La afición del Rayo Majadahonda recompensó al equipo con una salva de aplausos tan larga que apenas no se recordaba en el estadio: victoria contra un joven Celta de Vigo que posee una calidad y jugadores de leyenda

FEDERICO MTNEZ. Que el Celta de Vigo haya salido este domingo 12 de febrero (2023) derrotado del Cerro del Espino se debe a esos extraños sucesos del mundo del fútbol, a la Virgen del Percebe que se le mostró esquiva a los visitantes o a que Santa Elena (la del santoral, no el entrenador, que también tiene una flor en el trasero, como decía Luis Aragonés). Y no porque el Rayo Majadahonda no tuviera ocasiones: solo hubo 2 por cada equipo, un cabezazo de Jeisson que salió por encima del palo y el antológico gol de Pelayo a lo “Sandokan” y en jugada embarullada en el área chica. Y fue “antológico” porque se produjo en el último minuto del partido a pase desde el suelo del propio Jeisson previo cabezazo de Iriondo tras saque de esquina de Javi Ros, jugada de estrategia y tiralíneas que salió a la perfección. El Celta solo tuvo otra a saque cerrado de corner que repelió un cada día mejor Lucho a taconazo envenenado del atacante celtiña. Esa, y la escapada del lateral Miguel Rodríguez, que tras hacer 80 metros en sprint adelantó a Rahim, que no es precisamente cojo, y cuando se plantó en el área, Lucho le estiró el pie como en balonmano y le obligó a escorar tanto el balón que marró la ocasión de gol más clara del partido. Descontados estos 4 lances, el resto del encuentro fue divertido y emocionante, porque se vio a un equipo que a pesar de sus 6 bajas y el debut de su portero suplente, había salido del aeródromo de Vigo con el tanque lleno. Y un Rayo Majadahonda que a base de calidad, entrega y oficio, neutralizó al equipo más en forma, en cuanto a resultados, de las 3 principales divisiones del fútbol español.


Federico Mtnez en la grada del Cerro

«El equipo de moda visita Majadahonda. El Celta B busca la cuarta victoria consecutiva para seguir en puestos de play-off», titulaba El Faro de Vigo. «El Celta B estrena su condición de play-off en Majadahonda”, matizaba el diario Atlántico, aunque se tentaba la ropa: “Dicen los que saben de fútbol que cada victoria te acerca un poco más a la siguiente derrota. Es ley de vida. Pero el Celta B quiere retrasar lo máximo posible este momento, pues lleva 7 jornadas consecutivas sin perder dentro de una racha de 1 única derrota en 11 partidos que le ha permitido pasar en un par de meses de la zona de descenso a la del play-off”. Y La Voz de Galicia lanzaba las campanas de la catedral de Santiago al vuelo: “El Celta B busca ante el Rayo Majadahonda su cuarto triunfo consecutivo”. Pero no fue exceso de optimismo o de confianza lo que provocó que los vigueses cayeran derrotados. La magia del fútbol y sus leyes invisibles recuerdan que un equipo puede tener mala suerte pero al final de temporada se le equilibra con buena fortuna. Y si el Rayo Majadahonda perdió partidos en casa que tenía ganados o en el peor de los casos nunca perdidos contra el Real Madrid-Castilla, Linares, Ceuta o Alcorcón, ahora el cargador de la buena suerte, que tampoco es eterno, está compensando aquel mal fario que embarró al equipo hasta los últimos lugares de las clasificación.


Rayo Majadahonda resurge de nuevo en el Cerro

Pero no todo fue cuestión de suerte y en el fútbol nadie regala nada. Si el Rayo Majadahonda salió con los 3 puntos en el bolsillo y se encarama a la zona templada de la tabla a 10 del play off fue por varias circunstancias: le benefició no salir como favorito y supo contener al Celta en el primer tiempo, peleó cada balón como si fuera el último, dominó los “uno contra uno” contra un rival más rápido que el viento y los cambios de Santaelena, como suele ser costumbre, aciertan de pleno. Si a eso unimos que Javi Ros está de dulce, que Lucho busca hueco en Primera División, que el fichaje de Pelayo como central y de Héctor en la banda han soldado aún más una defensa que ya era pétrea y que el Rayo Majadahonda ya empieza a tener un fondo de armario algo más que decente, ahí tenemos la pócima de Asterix que explica el ascenso meteórico de un equipo que ya mira al ascenso más que al descenso.

La plantilla está además fuertemente unida y es muy solidaria, como se ve en las entrevistas de sus integrantes en la Tertulia de La Oliva de Radio Majadahonda, y además Santaelena ha sabido extraer a base de experiencia lo que el equipo pecaba por juventud inexperta. Pero como pasa casi siempre, ahora hay que revalidar la racha en Ceuta, falso colista que desde que se enfrentó al FC Barcelona en Copa del Rey lleva sin perder 5 partidos y ganados 3 de esos 5. Ya nos pintó la cara en la primera vuelta y una vez más, el Rayo Majadahonda, pese a la euforia del resultado de hoy, no es favorito. Porque en el fútbol, como en la vida, la humildad es la principal virtud de una plantilla. Rayo Majadahonda: Lucho (3); Aldalur (3), Pelayo (3 MVP), Pinillos (3), Hector (3), Iriondo (3), Mario García (3), Javi Ros (3 MVP), Ozkoidi (2); Néstor Albiach (2) y David Rodríguez (2). Segunda parte: Alayeto (3), Jeisson (3), Rahim (3), Nando (3) y Sergio Llamas (2).

Majadahonda Magazin