Letra Ñ: «Mi mensaje a los hablantes del español es que valoren y celebren la riqueza de su lengua, que no vean en mí solo una letra, sino un puente hacia una rica herencia cultural. Animo a todos a explorar la profundidad y la belleza del español, a utilizarlo con orgullo y a transmitir su valor a las futuras generaciones. La lengua es un reflejo vivo de la cultura y la identidad, y cada palabra, cada letra cuenta una historia única. En resumen: estoy muy orgullosa de ser como soy, de cómo distingo a las gentes que me quieren, utilizan y, ademas, porque soy tan española que hasta llevo peineta»

MIGUEL SANCHIZ. (2 de junio de 2024). La letra Ñ, joya lingüística que engalana el abecedario español, merece ser ensalzada en todo su esplendor. Con su forma curvilínea y su pronunciación distintiva, la Ñ se erige como un emblema de la riqueza cultural y la singularidad del idioma español. Esta letra, que surgió de la fusión de las letras «n» e «y» en la Edad Media, encarna la fusión de culturas y la evolución orgánica del lenguaje. Es un símbolo de la herencia hispánica y su vasto legado en el mundo. La Ñ nos transporta a tierras lejanas y nos conecta con una historia de conquistas, intercambios culturales y mestizaje. La Ñ posee una sonoridad única que resuena con melodía propia en los oídos de quienes aman el español. Su presencia en palabras como «niño», «mañana» o «señor» añade un toque de encanto y distinción que no podría ser replicado de igual manera con otras letras.


La Entrevista Imposible de Miguel Sanchiz

Además, la Ñ es más que una simple letra: es un símbolo de identidad para millones de hablantes de español en todo el mundo. Representa la diversidad y la unidad de una comunidad global unida por el idioma. Desde las calles de Madrid hasta los pueblos remotos de América Latina, la Ñ es un vínculo que une a personas de diferentes orígenes y experiencias en una sola lengua compartida.»Estoy en más de 15.700 palabras y de ellas, 350 , se inician conmigo», declara en esta entrevista. En el ámbito cultural, la Ñ ha dejado una huella indeleble. Desde la poesía de Federico Garcia Lorca hasta las novelas de Gabriel García Márquez, la Ñ ha sido una musa inspiradora para innumerables escritores y artistas. Su presencia en la literatura y el arte es un testimonio de su poder para evocar emociones y despertar la imaginación. En resumen, la letra Ñ es mucho más que un mero signo en el alfabeto: es un símbolo de la riqueza lingüística, la diversidad cultural y la unidad de la comunidad hispanohablante. Con su elegancia y su historia, la Ñ perdurará como una de las letras más queridas y admiradas del español, trascendiendo fronteras y generaciones.

¿Cómo y cuándo naciste en el contexto de la lengua española? –Fue en el entorno de la Edad Media y con la escritura establecida firmemente en pergaminos, donde nací como una evolución lingüística. Los escribanos buscaban formas de optimizar el espacio y la eficiencia en la escritura. Al enfrentar el reto de representar sonidos específicos del español que no estaban presentes en el latín, como el sonido de la doble ‘n’, desarrollaron el característico tilde sobre la ‘n’, creando así la «Ñ». Este cambio no solo respondió a necesidades prácticas sino que también reflejó la evolución del idioma español, marcando una distinción clara con otras lenguas romances y consolidando mi lugar en el alfabeto y en la identidad cultural hispana. Me quedé en España con esta forma tan bonita, con una virgulilla en la cabeza. Mis hermanas portuguesas , quedaron en NH (Espanha), las francesas e italianas con GN (Espagna)y las catalanas con NY (Espanya). La verdad es que los monjes hispanos consiguieron ahorrar tiempo y letras, mientras los otros siguieron con las dos de siempre. Aparecí por primera vez en 1295, en la obra anónima ‘La gran conquista’. La verdad es que para mi, fue una gran conquista. Me he extendido un poco ¿verdad?.


