El portavoz de Vox borró los juegos de mesa de su curriculum: ahora da amplias explicaciones de su vinculación con ese sector donde antes trabajaba

J. FEDERICO MTNEZ. El pasado 4 de julio MJD Magazin hacía balance del primer año de Gobierno de Vox en el Ayuntamiento de Majadahonda con un análisis sobre sus 3 concejales y 1 asesor, al igual que hicimos con su socio de Gobierno (PP). Para ello se consulto con la Oposición, las Asociaciones Civiles de Majadahonda y el sector crítico de Vox, que se habían fijado en 8 acusaciones muy concretas: 1- la polémica lista de invitados de sus «Lecturas en Familia», que comenzó con el ex terrorista del GRAPO «arrepentido» Pío Moa. 2- su subida de sueldos y subvenciones a su propio grupo. 3- la introducción de asesores políticos «a dedo» como cargos públicos. 4- el incumplimiento de sus promesas electorales a las asociaciones civiles de Majadahonda. 5- el anuncio de subvenciones (que antes detestaban) a ONGs de militantes de su partido. 6- la acusación de que el portavoz ha estado 1 año sin trabajar y cobrando cuando su Concejalía no tenía presupuesto. 7- Crear con fondos públicos y subvenciones una «lista» de restaurantes afines en Majadahonda que sigan las directrices políticas de Vox, previamente «visitados» por sus concejales y cargos públicos. Por último, 8- presunto conflicto de intereses del propio portavoz con la promoción con fondos municipales del sector de juegos de mesa en el que antes trabajaba, borrando su paso por el sector en su curriculum oficial.


J. Federico Mtnez

Casi un mes después, este 27 de julio (a tres días del pleno municipal donde probablemente se iba a suscitar este asunto), el portavoz de Vox, José Rodríguez, que había guardado un extraño mutismo sobre estas graves imputaciones, ha decidido contestar a la última de ellas, aunque aún no se ha pronunciado sobre los otros 7 cargos. Y lo ha hecho en términos muy concluyentes, que reproducimos en su integridad. Agradecemos además su sincera defensa de la libertad de prensa, que valoramos y aplaudimos, pero negamos la equiparación que hace entre «difamación» y «crítica» cuando a él le afecta (y no cuando él la ejerce). Y le recordamos que realmente no es el mensajero quien formuló las acusaciones (este periódico no ha emitido aún su propia opinión y balance de ningún partido o concejal, que se reserva para momentos más oportunos) sino la Oposición, las Asociaciones Civiles con las que los concejales se entrevistaron en campaña electoral y que además las han hecho públicas, y el sector crítico de Vox, que incluso ha llegado a pedir su dimisión del cargo de portavoz en una Asamblea.


J. Rodríguez

LA RESPUESTA DEL CONCEJAL DE VOX AL «CONFLICTO DE INTERESES»: José Rodríguez (Vox): «La libertad de prensa es una cuestión indiscutible en una democracia avanzada. Y son necesarios periodistas críticos para controlar al gobierno, tanto si es nacional como municipal, pero tienen dos limites: uno, las leyes y otro, las difamaciones. Y ante estas últimas me siento en la obligación de explicar mi relación con los juegos de mesa. En el año 2008, cuando trabajaba de consultor bancario, creé una editorial junto a un amigo y nunca cobré de ella. Era simplemente un hobby y una ilusión, nada más. La empresa se cerró en el 2017 y no queda ningún juego a la venta de aquellos que se imprimieron. Pero la experiencia que acumulé la puse a trabajar para crear la primera Feria de Juegos de Mesa de Majadahonda. Los juegos de mesa están muy extendidos como pueden ver ahora en las piscinas. Y yo defiendo los juegos de mesa, sí. De hecho me podrían decir que soy un «friqui» de los juegos y no lo vería como ningún insulto. Con los juegos los niños aprenden a perder, aprenden a negociar, y también aprenden a planificar. Se pasa tiempo juntos en familia, y por tanto la familia estará más unida. Y por último es un ocio alternativo frente a las pantallas que tanto tienen. ¿Se imaginan que Rafael Nadal fuera ministro de deportes de España y le acusaran de fomentar el tenis en nuestro país? Pues yo defiendo los juegos de mesa dentro del eje de unidad familiar y ocio que tenemos en la Concejalía de Infancia y Familia. Porque una familia que se lo pasa bien junta está más unida.

