ELENA MARTICORENA. Carolina Ángel Ardiaca, a la que muchos conocen como «Carola», es doctora en Psicología Clínica y de la Salud por laUniversidad Complutense de Madrid y experta en Terapia Sistémica Infantojuvenil, y ha impartido una conferencia este martes 17 de mayo (2022) en el Auditorio Alfredo Kraus de Majadahonda. «Incidencia de la COVID-19 en la infancia y la adolescencia: estrategias y pautas para la familia», ha sido el título escogido para una charla en la que Carolina Ángel ha hecho un repaso por los principales obstáculos que atraviesan las familias en la actualidad. La conferenciante ha explicado que dentro de una misma familia ya se dan muchas situaciones complejas, como el hecho de que los progenitores piensen de forma distinta, o que tengan hijos de relaciones anteriores. Se forman así familias de muy diversa índole, y esto se complica con la generación de microculturas personales, la cultura de la pareja, la cultura y estilos de vida de la familia extensiva, y en último término las organizaciones y la macrocultura. «La llegada del Covid-19 a la vida de todas estas familias, unificó de cierta manera muchas situaciones en las que nos vimos reflejados, a pesar de las innumerables diferencias entre nosotros».

La impuesta y acelerada convivencia de quienes no compartían momentos diarios, la transformación de las clases presenciales a través de plataformas digitales o la explosión de redes sociales como Instagram, Tik Tok o Twitch, transformaron por completo la sociedad en la que vivíamos, dando paso a una nueva forma de relación entre las personas. Las restricciones, prohibiciones y confinamientos provocados por el Covid-19, han dejado huella en los niños y adolescentes, y por ello, charlas como la de la psicóloga, psicoterapeuta y docente, Carolina Ángel, son tan necesarias para las familias.

CADA FAMILIA IMPACTA SOBRE LAS DEMAS. «Todos somos parte de un engranaje, de un sistema en el que vemos que todo lo que hacemos, o dejamos de hacer, tiene un impacto sobre otras personas: sobre nuestra familia, amigos, vecinos, padres de amigos de nuestros hijos, etc.» explica Carolina Ángel. Y es que solo de esta forma, cuando miramos con estas gafas a nuestra familia, nos damos cuenta de que lo que hacemos con nuestros hijos, tiene impacto sobre lo que otras familias hacen con los suyos. No por casualidad esta doctora en Psicología Clínica compara al ser humano como un gran engranaje: «El ser humano es muy complejo, porque cada individuo tiene sus propios valores, cultura, características, etc. Y aunque es cierto que en todas las instituciones educativas, sean públicas, concertadas o privadas, existe una gran integración, lo cierto es que cada familia tiene una microcultura que impacta en los demás», añade.

CAMBIO DE ROL EN PADRES Y MADRES. Por otra parte, las imágenes (dulcificadas) que teníamos asociadas a la maternidad y a la paternidad cambiaron. El confinamiento dio paso a una realidad bien distinta: padres y madres agotados y sin recursos para entretener a sus hijos, y un sinfin de explicaciones sobre el virus. Los niños, por su parte, comenzaron a tener una sensación de miedo e incertidumbre sobre cómo evolucionaría todo lo que estaba ocurriendo a su alrededor. La colaboración y la cercanía dio paso a la distancia y a la prevención. Las imágenes de libertad se sustituyeron por las de aislamiento, miedo e incertidumbre. El aumento de número de muertes en las noticias impuso la prevención de la salud física por encima de la mental. Sin embargo, los efectos psicológicos se han dejado sentir en todas las etapas de la vida, y es ahora cuando la labor de los psicólogos es más necesaria. «Las imágenes de interacción de los niños, en el colegio, en el parque, etc. dieron paso a las de interacción tecnológica, a través de dispositivos artificiales. Y si bien la tecnología nos ha permitido mantenernos unidos, también ha traído riesgos asociados a su uso, y ha posicionado a las familias en una situación de descontrol parental. Los padres, compaginando vida personal y profesional, no han tenido las herramientas necesarias para controlar a sus hijos.» explica Carolina Ángel.

CICLO DE CONFERENCIAS. El Covid-19 impactó de forma fulminante en millones de familias, que en el año 2020 tuvieron que reaprender a vivir bajo las premisas del aislamiento, la autoprotección y la incorporación de las nuevas tecnologías a todas las esferas personales y profesionales de la sociedad. Más de dos años después, y aún en plena lucha contra un virus con muchas incógnitas, pueden verse los efectos y las consecuencias de la incidencia del Covid-19 en las familias de todo el mundo. Por esta razón, el Ayuntamiento de Majadahonda, a través de la Concejalía de Infancia y Familia (Vox), ha programado una serie de conferencias y talleres dentro del programa de Retos y desafíos para la Familia.  Segunda parte: «Los adolescentes crean su propia pseudoidentidad por el miedo al rechazo»