MANU RAMOS. Prácticamente toda la prensa española, deportiva y generalista, recoge la inversión del futbolista Alejandro Arribas en el Rayo Majadahonda, donde se ha convertido en accionista mayoritario de su nueva Sociedad Anónima. «Por si faltaban ingredientes en esta receta, el calendario ha querido que el Rayo Majadahonda juegue este fin de semana contra el Vetusta, el filial del Oviedo. «No puedo ir a verlo porque juegan a las 12 y nosotros a las 4, es curioso e imagino que les veré en el hotel, pues vienen al mismo en el que estaremos nosotros», reconoció entre risas Arribas. No tendrá fácil decidir que equipo quiere que se lleve los puntos, aunque los objetivos de ambos conjuntos son muy diferentes. Para el segundo equipo carbayón la formación es la prioridad y para ellos el ascenso es una meta. De momento, ambos están empatados en la tabla con seis puntos».
La crónica del diario «Marca» no es la única. Jonás Pérez en el diario AS recuerda que «Gerard Piqué fue el pionero y ya tiene a otro futbolista dispuesto a seguir sus pasos. Hasta hace unos años, parecía impensable que un jugador fuera el máximo mandatario de un club, en especial si todavía estaba en activo. El central del Barcelona se abordó en la insólita aventura invirtiendo en el Andorra y ahora Alejandro Arribas ha decidido hacer lo mismo con el Rayo Majadahonda». Y no es el único: Ronaldo Nazario (Valladolid), Iniesta (Albacete), Joaquín (Betis) y hasta el ex majariego Víctor Herrero Forçada «Pulga» que ha comprado el Almazora de Castellón. O el no tan reconocido «pero más cercano caso del ex jugador carbayón Diego Cervero«, según El Comercio: «El emblema del Real Oviedo forma parte del proyecto de otro conjunto de la ciudad, el Vallobín, que este mismo año conseguía ascender de Regional Preferente a la Tercera asturiana». Los futbolistas se implican para reinvertir en el fútbol parte de lo que el fútbol les ha dado. Y los ejemplos siguen en aumento.
«En esta ocasión, hay una peculiaridad: el central tiene contrato con el Real Oviedo hasta junio de 2021 y no sería de extrañar que llegara a enfrentarse al club del que es máximo accionista. Para ello, eso sí, debería cumplirse la premisa de que el conjunto ovetense descendiera de categoría o que el Rayo Majadahonda, uno de los grandes equipos de Segunda División B, consiguiese regresar a la categoría de plata. En caso contrario, el destino podría deparar un duelo en un futuro no tan lejano, ya que Arribas todavía tiene 30 años, por lo que aún queda mucho fútbol en sus botas. A pesar de todo, el futbolista madrileño ha decidido regresar a sus orígenes de una manera diferente a la que lo hiciera de los 7 a los 19 años. Pasó toda su infancia formándose en la cantera majariega y ahora seguirá ligado al club de sus amores desde la perspectiva institucional», concluye el periodista.
Y recuerda que «Eso sí, por el momento su padre, Pedro Arribas, será el encargado de que todo siga su curso. Al menos, el central estará pendiente de todo aquello que suceda: «Ganas, trabajo e ilusión no van a faltar. Pido a la gente que tenga un poco de paciencia porque es un proyecto nuevo que acaba de empezar, con muchos jugadores nuevos, un cuerpo técnico nuevo… Las cosas se van a hacer bien porque vamos a trabajar mucho para ello. Que nos apoyen, que nos animen, sobre todo a los futbolistas cada fin de semana», declara.
