En esta segunda parte de la entrevista con MJD Magazin, el presidente del PP en Majadahonda, además de alcalde, Narciso de Foxá, realiza una reflexión sobre la próxima candidatura de su partido a la alcaldía tras la reciente elección de Alberto San Juan como nuevo secretario general del partido majariego. ¿Eso significa que ya está decidida la cabeza de cartel por parte del PP? ¿alguien se ha ofrecido a ocupar el cargo? ¿Es posible que haya varios candidatos? ¿va a haber primarias?. Y Foxá responde: “Aunque hubiese estado decidido, con casi toda seguridad esas decisiones no valdrían para nada. Dos años en política es un mundo, sé que esto es un topicazo, pero es que es verdad, falta una eternidad para que haya elecciones en Majadahonda. Y no, en este momento los candidatos bajo ningún concepto están explicitados».

Foxá prosigue con su explicación: «Es más, el candidato lo designa la dirección regional, según los estatutos del PP. Y ni se ha hablado de este asunto ni se hablará en mucho tiempo, en ese sentido aseguro que no hay nada. El que sea será y cuando llegue el momento lo veremos”. Y sobre la Oposición también hace balance: “Ciudadanos y Centristas dan la cara por Majadahonda, el resto no”. Y a la pregunta sobre qué portavoz ha sido el más duro contrincante en lo que llevamos de legislatura, responde: «Desde el punto de vista dialéctico, Zacarías Martínez Maíllo (PSOE), sobre todo cuando habla de temas económicos. A veces me dan ganas de levantarme e irme. Lo que tienes que aguantar de él es muy duro muchas veces y además es muy listo. Y lo mismo dice él sobre mí cuando yo hablo o le contesto en algo».

Jorge Rubio: aprovechando que estamos a mitad de legislatura, hay un titular que dio usted en una entrevista en la que aseguraba que gobernar en minoría no era tan complicado. ¿Sigue teniendo esa percepción? N. Foxá: Depende de la Oposición. Yo estoy absolutamente en desacuerdo con la democracia proporcional en los ayuntamientos, tiene que haber cierta proporción pero yo estoy convencido de que tiene que haber una segunda vuelta. A mí no me importa que se gobierne con ideas distintas a las mías, pero que se gobierne. Y voy a poner un ejemplo: lo que no puede ser, como yo he visto en este ayuntamiento de Majadahonda hace muchísimos años, cuando no había mayorías, es que cuando había que ampliar el cementerio, porque ya solo se podían enterrar a 3 o 4 personas, la oposición dijo que no a la ampliación del cementerio por un tema absolutamente sectario y político. Depende de la oposición, si no hay mayorías, poder paralizar un ayuntamiento. Y el ayuntamiento se paraliza.

Julia Bachiller: ¿Y en el momento actual? N. Foxá: Yo lo que puede que haya dicho es que no me está resultado tan complicado, por varias razones. La primera porque en los temas de Estado de este ayuntamiento Ciudadanos está dando la cara cuando algo hace sufrir a los ciudadanos de Majadahonda, en este caso. Lo hemos visto en temas muy controvertidos, por ejemplo en los campamentos, que es un asunto que viene sobrevenido, ¿Podía haber hecho más el equipo de Gobierno? Seguro, pero venía sobrevenido porque era una empresa ajena al proceso, pero con intereses porque hace también campamentos de verano, y pone una alegación. Y el tribunal administrativo de la Comunidad de Madrid lo acepta, posiblemente con razón. Yo puedo asumir esa responsabilidad, pero una vez que ha pasado, hay que tener amplitud de miras para intentar resolverlo, no puedes dejar a 1500 niños sin campamento, no puede ser, por mucho que eso desgaste al equipo de Gobierno. No puedes decir: “la culpa la tiene usted”. Sí, la culpa la tengo yo pero el sufrimiento lo van a tener las familias que no pueden llevar a sus niños a los campamentos.

F. Utrera. ¿Solo Ciudadanos hace a su juicio oposición constructiva? N. Foxá: También Centristas, es verdad, hay partidos en Majadahonda que en esos casos dan la cara y miran más por los ciudadanos que por sus intereses como partido. Pero hay otros que no, lo tengo que decir así de claro. En ese sentido estoy muy decepcionado de esa parte de la Oposición. También digo que gobernar en minoría tiene a veces sus pequeñas ventajas. Antes, cuando se tenía mayoría absoluta, la oposición en bloque, pasase lo que pasase, hay están las actas de todos los plenos, votaba en contra del equipo de Gobierno. Ya es raro que en todos los temas estés en desacuerdo, pero lo hacían porque iban a salir las cosas, y si alguna cosa sale mal siempre puedes decir “ya lo decía yo”. Pero si salía bien no pasaba nada. Ahora ya no, y es una cosa que me ha sorprendido, porque por primera vez veo que en la oposición se pelean entre ellos, las posiciones son distintas, cada uno ya es dueño y responsable de sus actos. Si yo voto que no a una cosa que es buena para los ciudadanos y luego no sale, pasa que los ciudadanos les piden responsabilidades, y van a su despacho a exigírselas.

J. Rubio: ¿Por qué algunas de las mociones que aprueba la oposición no salen adelante? N. Foxá: Aquí se aprueban cada mes 8, 9 ó 10 mociones. Y las mociones, al final, son actos administrativos que en la mayoría de los casos, para llevarlos a un pleno yo tengo que prepararlos durante mucho tiempo. Tengo que tener informes de secretaría, de los servicios técnicos, del interventor… hay mucha gente trabajando para que todo eso sea posible, hay unos plazos, unas actuaciones iniciales y finales. En cualquier caso el estado de las mociones es un tema que a mí me preocupa. Y hasta mayo, desde 2015 se presentaron 65. Yo no sé si hay tantos puntos [de gestión del Gobierno] que se hayan aprobado en los plenos ordinarios, pero de esas 65, cerradas hay 39. Y en trámite o pendientes quedan 9. Es decir, que de 65 hay 9 que están pendientes del año 2015. En el 2016 hay 30 pendientes de 62. En el 2017 hay 22, pero es a fecha de abril. Pero es que además de las 61 pendientes, solo 15 son competencia del pleno.

F. Utrera: ¿Eso que implicación tiene? N. Foxá: Que a mí nadie me puede decir que ejecute una moción sobre algo que sea solo competencia mía. En un ayuntamiento hay competencias del alcalde, competencias de la Junta de Gobierno y competencias del pleno. Si una acción es competencia del alcalde, a mí me lo pueden pedir y yo intentar o no hacerlo, pero no me lo pueden exigir porque la responsabilidad es mía, no es del pleno. Si yo mañana esa moción que alude a una competencia mía es declarada ilegal, el responsable soy yo. Por eso a mí nadie me puede pedir que yo la haga, y si tiene dudas de legalidad, nadie me puede pedir que la ejecute, porque es algo que compete al alcalde. Yo puedo negarme a poner mi firma en algo en lo que no estoy en nada de acuerdo.

 

Majadahonda Magazin