La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha enviado un comunicado a MJD Magazin en el que denuncia que “hace tan solo un mes, AUGC Madrid denunciaba la falta de personal y de material en los disturbios de las fiestas patronales de Pinto, que pusieron en peligro a agentes y ciudadanos. Ya entonces, el secretario general de AUGC Madrid, Francisco Cecilia, advirtió de que situaciones como esa podían volver a repetirse si no se mejoraba la gestión y la coordinación de las unidades y no se aumentaban los efectivos. Obviamente, esto no ha sucedido, lo que ha dado lugar a unos altercados este fin de semana en las fiestas patronales de Majadahonda calcados a los que ocurrieron en Pinto”. En otro comunicado remitido a este diario el sindicato CC.OO asegura que la Delegación de Gobierno que dirige Concepción Dancausa “manifestó que una fiesta no es una situación de urgencia” y que la abogacía del Estado le había dicho que prestarse agentes de policía entre municipios durante las fiestas era ilegal, indicando a los alcaldes que decidieran dar el paso podrían incurrir en un “delito de prevaricación administrativa”. Sin embargo, “una sentencia del TSJM no suspende el acuerdo y quita la razón a la Delegación del Gobierno, por interés general y efectividad policial”. Por su parte, el consejero de Justicia de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, ha negado las acusaciones y ha citado al alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá, señalando que el dispositivo «funcionó» y que solo es necesaria una «prevención distinta de carácter previo como puede ser en materia educativa o en distintos ámbitos no estrictamente policiales”.
Comunidad de Madrid: El consejero de Presidencia, Justicia y portavoz del Gobierno autonómico, Ángel Garrido, ha considerado este martes en rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, preguntado por si la Comunidad de Madrid a la vista de los altercados vividos en fiestas locales como es el caso de Majadahonda el pasado fin de semana Garrido ha afirmado que la Comunidad de Madrid cuenta con las Brigadas Especiales de Seguridad (BESCAM), pero ha indicado que son los ayuntamientos los competentes en la materia. De hecho, ha indicado que le consta que hay ayuntamientos que han pedido reuniones a la Delegación de Gobierno para analizar la situación y los problemas. Garrido ha citado al alcalde de Majadahonda, Narciso de Foxá, señalando que el dispositivo «funcionó» y ha considerado que es necesaria una «prevención distinta de carácter previo» como puede ser en materia educativa o en distintos ámbitos no estrictamente policiales.
Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC): La escasez de personal y medios es un problema que está llevando a la Guardia Civil a una situación límite: la necesidad de solicitar apoyo ante la falta de operativos para enfrentar este tipo de altercados provoca que las localidades cercanas, al acudir al llamado, se queden desprotegidas en caso de surgir algún otro problema. Además, la tardanza en la llegada de algunos de los refuerzos empieza a ser común: las patrullas del GRS a las que se solicitó ayuda a las 4.30 horas no llegaron hasta las 8:00. El motivo: este fin de semana estuvo todo el GRS concentrado en Zaragoza, cerca de Cataluña, por el tema del referéndum. Aunque AUGC Madrid no quita importancia a este problema, considera que el GRS debería estar presente con más frecuencia en este tipo de eventos, y no que acuda solo cuando se piden refuerzos por altercados.
Hace tan solo un mes, AUGC Madrid denunciaba la falta de personal y de material en los disturbios de las fiestas patronales de Pinto, que pusieron en peligro a agentes y ciudadanos. Ya entonces, el secretario general de AUGC Madrid, Francisco Cecilia, advirtió de que situaciones como esa podían volver a repetirse si no se mejoraba la gestión y la coordinación de las unidades y no se aumentaban los efectivos. Obviamente, esto no ha sucedido, lo que ha dado lugar a unos altercados este fin de semana en las fiestas patronales de Majadahonda calcados a los que ocurrieron en Pinto: miles de jóvenes empezaron a lanzar botellas, piedras y objetos contra el personal de seguridad, la Policía local y la Guardia Civil al completarse el aforo de la macrodiscoteca y que no se permitiera entrar a más gente. En esta ocasión, sin embargo, el balance ha sido peor: seis agentes de la Guardia Civil han resultado heridos, además de dos policías locales y varios jóvenes implicados en los disturbios.
