice la pretemporada, pero me piden tramitar la doble nacionalidad para poder jugar. Tuve que esperar cuatro meses«, recuerda Mantovani. Y concluye su relato sobre esta particular peripecia que vivió: «Fue una carrera contra el tiempo. Me terminó saliendo el 30 de enero. Ese día tuve que viajar a Italia. El 31 por la mañana cerré todo y volví a Madrid. A las seis de la tarde estaba firmando el contrato«.