SONIA BLUE. Una vecina de Majadahonda ha denunciado a la Guardia Civil que su casa ha sido desvalijada «entera» tras las vacaciones de Semana Santa, lo que ha provocado la «frustración, susto y cabreo» en los afectados. La víctima, Marina Moreira Ausín, denunció el robo el pasado 23 de abril (2019) y lo trasladó en un foro de Majadahonda de redes sociales, donde encontró el apoyo de numerosos vecinos, así como de otras víctimas: «Ayer cuando llegamos de vacaciones de Semana Santa, nos encontramos la puerta de casa abierta, ¡nos han desvalijado la casa entera! no es posible que te vayas unos días fuera y esta gentuza actúe a sus anchas! ¡Majadahonda necesita más seguridad!«, exclamó la afectada, que proporcionó algunos datos del delito para alertar a sus vecinos del barrio: «zona de Doctor Marañón, a la altura de la farmacia San Roque». Marina Moreira quiso expresar su enfado «como vecina de este municipio que tanto me gusta» porque «después de 31 años viviendo aquí, una impotencia saber que han estado hurgando en tus pertenencias y cosas privadas y el daño que hacen al llevarse cosas con mucho valor sentimental». Y concluyó su relato con una dolorida onomatopeya: «¡arggggggggggg, muerdo!». También señaló que «es lamentable que vivamos atemorizados en Majadahonda porque nosotros ya no estamos tranquilos. Reitero que es necesaria más seguridad en nuestra ciudad. No hay derecho, es una impotencia que no deseo a nadie«.


Carmen González-Páramo expresó públicamente su solidaridad a la víctima con fraternales palabras y anunció una acción: «lo siento Marina, que fuerte. ¡Mañana me paso por la sede de PP y voy a hablar de este tema muy en serio o mi voto lo cambio ya! Es una vergüenza que solo haya dos patrullas, alucino. Y hay una millonada de superávit en Majadahonda. Que lo utilicen bien y nos irá mejor a los ciudadanos, que para eso pagamos». María Castro Lorente también expuso su caso: «Yo me fui un fin de semana y cuando volví el domingo estaba la casa patas arriba, lo curioso es que nadie se diese cuenta de nada porque ruido tuvieron que hacer, y en mi caso fue un fin de semana porque bauticé a mi hijo, con lo cual siempre sospeché que alguien lo sabía y ¡zasca! Es lamentable». Draco MacLeod también confesó que «a nosotros nos entraron mientras dormíamos, a eso de las 2 am. Nos gasearon de paso, nos dijo la Guardia Civil. Lo gracioso es que abrieron cajones muy específicos y otros no. En mi habitación no entraron porque echo pestillo, pero lo intentaron. A los dos meses supimos que uno de ellos era el marido de una chica que había trabajado limpiando en casa y la echamos por robar«.

Majadahonda Magazin