AUGC Madrid considera que la responsabilidad de esta carencia de personal es de las instituciones y responsables políticos que hacen caso omiso a las reclamaciones de las asociaciones de la Guardia Civil, que llevan años pidiendo más medios y personal y a los que siempre se les contesta con el ya manido: “no hay presupuesto”. Esto ha provocado que situaciones que debieran ser hechos aislados se hayan convertido en lo habitual: en las últimas semanas ha habido disturbios, además de en Majadahonda, en las fiestas de Hoyo de Manzanares, en Aranjuez y en Agustín de Guadalix. En todos los casos, la falta de medios y de personal ha provocado situaciones de grave peligro, tanto para los agentes de la Guardia Civil como para la Policía Local y los propios ciudadanos. El caso más grave se ha dado en Agustín de Guadalix, donde falleció un chico de 19 años por una puñalada. En Hoyo de Manzanares, por su parte, solo una patrulla con dos agentes cubría las fiestas, donde hubo altercados tanto la madrugada del viernes al sábado como del sábado al domingo de la pasada semana, lo que dio lugar a varios policías locales heridos. Jóvenes de Galapagar acudieron a las fiestas patronales de Hoyo de Manzanares y se enfrentaron a los locales, lo cual acabó en una batalla campal. Lo más sangrante es que son altercados que se producen todos los años, por lo que no es una situación imprevisible, sino algo conocido por todos y para lo que se hubiera podido poner remedio de antemano. Sin embargo, solo dos agentes, junto con la Policía Local, tuvieron que enfrentarse sin medios a cientos de violentos. Desbordados por la situación, los agentes pidieron refuerzos a las seis menos diez de la mañana. El resultado: una sola patrulla de apoyo que llegó a las 7. En el camino, un militar y dos policías locales heridos, una de ellas fuera de servicio, que tuvo que ser atendida por una lesión maxilofacial después de un puñetazo.
Este tipo de situaciones se podrían paliar, como ha repetido en múltiples ocasiones AUGC Madrid, con la reorganización de las unidades y una mejora en la gestión de los recursos humanos y de la coordinación entre las distintas fuerzas de seguridad. Siendo la falta de personal y de medios evidente, una reorganización de unidades mejoraría la eficacia y permitiría que las patrullas se encontraran destinadas donde fueran necesarias. No obstante, y aunque la Comandancia tiene la responsabilidad de la organización, no hay que olvidar que el problema principal es una carencia de personal que se da por decisiones políticas: las bajas de guardias civiles no se cubren con las plazas que se ofertan en el Cuerpo. Aunque el año pasado se convocaron 1.800 vacantes, desde 2010 y hasta 2015 solo se ofertaban 150, 300 o como mucho 500 plazas. Esto ha provocado una escasez de personal que impide que exista la cobertura necesaria en eventos como los señalados, por mucha reorganización que exista.
Por otro lado, los alcaldes se oponen, en muchas ocasiones, a esta reorganización, pues no quieren quedarse sin puesto de la Guardia Civil en su localidad. Es por ello necesaria también una labor pedagógica para que todos los implicados entiendan que esta situación es insostenible y que sin una mayor eficacia en la organización y la gestión del personal y del material seguirán produciéndose situaciones de grave peligro en las fiestas patronales, como hemos podido ver hasta el momento. Por todo ello, AUGC reclama que las instituciones y los responsables políticos respondan a las demandas de los guardias civiles y tomen las medidas necesarias para que la Guardia Civil cuente con más personal y más medios, no solo para este tipo de altercados, sino para poder atender de manera adecuada la necesidad de seguridad de los ciudadanos de la Comunidad de Madrid y de todo el Estado.
