
Estos cambios obligados en los hábitos y costumbres, hizo que algunos sectores esquivaran el decrecimiento económico en esta época de recesión generalizada. Uno de ellos es el del juego de azar que siempre ha ido un paso por delante, en lo que a esa reconversión se refiere y que en ese momento dado le permitió no entrar en colapso. Los casinos online siguieron operando con cierta normalidad en España pese al bloqueo. “Es cierto que durante el confinamiento algunas medidas legislativas fueron en el sentido de limitar el tiempo de juego de cada individuo, pero con el paso del tiempo se contempló que no tuvieron mucho efecto y que el jugador que deseaba podía ponerse delante de un proveedor de servicios de esta naturaleza telemáticamente”, comentan desde Tragaperrasweb.es.
El mercado online sobrellevó más o menos de forma decente la caída de las ventas. En cambio, las compañías tradicionales de los negocios de proximidad vieron como los cierres no les permitían realizar su trabajo con normalidad, debiendo en algunos casos enfocarse hacia el cierre definitivo al prologarse esta situación durante varios meses. Seguir afrontando gastos físicos sin ningún ingreso, es algo que el muchas patas del tejido empresarial no pudieron soportar, al ser insuficientes también las medidas públicas para contrarrestar esos cierres puntuales.
Es indudable que la sociedad no volverá a ser la misma que era antes de marzo de 2020. Es cierto que se va atisbando una nueva realidad, que devolverá en unos años el ciclo económico y cotidiano a su ser, pero con una factura en el planeta que será impagable para millones de personas.



