MANU RAMOS. «Lo que no habrá este año en el municipio madrileño es el Concurso de Pesebres que, desde hacía 4 años, fomentaba el Ayuntamiento. El nuevo Gobierno de mayoría absoluta del PP ha terminado con esta iniciativa, apenas 1 año después de que el belenismo haya sido declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de España, por medio del Real Decreto 481/2022. La jefa de montajes, Nuria Ortiz, reconoce: “Nos ha dado bastante pena porque participan 70 vecinos y repartíamos 200 pesebres miniatura recortables”. La noticia, que no había transcendido hasta ahora, ha sido publicada este 11 de diciembre (2023) por el diario El País, que añade que «los pesebristas afirman que el nuevo belén alcanzará las 300 figuras que tenía el original, aunque hay un detalle que deben disimular. Las donaciones provienen de belenes domésticos, de pequeñas dimensiones, en comparación a las colosales edificaciones del belén municipal que sobrevivieron al fuego. “El reto es que las casas son muy grandes para las figuras, que deberían ser de 24 centímetros, pero son de 17″, afirma Nuria, que ya contempla un plan para jugar con la perspectiva: ”Las casas más grandes las voy a poner en primer plano y las figuras más pequeñas, atrás“. Una voluntaria que trabajan en el pesebre se lamenta: “Llevábamos trabajando un año entero para el otro belén y ahora vamos a toda mecha. A lo mejor no queda tan bien como estaba antes, pero la noticia es que Majadahonda tendrá belén”.

Varios miembros de la Escuela de Belenismo de Majadahonda habían sugerido al concejal de Festejos, Ignacio Silván (PP), cuyo partido gobierna con mayoría absoluta, una tradicional inauguración del Belén como otros años, pero según fuentes de esta escuela el Equipo de Gobierno se plantea un acto «político-mediático«, con la presencia de otros alcaldes del PP en la zona Oeste de Madrid y con gran repercusión mediática, dado el interés que este suceso ha despertado en los medios de comunicación. Los belenistas, sin embargo, hubieran preferido algo más modesto y discreto y algo de ello transluce en el reportaje que les ha dedicado el diario El País: «El trabajo detrás de un pesebre de estas dimensiones comienza a partir de febrero, relata José Antonio Ortiz, presidente de la Escuela de Belenismo de Majadahonda: “Empezamos con la planificación de a quién se dedica el belén. Este año, por ejemplo, figurará San Francisco de Asís. Después identificamos qué elementos necesitamos crear y cuáles figuras comprar”. Las figuras se hacen principalmente en barro, los espacios se recrean con poliestireno, canastas de fruta, arena y con el característico corcho bornizo madrileño para simular la topografía desértica de Oriente Próximo. La parte más difícil es el río. “Como se filtre el agua estás perdido”, advierte José Antonio, mientras muestra los cables de electricidad que atraviesan el belén. La nueva composición tendrá, además de afluente, una cascada, gracias a un motor que impulsa el agua hasta la parte más alta del montaje», concluye el reportaje.