La Ñ, un clásico: «Los manuscritos medievales conservados en bibliotecas y archivos de todo el mundo testimonian la efectividad del pergamino como medio de preservación del conocimiento a través de los siglos».

No, lo has hecho muy bien ¿Cuál fue la reacción inicial a tu aparición en el idioma español? –Inicialmente mi incorporación al alfabeto español no causó revuelo, ya que fue un cambio técnico implementado gradualmente por los escribanos para reflejar fielmente la fonética del idioma. Sin embargo, con el tiempo, la «Ñ» fue aceptada y valorada por su funcionalidad y su estética, consolidándose como un distintivo del idioma que ayudaba a preservar la riqueza fonética del español, además de diferenciarlo de otras lenguas romances ¿Cómo fue tu incorporación en la tecnología y los teclados modernos? –En 1991, una auténtica guerra cultural estalló cuando la Comunidad Económica Europea (CEE) impulsó de forma imprudente el proyecto de algunos fabricantes de ordenadores, que pretendían comercializar teclados sin Ñ. Querían acabar conmigo. Hasta ese momento, existía una reglamentación que impedía comercializar en España productos informáticos que no tuvieran en cuenta «todas las características del sistema gráfico del español». La UE estimó que esa disposición equivalía a una medida proteccionista que violaba el principio de libre circulación de mercancías. Como era previsible, la primera en reaccionar fue la Real Academia Española (RAE). La desaparición de la Ñ de los teclados, proclamó en un informe divulgado en 1991 que eso representaría «un atentado grave contra la lengua oficial». En todo caso, para consolidar la protección de la letra, el gobierno español respondió en 1993 con una ley que salvaba a la Ñ, acogiéndose al Tratado de Maastricht, siendo ya la Unión Europea (UE), que admite excepciones de carácter cultural. Y fue así, como me incorporé a los teclados. Me había hecho internacional.

«Mi presencia en el teclado es más que una cuestión tecnológica, es un símbolo de identidad y diversidad lingüística»

¿Cómo fué tu presencia en los teclados? –Mi presencia en el teclado es más que una cuestión tecnológica, es un símbolo de identidad y diversidad lingüística. En términos de identidad cultural, ¿Cuál dirías que es tu papel dentro de la comunidad hispanohablante? –Mi papel trasciende el de una simple letra; soy un emblema de identidad para los hispanohablantes. Simbolizo la diversidad y la riqueza de la lengua española y su capacidad de adaptarse y evolucionar mientras mantiene su esencia. En contextos culturales, políticos y sociales, represento una conexión profunda con la herencia y la historia, siendo a menudo utilizada en movimientos de reafirmación cultural y lingüística, como se ha visto en campañas para promover el español frente a la dominancia del inglés. ¿Qué palabras son emblemáticas en el uso de la «Ñ»? –Algunas palabras que son particularmente emblemáticas incluyen ‘niño’, que evoca la inocencia y la juventud; ‘señor’, un término de respeto; ‘mañana’, que refleja una promesa de futuro, y ‘sueño’, que conecta con la imaginación y los deseos más profundos del ser. Estas palabras no solo son frecuentes en el uso diario, sino que culturalmente cargan significados que son centrales en la vida hispanohablante. El español es generoso en sus expresiones: buenos días, buenas noches. Los otros idiomas no son tan generosos. Pero esa es otra historia.

«Estoy preparada para adaptarme a nuevas influencias y cambios tecnológicos que puedan surgir»

