Vanessa Von Zitzewitz, la fotógrafa de Corinna y su nueva pareja: Juan Villalonga

MANU RAMOS. “A mi él (el Rey) no me conocía de nada, me conocía de dos reuniones, y cuando voy a comer con él me dice: «Es que estoy así, me tiene (Corinna) atado completamente”, relató el empresario. También habla ahí sobre el supuesto terreno en Marruecos que el monarca español entregó a Corinna: “Sí, claro, es que el terreno ese se lo ha quedado ella, el de Marrakech”. A muchos les ha sorprendido esta vinculación entre Corinna Larsen y Juan Villalonga. El nexo de unión entre ambos es la tercera esposa del empresario español, la fotógrafa germana Vanessa Von Zitzewitz muy introducida, al igual que la ‘entrañable’ del Emérito, en los ambientes cataríes. Pero, ¿Quién es realmente Juan Villalonga?

José María Aznar y Juan Villalonga

El periodista Juan Luis Galiacho publica en El Cierre Digital como se produjo el matrimonio de Villalonga con la viuda de Azcárraga: «En enero de 1998 la relación de pareja entre Adriana Abascal y Juan comenzó a formalizarse. En aquellas fechas, la ya viuda de Emilio Azcárraga se desplazó a Madrid en uno de sus muchos viajes que hacía para desaparecer de la escena pública mexicana mientras se deshacían las especulaciones sobre que porción de la multimillonaria herencia le correspondería. En la capital de España se hospedó en el hotel Miguel Ángel. Un problema con sus tarjetas de pago hizo que llamara a Pedro Pérez. El ejecutivo acudió a recogerla y, conocedor de la fascinación que su jefe sentía por esta mujer, organizó esa misma noche una cena para ellos en un conocido restaurante de Majadahonda».

Adriana Abascal y Juan Villalonga

Y añade: «Desde ese instante, Juan Villalonga y Adriana Abascal se convirtieron en una pareja inseparable. Primero mantuvieron una relación discreta y silenciosa, que no duró mucho ya que pronto rompieron los protocolos establecidos. Tanto que “la viuda” de Azcárraga empezó a hacerse presente en todos los actos privados y públicos a los que Juan Villalonga asistía por entonces. Dicen que Adriana llegó a estar presente en las reuniones de Telefónica. Incluso, se sentó en la primera fila del auditorio madrileño donde se celebró la Junta General de Accionistas de Telefónica, acompañada de su madre, Nieves López Cisneros, con la que le unía una relación de confidencialidad».

Juan Villalonga y Concha Tallada

El presidente de Telefónica cambió su vida por esta mujer: «Así decidió abandonar su residencia, tras contarle a su mujer, Concha Tallada Alarcón, que su relación amorosa se había roto definitivamente después de más de 20 años inseparablemente juntos. Como también se lo contó a sus íntimos amigos, los Aznar, con los que salían de paseo cuando eran novios. Fue en las Navidades de 1999 cuando Villalonga dejó en la estación de esquí de Baqueira a Concha Tallada, a sus tres hijos mayores y al matrimonio Aznar para volar a Miami para pasar la nochevieja con Adriana Abascal. Esta infidelidad matrimonial nunca se la perdonaron, sobre todo, Ana Botella, que tomó partido claro por su amiga Concha (por eso Juan, a pesar de ser el padrino de Alonso, el hijo menor de los Aznar, no fue invitado a la boda de Anita Aznar). Villalonga comenzó a pasar más tiempo en Miami que en Madrid, lo que no gustaba en absoluto a los dirigentes de Telefónica que despachaban con él por video-conferencia», concluye.

 

Majadahonda Magazin