EL «CONFLICTO DE INTERESES» DEL CONCEJAL DE VOX (PUBLICADO EL 4 DE JULIO 2020 EN MJD MAGAZIN). El concejal trabajaba antes en una empresa de juegos de mesa. Ahora los promociona desde su cargo público. Anteriormente a su cargo político, José Rodríguez Cuadrado había desempeñado su labor como empresario de “juegos de mesa” aunque lo ha borrado de su curriculum oficial colgado en la web. Sin embargo, en sus entrevistas en prensa sigue la huella: “aún tuvo tiempo de montar una empresa de juegos de mesa” y “también ha montado una una editorial de juegos de mesa”, señalan. Por ello, en el último pleno defendió que “muchas actividades” de su departamento “no tienen ninguna subvención y por ello no aparecen en este Plan: me refiero a la Feria de Juegos de Mesa en Familia, que tuvo lugar el año pasado” y que él mismo organizó. Los críticos internos de Vox temen que la Oposición se barrunte si con estas promociones publicitarias no se estará labrando su regreso al sector que dejó. Y creen que si las urnas se le muestran esquivas en 2023 volverá al mismo, aunque su último trabajo no fuera este. Por eso desconfían y sospechan que sus rivales electorales ya tienen su titular, que pueden “soltar” en próximas convocatorias plenarias: “El portavoz de Vox promociona los “juegos de mesa” en los que antes trabajaba”.

OTRAS ACUSACIONES CONTRA VOX MAJADAHONDA DESDE QUE LLEGO AL PODER. El texto sobe Vox que ha provocado la réplica de su portavoz decía asÍ: «José Rodríguez Cuadrado, concejal de Familia. Se estrenó con el escándalo de la conferencia de Pío Moa, invitado para un programa de lecturas “en familia”. El escritor se mofó de Cs (la llamó “Gs de gilipollas”) y señaló la “abyecta miseria política” del PP. Posteriormente aprobó una desmesurada subida de sueldos y subvenciones y para paliar su impopularidad proclamó que iba a dar parte de ese dinero público a ONGs relacionadas con el Covid 19. La prensa descubrió que las únicas existentes estaban dirigidas por altos cargos de su partido y políticos afines. En otro pleno, Cs lo acusó de practicar una especie de “dumping político” al afirmar que había estado 1 año cobrando sin trabajar y que había firmado un pacto de Gobierno donde su Concejalía no tenía presupuesto. Ni se inmutó. En el último pleno, el concejal proclamó que su gestión tenía como objetivo “que las familias estén unidas y para ello deben pasárselo bien juntas. No hacer cosas en el mismo lugar sino hacerlas juntos. Debemos actuar ya para no crear el Ministerio de la Soledad que existe en Inglaterra”. Y nuevamente surgió la polémica ante lo que llamó “Ocio y dinamización familiar”, con la creación desde la Concejalía de Vox del “Distintivo Empresa Amiga de la Familia“, lo que le ha granjeado severas críticas públicas y empresariales por reactivar las subvenciones con las que en su programa prometía acabar, además de asociarlas a su ideario político. Y es que el permanente “conflicto de intereses” y las acusaciones de “falta de ética” le persiguen, la última de ellas más desconocida: la de los juegos de mesa.

Julia Bachiller

JULIA BACHILLER. Evidentemente los juegos de mesa son un instrumento de ocio, entretenimiento y educación en algunos casos. Si algo nos enseñan es en primer lugar a no entremezclar sus piezas con las de otros juegos, ya que perdería el sentido del mismo. Y en segundo lugar que se pueden jugar en solitario, en pareja o en grupo. En solitario, la responsabilidad recae sobre uno mismo, en grupo podemos caer en el error de achacar a nuestro compañero nuestro error al perder la partida. En algunos casos estos juegos de mesa son como la vida misma. Y haciendo referencia a alguno de ellos, los más tradicionales y conocidos, se obtienen algunas conclusiones que creo que pueden ser útiles para el portavoz de Vox en esta controversia pública:

Dominó: juego de estrategia en el que hay que tener buena memoria de cálculo para retener en la memoria las fichas del juego y calcular en alguna medida las fichas que están por salir y que nos pueden hacer ganar o perder la partida. Parchís: juego en el que la suerte recae básicamente en uno mismo y la puntuación que marque el dado que lanzamos. Se basa en llegar a la meta el primero. En el recorrido podemos, como usualmente se llama, «comernos» a un rival y mandarlo a la casilla de comienzo, hecho por el cual avanzaremos en nuestro camino, perjuicio que también nos puede suceder a nosotros mismos dando la victoria al rival. Monopoly: juego de comprar y vender, todos los jugadores parten con el mismo capital. El sentido común de saber comprar y construir incrementará nuestro patrimonio, siempre y cuando alguien caiga en la casilla adquirida y tenga que pagar un peaje por repostar en terreno ajeno. Lo principal es intentar que los dados no nos jueguen una mala pasada y acabemos en la cárcel. Trivial, juego de preguntas y respuestas, algunas difíciles de contestar. Ajedrez, cada pieza tiene una denominación y un movimiento distinto, si no los conoces inevitablemente no puedes jugar. A buen entendedor…

Majadahonda Magazin