Comisiones Obreras (CCOO). La Delegación de Gobierno se equivoca al prohibir la colaboración de municipios en materia de seguridad en la Comunidad de Madrid. CCOO de Madrid vuelve a requerir a la delegada del Gobierno y al Gobierno del Partido Popular para que cambien sus políticas de seguridad en la región. El sindicato ya manifestó su disconformidad con que no se permitiera la colaboración de municipios en materia de seguridad en la Comunidad de Madrid. En septiembre del año 2016 se produjo una pelea durante las fiestas de Torrelaguna que tuvo como resultado el fallecimiento de un joven de 20 años. En ese momento se evidenció la falta de efectivos, tanto de policía local como de Guardia Civil para hacer frente a los problemas que surgían durante las fiestas en estos y otros pueblos de la Comunidad. El día 16 de septiembre, hace unos días, falleció un joven en San Agustín de Guadalix, fruto de una pelea durante sus fiestas y se evidenció nuevamente la falta de efectivos en Guardia Civil y Policía Local.
La Delegación del Gobierno, en junio de este año, negó a los ayuntamientos la posibilidad de que policías locales actúen de forma puntual y extraordinaria en otros municipios de la región, al objeto de colaborar en materia de seguridad en periodo de fiestas patronales y evitar situaciones como la de Torrelaguna. La Delegación no solo prohibió estos acuerdos sino que respondió a los ayuntamientos que solicitaron los permisos en la forma legalmente establecida, que el intercambio de policías entre consistorios “no son conformes con la normativa estatal”, hecho que desde el punto de vista no es cierto porque se lleva realizando desde hace muchos años y hasta ahora no ha habido ningún problema. Concepción Dancausa manifestó que una fiesta no es una situación de urgencia y que la abogacía del Estado había dicho que era ilegal, indicando a los alcaldes que decidieran dar el paso y prestarse agentes de policía durante las fiestas podrían incurrir en un “delito de prevaricación administrativa” y que los agentes que lo hicieran también podrían ser sancionados e incluso detenidos.
Por otro lado, empezaron a proliferar empresas de seguridad privadas que han ofrecido sus servicios y asumir las competencias de la policía local ante la actitud de la delegada del Gobierno y parece ser, que en algunos casos, la seguridad se ha cubierto con este tipo de empresas ante la ausencia de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de Policías Locales y las trabas de la Delegación del Gobierno. Ante un convenio de colaboración entre la Policía Local de Rivas- Vaciamadrid y la Policía de Madrid, para combatir infracciones en la Cañada Real, la delegada del Gobierno impugnó ante los tribunales dicho convenio. Ahora una sentencia del TSJM no suspende el acuerdo y quita la razón a la Delegación del Gobierno, por interés general y efectividad policial. CCOO de Madrid por tanto entiende que la actitud de Concepción Dancausa al no permitir la colaboración de municipios en materia de seguridad ha sido negligente y debería reflexionar sobre estas y otras decisiones que han evidenciado un desconocimiento total de la seguridad en la región.
Sí, siempre falla la seguridad, y los energúmenos sobran, no hay problemas suficientes, como para estar pendientes de los » sin cabeza» que andan sueltos.
Todo mi apoyo a las Fuerzas de seguridad.
Narciso eso de que el dispositivo de seguridad ha funcionado no parece muy creíble. Lo de recibir los guardias civiles botellazos y piedras entra dentro de lo normal? No han quemado el pueblo, pero podríamos estar lamentando bastantes más desgracias de las que han pasado.
El dispositivo de seguridad era escaso y ese tipo de eventos multitudinarios alrededor de una zona con música y alcohol sólo traen problemas que si no se controlan muy bien se van de las manos muy rápido como así fue.
Lo de los GRS aparecer tras 4 horas viniendo de Zaragoza no tiene nombre. Dice mucho del nivel de efectivos disponibles