Nuevos comunicados de asociaciones de la benemérita analizando los sucesos de las Fiestas de Majadahonda 2017 llegan a la redacción de MJD Magazin. Esta vez es la Unión de Oficiales (UO) de la Guardia Civil la que señala que no fue posible enviar antidisturbios GRS «ya que, en su mayoría, se encuentran comisionados en Cataluña para evitar altercados relacionados con el desafío independentista de la Generalitat». La UO señala que «la planificación del dispositivo de seguridad fue correcta, contando con cerca de 70 agentes entre el apoyo de la USECIC (Unidad especializada en intervención en seguridad ciudadana) de la Comandancia y los guardias civiles y policías locales de Majadahonda». Los oficiales de la benemérita indican que los refuerzos «llegaron en cuestión de minutos para ayudar a controlar la situación, llegando a estar presentes al final de la intervención más de 100 agentes entre Guardia Civil y Policía Local, a pesar de estar en turnos de vacaciones». Y elogian «la labor realizada por todos los que intervinieron en estos graves sucesos, especialmente al Comandante Jefe de la Compañía de Majadahonda, presente en el lugar de los hechos y cuya acertada y rápida intervención en la coordinación del dispositivo permitió evitar males mayores; así como al resto de guardias civiles y policías locales que actuaron con una enorme profesionalidad en momentos de gran tensión». 


Los oficiales desmienten la falta de materia antidisturbios porque «tanto la USECIC como los agentes que intervinieron conteniendo a los agresores iban equipados con el material de protección adecuado». Por contra, la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) da una versión diferente: «la Comandancia de la Guardia Civil había destacado a agentes de la USECIC de Tres Cantos, un grupo EVA de Barajas y además las patrullas del puesto de Majadahonda estaban apoyadas por otras llegadas desde todas la compañías de la Comandancia, con la excepción de la cuarta y quinta. Y para todo este despliegue de personal ocho pantallas de autodefensa y sólo había cascos para el 5%». Y añaden que «los refuerzos del GRS los mandaron a la hora del desayuno, cuatro horas después de comenzar el altercado». Estas son sus versiones integras:

Unión de Oficiales (UO) de la Guardia Civil: «La madrugada del domingo, unos lamentables incidentes producidos en las fiestas de Majadahonda acabaron con un balance de 8 agentes heridos, seis de ellos guardias civiles, en lo que parece ser una “tradición” en las fiestas de los municipios de la Comunidad ya que, por desgracia, este tipo de agresiones se repiten cada vez con mayor frecuencia. Generalmente, este tipo de eventos tan masificados cuentan con un dispositivo especial de seguridad reforzado con miembros del GRS, unidad especializada en control de masas, pero en esta ocasión, pese a haber sido solicitado, no ha sido posible ya que, en su mayoría, se encuentran comisionados en Cataluña para evitar altercados relacionados con el desafío independentista de la Generalitat. Sin embargo, pese a esta importante limitación, la planificación del dispositivo de seguridad fue correcta, contando con cerca de 70 agentes entre el apoyo de la USECIC (Unidad especializada en intervención en seguridad ciudadana) de la Comandancia y los guardias civiles y policías locales de Majadahonda, además de con los medios de protección individuales necesarios para intervenir en ese tipo de altercados como puede apreciarse en los vídeos que circulan sobre el incidente».

