
Así, los agentes de la Guardia Civil lograron localizar un vehículo el cual estaba estacionado en una calle de Majadahonda, estableciéndose vigilancias sobre el mismo. El automóvil había sido sustraído en Madrid pero en el momento de localizarlo portaba placas de matrícula dobladas, correspondiente con un vehículo de similares características. Estas vigilancias daban sus frutos y así se identificó una parte del grupo delictivo, que a la postre permitió identificar y localizar a todos los integrantes el entramado.
UNA VIVIENDA EN ALCORCÓN COMO CENTRO DE OPERACIONES. Los ahora detenidos contaban con un piso en un céntrico barrio de Alcorcón, lugar donde celebraban sus reuniones antes de cometer los robos y se repartían las tareas. Para cometer los robos, previamente habían robado un vehículo de alta gama el cual estacionaban en calles de localidades fuera de su lugar habitual de residencia. Este coche era dotado de placas falsas para evitar que fuera detectado por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. El grupo contaba con cuatro individuos expertos en robos con fuerza, un integrante estaba especializado en el uso de lanzas térmicas y una mujer, hermana de uno de los principales encausados, era la encargada junto a otro integrante de realizar las labores de vigilancia y traslado hasta el lugar del robo. Los ya detenidos tenían una «gran pericia» a la hora de cometer los robos, los cuales perpetraban en escasos cinco minutos, su objetivo principal eran las cajas fuertes, las cuales eran arrancadas y abiertas en una zona de campo donde tras hacerse con el dinero, las abandonaban. Los detenidos, siete españoles con edades comprendidas entre los 20 y los 40 años, algunos de ellos expertos aluniceros, han pasado a disposición judicial, que decretó el ingreso en prisión de los dos líderes del grupo, dos varones de 29 y 31 años edad.




Pues fenomenal, enhorabuena ¡¡
Un arduo trabajo y buen final,compañeros.
¡VIVA LA GUARDIA CIVIL!
Ese es su trabajo coger a los malos, y no hacer informes falsos contra el Gobierno