¿Cómo ha influenciado la globalización tu uso y reconocimiento? –La globalización ha ampliado significativamente mi presencia y reconocimiento. A medida que el español se ha expandido y se ha establecido en diferentes continentes, la necesidad de representar fielmente sus sonidos particulares en la tecnología y la comunicación global se ha vuelto esencial. Esto ha llevado a una mayor inclusión en plataformas digitales y a un reconocimiento de mi valor lingüístico y cultural. No olvides que somos 500 millones hablando un mismo idioma. Somos el segundo después de mandarín y junto al inglés. ¿Qué retos enfrentas en la era digital? –En la era digital, enfrento desafíos como la representación consistente y correcta en todos los sistemas y plataformas digitales. Aunque los avances en la codificación de caracteres, como Unicode, han facilitado mi inclusión, todavía existen inconsistencias en la accesibilidad y en la forma en que soy representada en diferentes dispositivos y software. La lucha continua es asegurar que los hablantes de español puedan comunicarse sin barreras en el entorno digital. ¿Cómo te ves evolucionando en el futuro del español? –Visualizo mi rol en el futuro del español como estable pero adaptativo. Aunque las dinámicas del idioma pueden cambiar, la base que proporciono en términos de fonética y léxico probablemente se mantendrá constante. No obstante, estoy preparada para adaptarme a nuevas influencias y cambios tecnológicos que puedan surgir, asegurando que continúe siendo relevante y útil para los hablantes de español en todo el mundo.

«Mi mensaje a los hablantes del español es que valoren y celebren la riqueza de su lengua, que no vean en mí solo una letra, sino un puente hacia una rica herencia cultural»

¿Qué piensas de la creación de nuevas letras o símbolos en los idiomas? –La evolución del lenguaje es un reflejo natural de los cambios en la sociedad. Aunque soy un símbolo de tradición, reconozco y apoyo la creación de nuevas letras o símbolos que puedan responder a las necesidades emergentes de los hablantes. Esto demuestra la flexibilidad y la capacidad de adaptación del lenguaje, crucial para su supervivencia y relevancia. ¿Qué mensaje te gustaría enviar a los hablantes de español? –Mi mensaje a los hablantes del español es que valoren y celebren la riqueza de su lengua, que no vean en mí solo una letra, sino un puente hacia una rica herencia cultural. Animo a todos a explorar la profundidad y la belleza del español, a utilizarlo con orgullo y a transmitir su valor a las futuras generaciones. La lengua es un reflejo vivo de la cultura y la identidad, y cada palabra, cada letra cuenta una historia única. En resumen: estoy muy orgullosa de ser como soy, de cómo distingo a las gentes que me quieren, utilizan y, ademas, porque soy tan española que hasta llevo peineta. AUTOBIOGRAFÍA: «La historia de mi nacimiento como letra está profundamente entrelazada con la evolución de los soportes de escritura a lo largo de los siglos. Comenzando con el papiro, uno de los primeros materiales utilizados para la escritura, observamos una evolución significativa en la búsqueda de soportes más duraderos y resistentes al paso del tiempo. El papiro, extraído de la planta del mismo nombre que crece abundantemente en las regiones del Nilo en Egipto, fue un avance significativo en su momento, permitiendo a las civilizaciones antiguas documentar y preservar información de manera más eficaz que en tablillas de arcilla o piedra».

«Sin embargo, el papiro tenía sus limitaciones, especialmente su susceptibilidad al deterioro en climas húmedos o extremadamente secos, lo que llevó a la búsqueda de alternativas más duraderas. En este contexto, el pergamino emergió como una solución superior. Originario de Pérgamo, una ciudad en la actual Turquía, el pergamino se fabricaba principalmente a partir de la piel de animales como ovejas, cabras o terneros. Este material no solo ofrecía una superficie más lisa y blanca para la escritura, sino que también era significativamente más resistente a las condiciones ambientales adversas, lo que marcó un punto de inflexión en la historia de la escritura y la conservación del conocimiento. Los pergaminos, gracias a sus propiedades duraderas, se convirtieron en el soporte preferido para la escritura en la Edad Media, especialmente para documentos importantes y textos religiosos que requerían una conservación a largo plazo. La robustez del pergamino permitió que muchos de estos documentos sobrevivieran hasta nuestros días en condiciones sorprendentemente buenas. Los manuscritos medievales conservados en bibliotecas y archivos de todo el mundo testimonian la efectividad del pergamino como medio de preservación del conocimiento a través de los siglos».

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