«Además, en cuanto la situación lo requirió se solicitaron rápidamente refuerzos a otras Unidades y, dado que había otras localidades limítrofes en fiestas, éstos llegaron en cuestión de minutos para ayudar a controlar la situación, llegando a estar presentes al final de la intervención más de 100 agentes entre Guardia Civil y Policía Local, a pesar de estar en turnos de vacaciones. Aún así, algunas asociaciones como AUGC y AEGC, con la vista puesta en las próximas elecciones al Consejo de la Guardia Civil, han preferido no salirse de su tradicional guión y convertir sus comunicados en infundadas críticas a la dirección del dispositivo de seguridad. Como ejemplos, el hecho de decir que los refuerzos tardaron horas en llegar cuando fue cuestión de minutos o denunciar falta de material, pese a que tanto la USECIC como los agentes que intervinieron conteniendo a los agresores iban equipados con el material de protección adecuado. Por ello, Unión de Oficiales quiere destacar la labor realizada por todos los que intervinieron en estos graves sucesos, especialmente al Comandante Jefe de la Compañía de Majadahonda, presente en el lugar de los hechos y cuya acertada y rápida intervención en la coordinación del dispositivo permitió evitar males mayores; así como al resto de guardias civiles y policías locales que actuaron con una enorme profesionalidad en momentos de gran tensión. Este gran trabajo se materializó en la detención de 27 personas por su participación en los hechos, algo nada habitual en este tipo de actos y que, insistimos, ha sido posible gracias a la buena planificación y a una excelente coordinación entre mandos y agentes intervinientes en el dispositivo A todos ellos, nuestra sincera enhorabuena».

La Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) reclama el cumplimiento del PRL (Prevención de Riesgos Laborales) y medios de autoprotección para cada uno de los guardias civiles: «Los incidentes de Majadahonda nos dan la razón cuando reclamamos que los agentes de la Guardia Civil tengan de dotación materiales de autoprotección. Cuando no es la falta de previsión y de personal es la falta de material, como ha ocurrido en la fiestas de Majadahonda donde 17 agentes han resultado heridos, uno de ellos un guardia civil con traumatismo en la cabeza y otro guardia con la mandíbula rota. Como ha podido saber AEGC, la Comandancia de la Guardia Civil había destacado a agentes de la USECIC de Tres Cantos, un grupo EVA de Barajas y además las patrullas del puesto de Majadahonda estaban apoyadas por otras llegadas desde todas la compañías de la Comandancia, con la excepción de la cuarta y quinta. Y para todo este despliegue de personal ocho pantallas de autodefensa y sólo había cascos para el 5%«.

«Para AEGC este es un claro ejemplo del incumplimiento en la Guardia Civil de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Nuestra asociación ha denunciado tanto en el Consejo, como en los medios de comunicación la falta de material de autoprotección. Es más se ha exigido que todos los guardias civiles lleven de dotación este material, pero mientras en el CNP llevan ya dos años saliendo de la academia con este material con la Guardia Civil se sigue racaneando hasta el mínimo céntimo de inversión. Si en la Comandancia destinaron un importante número de agentes para mantener la seguridad durante las fiestas en Majadahonda es porque preveían que podían producirse altercados. ¿Y los mandan con 8 escudos? ¿Es qué en la Comandancia piensan que los guardias civiles son superhéroes y visten calzón rojo y mayas azules

«Esa noche nuestros compañeros y los compañeros de la policía local hicieron frente “a pecho descubierto” a más de 200 jóvenes que les han lanzado piedras, adoquines y botellas de vodka y ron. Y cuando se pidieron los refuerzos del GRS los mandaron a la hora del desayuno, cuatro horas después de comenzar el altercado. Una vez más han quedado a la vista los rotos de la Guardia Civil en los que la falta de previsión siempre está presente. En Majadahonda se visualizó la probabilidad de altercados pero se les olvidó mandar a los agentes bien pertrechados. En Guadalix, donde ha sido asesinado un joven, directamente se les olvidó enviar al personal».

Policía Nacional y Local: Desde la Policía Nacional, el portavoz de la UFP, José María Benito, subraya el caldo de cultivo del alcohol y las drogas. «La violencia forma parte de la fiesta; la gente no la entiende sin ella. Y si crecen las medidas de seguridad, que deberían, por ejemplo en el caso de la venta de alcohol a menores o se realizan otras restricciones, también. Cualquier excusa es buena». Para la CCPM, Majadahonda debería reflexionar sobre el tipo de fiestas que quiere el municipio. «No es la primera vez que hay problemas; ya los hubo en 2013».

Majadahonda Magazin