SOFIA M. Mi vecina, enfermera de un hospital madrileño, nos ha comentado algo totalmente irresponsable que ha hecho una persona afectada por coronavirus, que está por ahí esparciendo el virus COVID19. Llega una mujer a las urgencias del Puerta de Hierro de Majadahonda, Madrid. Acude con lo que según ella es un catarro y, al sospechar de los síntomas, le hacen la prueba del Covid 19, dando positivo. Al darle la noticia, ella lo niega e insiste fervientemente en el catarro. Es importante decir que ni ella llevaba mascarilla, ni nadie de los que abarrotaban la sala de urgencias conocía su estado. Pues bien, con el diagnóstico, la mandan para casa con instrucciones de permanecer allí confinada y no extender la enfermedad. Unas horas después, una compañera de mi vecina, enfermera que trató a esa mujer, casualmente se la encuentra en el Carrefour de Majadahonda haciendo la compra. ¡A la mujer con coronavirus que debería estar encerrada en casa! Como imagináis, sin mascarilla ni nada!.


Esa enfermera, alucinada, le recrimina su actuación, a lo que la infectada le dice que si «espera que se vaya a quedar encerrada en casa…» También soltó algunas perlas en plan «ya que me lo han pegado, me da igual si se lo contagio a ellos» y otras referencias racistas. Así que esa tiparraca, con su complejo de superioridad, se ha paseado por un popular centro comercial de Madrid, y seguirá haciendo vida normal sin importarle a cuántas personas estará contagiando. Una egoísta para la que no existen normas que la limiten. Si la Comunidad de Madrid y cada vez más regiones de España se están poniendo serios e implementando estas medidas restrictivas, es para evitar la expansión. Actuad con cabeza y pensad que es como una cadena: tarde o temprano puede llegar a un eslabón débil. Mejor quédate en casa. *Sofia M. (@khaibar82) es profesora de Ciencias (Biología y Geología), licenciada geóloga, paleontóloga, adiestradora y educadora canina.

Majadahonda Magazin