JUAN GONZALEZ. Soy vecino de una de las viviendas de alquiler de la empresa de patrimonio municipal de Majadahonda (PAMMASA). Quería expresar el malestar que se respira entre varios vecinos de estas viviendas debido a la actuación del Ayuntamiento durante los meses del estado de alarma debido al COVID-19. Muchos vecinos y vecinas son personas con empleos bastante humildes con los que rozan el salario mínimo interprofesional, con contratos temporales y en algunos casos ni siquiera tienen contrato. En el peor de los casos hay personas que incluso no tenían trabajo antes de la situación de alarma. En estas condiciones y en ocasiones arrastrando deudas tienen que mantener a sus familias. Como se puede imaginar esta situación se ha agravado con la pandemia y sus consecuencias laborales y económicas.


Ante esta situación, el Ayuntamiento hace un comunicado a finales de marzo anunciando que se suspenderán los recibos del mes de abril. Todo ello se publica entre otros medios en la revista municipal como una «medida ejemplar«. En ese momento se comenta entre los vecinos como una medida de ayuda en un buen gesto por parte del Ayuntamiento que es acogido con agradecimiento. A finales de abril hacen un comunicado anunciando la posibilidad de solicitar una moratoria del pago de los tres siguientes meses siempre y cuando se demuestre que se está afectado por una situación de ERTE o se tiene incapacidad para pagar el alquiler debido a la situación económica. En dicho comunicado se explica que los pagos serán aplazados y se repartirán en futuras cuotas hasta que se paguen todos los meses a los que afectan esta situación contando desde el mes de abril. En uno de los puntos de las bases para solicitar dicha ayuda se informa de que el mes de abril será abonado junto con el mes de julio para el resto de vecinos. Mes en el que por cierto también ha elegido el Ayuntamiento para pasar el impuesto de vehículos de Majadahonda tras haber sido aplazado.

El malestar viene dado debido a que la suspensión del mes de abril ha sido un aplazamiento de la cuota y no una suspensión definitiva de dicho pago. El aplazamiento puede ser una ayuda para estos días pero para los próximos meses se puede convertir en una deuda cada vez más grande ya que parece inevitable escapar de la crisis económica que se nos avecina. Esto ha molestado a los vecinos que de un Ayuntamiento que presume de superávit, que va a ahorrase muchos gastos de eventos programados en los presupuestos y que no se van a celebrar. Además en los últimos meses ha habido una subida fija en las cuotas debido a gastos de comunidad y lo cierto es que los portales y zonas comunes están sucias, con pintadas y muy descuidadas. Al igual que muchos propietarios que han podido permitírselo han sido comprensivos con sus inquilinos perdonándoles el pago de su alquiler de vivienda o negocio, se podría considerar una medida de ayuda más eficaz para superar esta situación. Señor alcalde, la próxima vez que visite la oficina de PAMMASA le invitamos a que visite los portales de al lado o de los edificios de enfrente y hable con algunos vecinos. Le aseguro que lo va a comprobar con sus propios ojos.

Majadahonda Magazin