Ahora que se acercan las fechas clave donde miles de estudiantes deciden su futuro tras las pruebas de la EBAU, una de las preguntas más importantes es: ¿dónde voy a vivir?
Llega el mes de junio. Para muchos, es sinónimo de vacaciones, viajes o jornadas laborales intensivas. Pero para miles de jóvenes en toda España, este es uno de los momentos más determinantes de su vida —o al menos, de su futuro más inmediato—. Sacar una buena nota en las pruebas de la EBAU, aplicar a la tu profesión soñada o decidir entre varias opciones atractivas. Porque no nos engañemos: no todos sabemos desde pequeños que queremos ser ingenieros aeronáuticos o médicos.
Y si todo va bien, y has conseguido plaza en la universidad, surge la siguiente gran pregunta: ¿dónde voy a vivir?
Esta cuestión se la plantean especialmente quienes estudian fuera de su ciudad. Y una de las regiones que más estudiantes atrae —de toda España e incluso del extranjero— es, sin duda, la Comunidad de Madrid.
Madrid alberga algunas de las universidades públicas más prestigiosas: la Universidad Complutense, la Universidad Autónoma de Madrid, la Universidad Politécnica, la Carlos III, la Rey Juan Carlos, entre otras. A esto se suma el creciente número de universidades privadas como Universidad Villanueva, CUNEF, CEU San Pablo, Francisco de Vitoria, ESIC, entre muchas más.
Ya lo tienes: tu nota, tu grado, tu plaza… y ahora, toca elegir dónde vivir.
Las opciones más habituales son tres: colegios mayores, residencias universitarias y pisos compartidos. Hoy te contamos por qué un colegio mayor puede ser la mejor elección para empezar tu etapa universitaria en Madrid.
Una comunidad desde el primer día
Adaptarse a una nueva ciudad no es fácil. Pero vivir en un colegio mayor hace esa transición mucho más sencilla. Desde el primer momento, formas parte de una comunidad, de una familia. Incluso antes de pisar Madrid, ya puedes estar conociendo a tus futuros compañeros.
La convivencia se basa en valores como el respeto, la diversidad de pensamiento y el compañerismo. Estudiantes de distintos grados y ciudades se cruzan, comparten experiencias y construyen amistades duraderas con un objetivo común: crecer como personas y como profesionales.
Formación más allá de la universidad
Los colegios mayores no son solo un lugar donde vivir. Por tradición, son espacios donde se fomenta la formación integral, más allá de lo puramente académico. Allí se cruzan ideas, vocaciones e intereses diversos que enriquecen el día a día.
Por ejemplo, en el Colegio Mayor Santillana, en Madrid, los residentes pueden acceder al programa de excelencia personal HÉROE, avalado por la Universidad Villanueva. Un plan formativo transversal que incluye sesiones semanales con profesionales de diferentes sectores, talleres de oratoria, clubs de medicina, periodismo, debates, catas gastronómicas, actividades culturales, voluntariados, convivencias, escapadas… en definitiva, un entorno que complementa tu paso por la universidad desde lo humano, lo académico y lo social.
Todo incluido = más tiempo para lo importante
Comparado con un piso compartido, un colegio mayor puede parecer más caro… pero si desglosas, el valor añadido es inmenso. No solo tienes alojamiento, sino una vida universitaria resuelta y sin preocupaciones.
En el Colegio Mayor Santillana, por ejemplo, se ofrece pensión completa de lunes a domingo, incluidos festivos, con desayuno, comida, merienda y cena. También hay servicio de limpieza diario y lavandería semanal. Las habitaciones son individuales con baño propio y el colegio cuenta con instalaciones como biblioteca, salas de estudio, gimnasio, campo de fútbol, cancha de baloncesto, pista de tenis, piscina, cine, salón de actos…
¿Resultado? Más tiempo para estudiar, disfrutar, hacer deporte o descansar. Tu tiempo es lo más valioso.
Experiencias únicas: viajes, convivencias y más
La vida en un colegio mayor es activa y vibrante durante todo el curso. Uno de los momentos más esperados del año es la convivencia de inicio de curso, con juegos, dinámicas, karaoke y sesiones inspiradoras que facilitan la integración.
Además, hay viajes culturales, como visitas al Parlamento Europeo en Bruselas, escapadas a casas rurales, convivencias de esquí, campos de trabajo solidarios, etc. Estas actividades no solo enriquecen el currículum vital, sino que crean recuerdos imborrables.
Un ambiente académico que impulsa tu carrera
La universidad es el centro de esta etapa, y por eso, un buen entorno de estudio es fundamental. Los colegios mayores están diseñados precisamente para eso.
En Santillana, por ejemplo, encontrarás salas de estudio, bibliotecas y lo más interesante: la figura del tutor personal, que te acompaña desde que llegas. Este tutor no solo te ayuda en la adaptación, sino que realiza un seguimiento académico, te aconseja y te guía para que saques el máximo partido a tus estudios.
En conclusión, vivir en un colegio mayor en Madrid no es simplemente alquilar un sitio para dormir. Es una elección de vida. Es apostar por una experiencia universitaria completa, donde crecer como estudiante, como profesional y como persona.
Si estás buscando un lugar donde vivir en Madrid y quieres aprovechar al máximo tu etapa universitaria, considera alojarte en un colegio mayor: un entorno acogedor, formativo y con todo lo necesario para empezar con fuerza esta nueva etapa.