Es imposible, cuando hablamos de torneos de tenis, no referirnos a los absolutos, los legendarios campeonatos de Grand Slam, que siguen siendo los eventos más prestigiosos, exclusivos e icónicos del mundo del deporte, y que ofrecen los mercados más atractivos para los apostantes a los que les gusta apostar en partidos de tenis en las casas de apuestas España.
Hay cuatro Grand Slams y cada uno de ellos ocupa una posición única en los corazones y las mentes de los tenistas y los aficionados a este deporte. Ganar un Slam es probablemente el mayor sueño de todos los niños que juegan al tenis, de todos los jóvenes que han crecido en la pista y de todos los jugadores adultos que quieren destacar en este competitivo mundo.
Muchos de los tenistas contemporáneos de renombre como Stefanos Tsitsipas, uno de los llamados ‘chicos malos del tenis’, Carlos Alcaraz, Taylor Fritz, Daniil Medvedev, Iga Swiatek, Ons Jabeur, Aryna Sabalenka, Maria Sakkari, etc. han hablado abiertamente de su gran sueño de conseguir un campeonato de Grand Slam desde los primeros días de su participación en este deporte.
Y lo cierto es que no son sólo ellos los que han expresado su sueño de ganar uno de estos cuatro torneos. Lo mismo ocurre con todos y cada uno de los deportistas que juegan al tenis y aspiran a ascender en su carrera y entrar en la lista de los mejores jugadores, contra todo pronóstico o incluso contra todas las predicciones.
Los Grand Slams son tan especiales porque son los acontecimientos más populares del tenis. Están arraigados a la historia de este deporte, se organizan y promocionan con todas las de la ley, a ellos acuden los cabezas de serie y los mejores jugadores del mundo y, sobre todo, concentran los ojos del mundo durante las dos semanas que está previsto que dure cada uno de los torneos.
Los cuatro Grand Slams son Roland Garros (Abierto de Francia), el Abierto de Estados Unidos, el Abierto de Australia y Wimbledon.
Roland Garros
El Abierto de Francia, como se le suele llamar, es único no sólo por ser uno de los Slam, sino por ser el único que cuenta con pistas de tierra batida. Esto significa que hay un toque extra a todo lo especial que tienen los Grand Slams y que los hace tan diferentes a cualquier otro evento deportivo.
El Roland Garros de este año ha estado marcado por la campaña de Renault cuyo tema era el clásico de todos los tiempos: «Es el momento más maravilloso del año». Y la verdad es que, esto es exactamente lo que se siente al estar en un Grand Slam, es ese momento del año donde tiene lugar la celebración absoluta del tenis.
En general, se dice que el campeonato de Roland Garros «pertenece» a Rafael Nadal, que ha sido el Rey definitivo e indiscutible de la tierra batida.
El Abierto de Francia se celebra todos los años a finales de primavera y principios de verano, desde los últimos días de mayo hasta principios de junio.
US Open (Abierto de los Estados Unidos)
El US Open es uno de los torneos de tenis más antiguos, ya que se remonta a 1881, cuando se conocía como Campeonato Nacional de Estados Unidos. En cuanto al calendario, es el último torneo programado para los últimos días del verano y los primeros del otoño. Normalmente comienza a finales de agosto y se extiende hasta los primeros días de septiembre.
Es el cierre del verano, pero también del calendario anual en lo que respecta a los Grand Slams. Todas las grandes estrellas del tenis acuden a esta gira caracterizada por el prestigio, diversión y emoción que provoca la celebración de este deporte.
Abierto de Australia
El Australia Open o Abierto de Australia es tan grandioso por varias razones, entre ellas su ubicación, el ambiente festivo y, por supuesto, la adrenalina del tenis y sus figuras.
Es el mayor acontecimiento del hemisferio sur y marca el inicio del año natural en el tenis, ya que suele celebrarse a mediados de enero, hasta los primeros días de febrero.
Wimbledon
El Campeonato de Wimbledon es el acontecimiento absoluto del tenis y probablemente el más popular de los Grand Slams. Es el rey de todos los Grand Slams, el más antiguo y el que se ha mantenido comprometido con la tradición y la etiqueta de este deporte.
El primer torneo de Wimbledon se celebró en 1887 en Londres y hasta hoy sigue siendo el Slam más prestigioso, donde se manifiesta el máximo respeto por el tenis. El código de vestimenta blanca junto con la pista de hierba única, hacen que Wimbledon destaque y sea esa competición especial que está en la mente de todos los jugadores y aficionados.
