MANU RAMOS. El propietario de la cadena de tiendas de bicicletas Bizzis, Nazario Fernández, una de cuyas 3 sedes está en Majadahonda, ha declarado este martes 10 enero (2023) al periodista Toni Carpio de la revista «CMD Sport» que la venta de ebikes (bicicletas eléctricas) ha ganado mucho terreno en 2022, «pero fagocitando la facturación que antes se obtenía con bicicletas musculares». Fernández expone que la venta media de bicicletas eléctricas deportivas se sitúa en unos 5.000 euros, lo que es equiparable a vender dos, tres e incluso cuatro bicicletas de las que se solían vender antes. Es decir, aclara el detallista, “estamos vendiendo a 1 cliente cuando antes vendíamos a 4”.
El minorista defiende que es mejor contar con abundante clientela, aunque el ticket de compra unitario sea inferior, que con pocos clientes con compras más elevadas. Sin embargo, al haberse incrementado considerablemente la demanda de ebikes, “aumenta la facturación porque se venden bicis más caras, lo que tapa la falta de ventas de otras bicicletas”. El minorista recuerda que todas las tiendas han estado largos meses esperando la entrega de bicicletas, lo cual también ha ocasionado “muchas molestias y malestar entre los clientes”. Ello ha provocado “pérdida de credibilidad” con algunos usuarios, que “al final no entienden la situación real de los suministros ya que, como es lógico, solo se preocupan de recibir su bicicleta”.
El detallista lamenta que, tras meses de demora, llegaron a las tiendas bicis que tenían mucha demanda cuando fueron pedidas hace más de un año, pero que en la actualidad no tienen rotación y se quedan en stock. En cambio, añade Fernández, sigue habiendo mucho retraso en la entrega de bicicletas que sí piden el cliente, como algunos modelos musculares de carretera y en ebikes. Bizzis dispone de una tienda en Humanes de Madrid, con una superficie de 120 metros cuadrados, otra de 100 metros cuadrados en Pinto y una última de las mismas dimensiones en Majadahonda. Cada uno de los establecimientos cuentan con un taller Shimano Service Center.
Según Fernández, el trabajo de taller se mantiene estable al nivel de otros años, dado que “la bicicleta siempre necesita mantenimiento”. Los ingresos del taller llegan a suponer el 40% del volumen de negocio anual de Bizzis. Fernández se muestra “contento” de haber cumplido los objetivos económicos fijados para el pasado 2022. Sin embargo, añade que “no fue un buen año” porque los gastos subieron mucho y porque “la facturación no ha sido real”. Esto último se debe a que durante el primer semestre buena parte de los ingresos provinieron de bicicletas vendidas en 2021 que no llegaron hasta 2022, por lo que “2022 no ha sido tan bueno como pueda parecer. Hemos crecido un 13% pero hay que mirarlo con pinzas”, concluye Fernández.
Los trabajadores del sector de bicicletas siempre se han quejado (por otro lado, como los de casi todos los sectores), al menos desde hace 15 años, que es desde que conozco a un par de ellos. Sin embargo, yo cada vez veo más ciclistas, más tiendas de bicis y materiales que no paran de subir de precio.