MARIANA BENITO. La paciente Julia S. ha publicado este 12 de enero (2024) en El Diario.es su testimonio sobre un caso de Interrupción Voluntaria del Embarazo por malformación congénita, uno de los supuestos contemplados en la ley y solicitado en el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda. Su conclusión es que «la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid y sus hospitales públicos expulsan del sistema a las mujeres que, atendiéndose a su derecho, según la ley del aborto española, desean interrumpir su embarazo. El sistema público cubre el proceso mientras todo va bien, pero cuando el embarazo ya no va bien, expulsa a la mujer. Sorprende aún más en el caso del Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda, que presume de su certificación de la IHAN (Iniciativa para la Humanización de la Asistencia al Nacimiento y la Lactancia)«.
Tras pasar por esa experiencia, concluye que «el trámite burocrático es humillante, señalador y sobre todo innecesario (yo misma podía haber llamado para pedir cita en la clínica). En un despacho de la Consejería de Sanidad, casi escondido y sin identificar, da la sensación de que algo malo e incluso ilegal se hace ahí. La falta de información por parte de las ginecólogas y funcionarios contribuye a ahondar en el malestar emocional y, sobre todo, en el miedo de la paciente. Es algo especialmente sorprendente por parte del personal sanitario. ¿De verdad no saben cuál es el proceso? ¿Cómo es posible que no conozcan el proceso al que envían a sus pacientes? Sería de agradecer que la misma objeción de conciencia que alegan para no practicar abortos la utilizaran para no hacer pasar por esto a sus pacientes».
Julia S. recuerda que «en septiembre de 2023 estaba embarazada por segunda vez. En la ecografía de la semana 12 los médicos detectaron que algo no iba bien y que estaba gestando un bebé no sano. Con enorme tristeza y dolor, mi pareja y yo decidimos ese mismo día interrumpir el embarazo. Al día siguiente, en el mismo Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda, donde seguía mi embarazo, me hicieron una biopsia de la placenta para un estudio genético que confirmara el diagnóstico. Preguntamos a la ginecóloga por el procedimiento para solicitar la interrupción voluntaria del embarazo (IVE), pero nos informó de que ni en ese hospital ni en ninguno de la Comunidad de Madrid se practican, que todas se derivan a la sanidad privada con la que las comunidades conciertan el servicio. Pedimos entonces más información: ¿Qué clínicas son? ¿Cómo es el proceso? ¿Qué tipo de intervención es? No supo contestar a ninguna las preguntas, nos dijo que no nos preocupáramos, que todo saldría bien. ¿Igual de bien que el embarazo?, pregunto. Silencio».
«Una semana después, el estudio de genética confirma el diagnóstico y en una nueva cita en la consulta de Ginecología del Hospital Puerta de Hierro, pedimos interrumpir el embarazo. Dos ginecólogas firman el informe necesario para solicitar a la Consejería de Sanidad la IVE. Este informe es un formulario completado y firmado a mano cuya única copia se entrega al paciente y del cual el hospital no guarda copia (aunque sí queda reflejado en el historial que se ha entregado). De nuevo pedimos la misma información sobre la IVE, obteniendo la misma respuesta. Pregunto si debo agendar una cita en ginecología después para controlar que todo esté bien, puesto que querré intentar quedarme embarazada de nuevo. Me dicen que el protocolo no lo contempla. Que me acerque al centro de salud y la pida. Solamente nos facilitan el número de teléfono en el que tenemos que pedir cita», señala Julia S. Y concluye: «Llamamos desde la sala de espera del mismo hospital. Nos contestan con un simple “sí, dígame” y pregunto si estoy hablando con la oficina responsable de las solicitudes de IVE de la Consejería de Sanidad. Después de confirmar, nos dicen que nos acerquemos esa misma mañana. Solamente es necesario llevar el informe firmado y mi DNI. Nada más», finaliza el testimonio.
Queria corregir mi comentario sobre Urgencias en Puerta de Hierro del pasado día 8 de enero.
Por desgracia tuvimos que volver el día 18 de nuevo.
Si el día 8, CCOO boicoteo un cultivo de orina, el dia 18, » perdieron » un análisis de sangre, que tuvieron que repetir.
Fui a poner una reclamación en Atención al Paciente y ni atendían ni tenían documentos a disposición del ciudadano para poder reclamar.
Una verguenza.CCOO son una banda de h de p####.
Les deseo, los maldigo que sus familiares tengan que pasar por los hospitales, h.p ¡¡¡¡¡¡
No es mi experiencia. He pasado muchas veces por Atención al paciente y siempre he sido bien atendida y desde luego al menos los formularios tanto de quejas como de felicitación nunca han faltado.