JULIA BACHILLER. El acto de homenaje a Alfredo Pérez Rubalcaba en el Parque Delta de Majadahonda tuvo lugar este viernes 5 de noviembre de 2021. Un pequeño monolito cubierto con la bandera de España aguardaba a los asistentes, enseña que fue retirada por su viuda y el alcalde de Majadahonda, desvelando así una placa con la siguiente inscripción: “En memoria de Alfredo Pérez Rubalcaba. Político y vecino de Majadahonda (1951-2019)”. El lugar elegido para su ubicación es muy acorde con la personalidad de este ilustre vecino, como así pudo deducirse tras escuchar las intervenciones de su viuda Pilar Goya, de su amigo Joaquín Plumet, catedrático de la Universidad Complutense, e incluso del alcalde de Majadahonda José Luis Álvarez Ustarroz. Para la que fue su esposa, el lugar “le emocionaría, que un parque tan lleno de vida y tan bonito como este a partir de ahora lleve su nombre”, e incluso reconoció “vinimos a vivir a Majadahonda en el año 1979, hace ya más de 40 años, esta ha sido la única casa que hemos tenido, donde fuimos inmensamente felices”, y agradeció este reconocimiento “por parte de los que fueron sus vecinos, prácticamente durante toda su vida”.
Su compañero y amigo, el catedrático Joaquín Plumet, tras una amplia exposición biográfica de los logros políticos y profesionales del homenajeado con los que sorprendió a los asistentes, dio paso seguidamente a mencionar el vínculo que Rubalcaba mantenía con este municipio: “Le gustaba mucho empaparse de nuestro pueblo”. Detalló por ello algunos de los lugares que solía frecuentar: “los sábados a “Orgaz”, los domingos su aperitivo en la “Abadía” y su restaurante “Mira Madrid”. Y un deseo que no llegó a hacerse realidad: “Intentó ser concejal de este pueblo”. Para finalizar aseguró que entre la menciones honoríficas o condecoraciones de las cuales el ex vicepresidente socialista se sentiría más orgulloso hoy serían “la calle dedicada en Solares, su pueblo natal, el título de Hijo Predilecto de Cantabria, el aula magna de la Facultad de Ciencias Químicas, el aula magna de la Facultad de Química de la Universidad de Castilla la Mancha que llevan su nombre y la cuarta que hoy se le dedica”.
Por su parte, el alcalde de Majadahonda comenzó reconociendo que la ciudad era deudora «de un merecido homenaje a uno de nuestros vecinos más ilustres y una de las personalidades más relevantes de la reciente historia de España”. Tras lo cual, mencionó sus ideas antagónicas con el homenajeado, lo que no le supuso un impedimento para añadir: “Nunca me atreví a acercarme a hablar con él por la diferencia de nuestras ideas, hoy lo lamento, hubiera sido muy enriquecedor para ambos, sobre todo para mí”. A lo que añadió: “Hay ocasiones en las que todos tenemos que apartarnos de nuestros intereses partidistas, los colores, las siglas, y hoy precisamente es una de ellas. Hoy reconocemos a la persona, al político que llegó a ser vicepresidente del gobierno de España, y a un -porqué no decirlo- socialista de “bien”. No dudó en congratularse a la hora de reconocer algo: “compartimos algo muy importante, ambos elegimos la mejor ciudad para vivir que es esta, Majadahonda”. Hizo una descripción de sus méritos así: “Un hombre que trabajó para España, un político reconocido por sus adversarios y un majariego querido por muchos de sus vecinos”. Y finalizó asegurando que «desde hoy este parque mantendrá vivo su recuerdo y quien sabe si en sus bancos tendremos vecinos leyendo, reflexionando, o por que no, hablando sobre política”.
OPINION. Majadahonda homenajeó por fin a un hombre ilustre como fue Alfredo Pérez Rubalcaba y cabe destacar la organización del acto, que estuvo muy acertada en todo momento. Contó con la presencia de unos extraordinarios músicos, los cuales interpretaron el himno nacional al comienzo y cerraron con la conocida banda sonora de la película “La vida es bella”, otorgando un emotivo toque melódico al acto. En cuanto a la asistencia, numerosos vecinos acudieron al acto. En el ámbito político evitaremos mencionar las ausencias, tan solo decir que estuvieron presentes los políticos de la corporación municipal a los que sus diferentes ideologías no fueron impedimento para reconocer la valía personal de un reconocido vecino de Majadahonda, dejando a un lado llegar a juzgarle por sus decisiones tomadas durante su carrera política. Puede decirse que Alfredo Pérez Rubalcaba ha conseguido reunir tres ideologías políticas en un mismo lugar, haciendo aflorar el respeto y saber estar entre todos ellos… aunque luego lo pierdan en los Plenos, que es el lugar indicado. Tan solo finalizar con la esperanza de que los “bárbaros ignorantes” respeten este monolito, al igual que el resto de inmuebles del municipio que por desgracia sufren el maltrato de estos indeseables.
Lastima que no fuera el amigo Villarejo