Falló el planteamiento de esperar a jugar con la «ansiedad» de la Balompédica y fue el Rayo Majadahonda víctima de ese «estrés» al marcar el Linense primero. Sigue dependiendo de sí mismo y la victoria contra el Mérida en el último partido el próximo sábado en el Cerro le supondría un año más en Primera RFEF.

FEDERICO MTNEZ. El Rayo Majadahonda pisó este sábado 20 de mayo (2023) la «línea roja» ante la Balompédica Linense de La Línea de la Concepción (Cádiz) y tras perder 1-0 se presenta a la última jornada con solo 1 punto por encima del descenso, en el que están implicados 9 equipos para ocupar las 2 plazas que están en el «aire». Falló el planteamiento de esperar a jugar con la «ansiedad» de la Balompédica, a la que solo le valía la victoria, y tras una primera. parte insulsa, típica del juego fuera de casa del equipo rayista, la segunda parte dio un vuelco con el gol de Borja López en el minuto 50 de cabeza tras un saque de esquina botado por Perdomo. A partir de ahí, la ansiedad fue del Rayo Majadahonda, que lo intentó con más corazón que cabeza, situación que aprovechó el Linense para sacar más partido al encuentro dominándolo. Los fallos del equipo majariego fueron los de casi siempre fuera de casa: una primera parte indolente y una segunda en la que la precipitación, los errores en los pases cortos y largos, la ausencia de ocasiones de gol y de disparos a puerta le condenaron a la inanición en el marcador. Así las cosas, la última jornada el próximo sábado 27 de mayo a las 19:30 horas frente al Mérida, que se juega su entrada en la Copa del Rey, se convierte en una final a vida o muerte.


J. Federico Mtnez en la grada del Cerro

El Rayo Majadahonda depende de sí mismo y la victoria le supondría un año más en Primera RFEF. El empate o la derrota le aboca a la «ruleta rusa» de los resultados de los demás equipos, en especial Linense, Sanse, Fuenlabrada y Badajoz, que para colmo de males no juegan entre sí, pues tendrán como rivales al Ceuta, Alcorcón, Unionistas y Córdoba. Así las cosas, el Cerro del Espino tendrá que habilitar ese sábado ración doble de tila, con los aficionados pendientes de los móviles y los marcadores simultáneos. Una noche que por estas y otras razones será tan histórica como emocionante.

 

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