MANU RAMOS. «Ha debido de poner multas a medio Majadahonda… No es un radar, es un atracador«. Vecinos y trabajadores próximos a la zona del Plantío, en su Avenida de la Victoria –perteneciente al distrito de Moncloa-Aravaca-, denuncian que, de la noche a la mañana y «sin avisar», están siendo sancionados por circular a más de 30 km/h. «Toda la vida se ha ido a 50 km/h... Además, no hay ninguna señal que indique cambio alguno», cuenta Juan Miguel, joven de 26 años, a quien le llegaron 3 multas seguidas. El punto exacto, atendiendo a las denuncias recibidas, se ubicaba en las proximidades del número 35 de la citada avenida. Este afectado sospecha que el autor fue un coche de la Policía Municipal de Madrid camuflado, que «se puso las botas» entre la última semana de octubre y la primera de noviembre (2023). «A mí me cazaron lunes, martes y jueves… Y porque el miércoles 1 era festivo y no trabajé. Me acribilló. Hay un afán recaudatorio», valora Juan Miguel, quien agrega que a su padre también le cayeron otras 2 «recetas», así como a multitud de amigos y conocidos.
El periodista Daniel Somolinos, del diario El Mundo, ha recabado numerosos testimonios que revelan el enorme enfado de los vecinos y conductores afectados, dada la ausencia de señalización: «Algunos de ellos, como Juan Miguel, llegaron a recibir 3 multas en 4 días. A raíz de la publicación, han salido nuevos usuarios que denunciaban algo parecido en otros puntos de la capital. «Nos sucedió lo mismo a muchos vecinos de la calle Gabriela Mistral, entre los números 16 y 18, en septiembre. Se creó un grupo de WhatsApp con afectados, y ya hay más de 270 integrantes… A algunos les llegaron 8 multas, aunque a la mayoría recibimos entre 2 y 3 por ir a más de 30 km/h», contaba a este diario Eduardo. Y remataba: «Se pusieron las botas durante una semana usando el mismo argumento, ‘denuncia de algunos vecinos sobre la velocidad de algunos coches’…Fue una campaña de recaudación».
El hecho real es que las explicaciones de los Ayuntamientos de Madrid y Majadahonda «no convencen a muchos de los damnificados», asegura el diario El Mundo: «como Borja, quien argumenta que «se ponen a controlar la velocidad en una zona en la que casi no hay accidentes. Y, sin embargo, en las carreteras secundarias, donde hay muchos más, no les interesa ponerlos. Así es la cosa…». Entre muchos de los multados se empezó a correr la voz, lo que ha generado dos situaciones: la primera, se ha extendido un escrito, a modo de recurso, para presentarlo con el objetivo de que la multa sea anulada. Algunos, según ha podido saber este diario, lo han conseguido. Pero, igual de rápido, también se ha extendido el miedo. Lo que se traduce en «atascos», en una avenida ya de por sí propensa a la carga de vehículos, con multitud de semáforos. «Esta tarde, la Avenida de la Victoria estaba paralizada… Creo que el afán es recaudatorio» expone Paloma, otra «víctima» como Francisco y Juan Miguel con cuyos testimonios finaliza el artículo.
Hay que ver la empatía de PP con sus votantes, en Majadahonda sobre el 80%. Le vamos a tener que mandar al guano.